Barcelona no tiene espacio para aparcar miles de motocicletas

En cinco a?os el parque de motos ha crecido un 50% en Barcelona. Hay 183 motos por cada mil habitantes, ronda las 300.000, a las que hay que sumar otras 184.000 de la conurbaci¨®n metropolitana que cada d¨ªa registra medio mill¨®n de desplazamientos de motocicletas y ciclomotores con Barcelona como destino principal. Una ciudad donde hay 66.000 plazas en estacionamiento en calzada, unas 100.000 en la acera cumpliendo la normativa y 6.000 m¨¢s se?alizadas. No hay espacio para tanta moto, el sector pide m¨¢s plazas en la calle y el Consistorio aboga por un cambio de mentalidad.

Mi¨¦rcoles, 11 de la ma?ana. Calle Diputaci¨® entre Pau Claris y paseo de Gr¨¤cia: 42 motocicletas aparcadas correctamente en la calzada y 63 encima de la acera, cumpliendo la normativa, pero invadiendo todo hueco que queda entre vados, terrazas, ¨¢rboles...Un panorama que es similar en buena parte de la trama central del Eixample en los d¨ªas laborables. Y un problema de saturaci¨®n del espacio p¨²blico que puede ir a m¨¢s ya que el crecimiento del parque de motos va a m¨¢s.

Seg¨²n los datos de Anesdor ¡ªla patronal de los empresarios de la moto¡ª, en el primer trimestre de este a?o en Catalu?a se han matriculado m¨¢s de 10.000 motocicletas con un incremento del 10% respecto al mismo periodo del a?o pasado. ¡°Barcelona concentra el 22% de las motos de Espa?a y los desplazamientos en motocicletas representan el 30% de la movilidad de veh¨ªculo privado, creemos que el espacio para aparcar deber¨ªa ser proporcional, que no lo es¡±, sostiene Jos¨¦ Mar¨ªa Ria?o, secretario general de Anesdor, que ha propuesto al Ayuntamiento que cada plaza de estacionamiento de coche junto a los sem¨¢foros se transforme en un espacio para el aparcamiento de cinco motos.

Un cambio que ya se ha ido aplicando de forma progresiva por el Consistorio, que en este mandato ha sumado 10.000 plazas m¨¢s en la calzada a costa de plazas de coches: ¡°No se puede pretender que haya tantas plazas como motos hay. Entendemos que se debe minimizar el impacto en las aceras, un espacio p¨²blico que ya est¨¢ muy saturado y se seguir¨¢ ganando espacio en las calzadas, pero es necesario un cambio de mentalidad en el motorista¡±, explica Adri¨¤ Gomila, director de Movilidad del Consistorio.

Un cambio de cultura que pasa, sobre todo, por concienciarse de que la moto no te tiene que dejar justo en la puerta de destino, que igual hay que caminar un poco m¨¢s. El Ayuntamiento hizo una campa?a informativa en 60 puntos de la ciudad donde se hab¨ªa detectado un uso masivo de las aceras para aparcar. Aparcaban 3.717 motos que redujeron en un 44% ¡ª1.629 motos menos¡ª tras informar a 8.000 usuarios de las motocicletas. ¡°La multa tiene que ser el ¨²ltimo recurso y se seguir¨¢ por la l¨ªnea de informar y recordar¡±, a?ade Gomila.

Los aparcamientos apenas tienen plazas de rotaci¨®n para motos

Otra cuesti¨®n es el papel de los aparcamientos p¨²blicos y privados¡ªsubterr¨¢neos o en locales ¡ª para ayudar a la descongesti¨®n de las aceras saturadas de motocicletas. La oferta de plazas en aparcamientos es m¨ªnima: 2.700. Y, de estas, la gran mayor¨ªa son de la red municipal (BSM) que tiene 1.564 para abonados y rotaci¨®n. El precio medio del abono es de 50 euros al mes y el de rotaci¨®n de 0,81 euros la hora tarificado por minutos.

Las plazas restantes ¡ªalgo m¨¢s de 1.100¡ª son de las concesiones de los aparcamientos Saba ¡ª330¡ªy otras 814 de Bamsa, empresa mixta controlada por Saba pero en la que un 40% es propiedad de la municipal BSM. La mayor parte de estas ¨²ltimas son de abonados que pagan cuotas mensuales, seg¨²n apuntan portavoces de Saba. Una red de 40 aparcamientos que tiene el negocio centrado en la explotaci¨®n de 14.000 plazas de coches y que tampoco se siente obligado a tener m¨¢s espacio para las motos, ya que corresponde al consistorio fijar las condiciones de las concesiones. Por ahora, solo hace unas recomendaciones, sin cuotas ni porcentajes de plazas. El resultado es que apenas se ven motos en los grandes aparcamientos SABA del centro de Barcelona mientras que las aceras est¨¢n a rebosar.

El grueso de los aparcamientos privados de la ciudad no tiene plazas de rotaci¨®n para motocicletas ni tarifas para ellas. Por ejemplo, en la calle Mallorca, entre Balmes y Enric Granados, hab¨ªa en la ma?ana del viernes 140 motos aparcadas en las aceras. Un gran aparcamiento que hay en esa misma calle solo ten¨ªa unas cuantas plazas para abonados mensuales, sin posibilidad de estacionamiento de rotaci¨®n.

¡°Nosotros no podemos obligar a los agremiados a tener plazas de rotaci¨®n y tarifas para motos, es algo personal. A petici¨®n del Ayuntamiento se hizo una campa?a interna entre los agremiados pero con resultado escaso¡±, reconoc¨ªa el presidente del gremio de garajes, Vicente Artigas.

Todas las partes coinciden en que las motos no son el enemigo a batir, sino todo lo contrario. El RACC, por ejemplo, pone el acento en que se clarifiquen bien las aceras en las que no pueden aparcar para ¡°demostrar que no es una medida recaudatoria¡± y que no se sancione de forma indiscriminada cuando no hay colisi¨®n de los derechos del peat¨®n y la motocicleta en la acera. La patronal del sector pone el acento en los beneficios del uso privado de la moto en Barcelona porque ahorra un 150% de emisiones contaminantes y la liberaci¨®n de espacio que suponen respecto al uso del veh¨ªculo.

Un discurso que ¡°compra¡±, en parte, el gobierno municipal, m¨¢s preocupado por la antig¨¹edad de las motocicletas que circulan por la ciudad. Y es que, seg¨²n datos del ?rea Metropolitana de Barcelona, de las 484.000 motocicletas de la conurbaci¨®n, un 12% no tienen etiqueta de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT) para las restricciones de veh¨ªculos contaminantes, lo que equivale a una media de 60.000 desplazamientos diarios. En c¨¢lculo de motocicletas, unas 30.000, ya que suelen ser trayectos de ida y vuelta. Un problema a tener en cuenta, ya que las motocicletas y ciclomotores sin etiqueta ambiental contaminan 10 veces m¨¢s.