Un teatro para el distrito madrile?o de Retiro tras "25 a?os de lucha" vecinal

Tras a?os de lucha y reivindicaci¨®n, los vecinos y vecinas de los barrios de Pac¨ªfico y Adelfas, en el distrito de Retiro, ven m¨¢s cerca el teatro que les prometieron, un espacio esc¨¦nico ¨Csituado en una de las naves de los antiguos cuarteles militares Dao¨ªz y Velarde¨C de estilo italiano, que contar¨¢ con dos salas y un aforo de m¨¢s de 400 personas. Paralizados desde 2015, los trabajos de finalizaci¨®n se retomaron al inicio de 2019. La obra, que asciende a 3,5 millones de euros, est¨¢ planificada por el arquitecto Rafael de la Hoz. Aunque la plataforma vecinal Los Cuarteles para el Barrio esperaban ¡°poder disfrutar del nuevo teatro a finales de este a?o¡±, el Consistorio prev¨¦ que est¨¦ listo en mayo de 2020.

La idea surgi¨® en 2007, cuando Alberto Ruiz Gallard¨®n era alcalde. Pero ni ¨¦l, ni su sucesora, Ana Botella ¨Cquien cedi¨® su gesti¨®n a la empresa p¨²blica Madrid Destino¨C, llegaron a acabar las obras. Seg¨²n el actual concejal de la Junta Municipal de Distrito de Retiro, Nacho Murgui, ¡°los procedimientos administrativos de una actuaci¨®n de estas caracter¨ªsticas y la creaci¨®n del proyecto, porque el anterior gobierno nos hab¨ªa dejado un espacio vac¨ªo y sin acabar, han retrasado las obras hasta este a?o¡±.

Para entender la importancia de este teatro y otros espacios que se ubican en el actual complejo cultural y deportivo Dao¨ªz y Velarde hay que remontarse a 1981, cuando el Ministerio de Defensa cedi¨® al Ayuntamiento de Madrid la parcela de estos cuarteles ¨Ccreados un siglo atr¨¢s¨C, a cambio de una modificaci¨®n del planeamiento urbano que le permitiera construir cuatro bloques de viviendas en las parcelas contiguas, tambi¨¦n de su propiedad.

Aquella cesi¨®n se encontr¨® con la oposici¨®n de los vecinos y vecinas del barrio, quienes reivindicaban esas infraestructuras para la creaci¨®n de unas instalaciones deportivas dignas en la zona sur del distrito. As¨ª se cre¨® la Coordinadora de Retiro Pro-polideportivo en los Cuarteles Dao¨ªz y Velarde que, durante los a?os noventa, denunci¨® primero el derribo de varios de los edificios que conformaban el complejo y, posteriormente, el intento del consistorio de ubicar all¨ª la sede de Radio Televisio?n Madrid (Telemadrid), una iglesia, viviendas de lujo o un centro comercial y de ocio.

Manifestaciones, concentraciones, actos informativos, recogida de firmas, quejas al Defensor del Pueblo¡­ los miembros de la coordinadora lucharon con sus propias armas hasta que, por fin, en 2003, se inaugur¨® el Polideportivo Municipal Dao¨ªz y Velarde en la nave central de los cuarteles. A aquella primera victoria vecinal le sigui¨® la rehabilitaci¨®n de los otros edificios que acabar¨ªan albergando la Junta Municipal del Distrito de Retiro, el museo de la Polic¨ªa Municipal, la Escuela de M¨²sica Municipal y un centro cultural en la misma nave donde hoy se acometen las obras del nuevo teatro.

¡°Desde entonces se llevan a cabo multitud de actividades provechosas para el barrio¡±, cuenta Antonio Colino, miembro de la plataforma vecinal Los Cuarteles para el Barrio, que en 2015 sustituy¨® a la anterior coordinadora. ¡°Los vecinos y vecinas luchamos por estos cuarteles y por eso nos ganamos el derecho a decidir qu¨¦ ocurre en ellos¡±, a?ade.

Con la llegada de Ahora Madrid al Gobierno municipal, se cre¨® un acuerdo de colaboraci¨®n entre los vecinos y Madrid Destino para programar actividades en el complejo cultural y deportivo. ¡°Por supuesto, esta gesti¨®n continuar¨¢ con el nuevo teatro¡±, explica Murgui, quien a?ade que ¡°como en el resto de los grandes espacios culturales de la ciudad, el Ayuntamiento establecer¨¢ una direcci¨®n art¨ªstica para arrancar, pero m¨¢s tarde ser¨¢ elegida por concurso p¨²blico¡±.

El teatro contar¨¢ con un acceso independiente al resto del centro cultural y un espacio central para diferentes usos y que contendr¨¢ un mural con im¨¢genes sobre la historia del distrito. ¡°Estamos muy contentos de que finalmente este teatro se haga realidad. Con ¨¦l, se cierran m¨¢s de 25 de a?os de lucha y reivindicaci¨®n vecinal, y adem¨¢s supone un avance cultural no solo para el barrio, sino para todo Madrid¡±, concluye Colino.