Madrid Central, primera gran movilizaci¨®n contra el alcalde Almeida tras solo dos semanas en el cargo

Ni los m¨¢s de 40 grados que marcaban los term¨®metros, ni el arranque de las vacaciones de verano, ni la pereza han podido con Madrid Central (MC). Decenas de miles de personas ¡ª10.000, seg¨²n la polic¨ªa; 60.000 seg¨²n los organizadores¡ª desafiaron a la ola de calor para defender la zona de bajas emisiones (ZBE) de la capital. ¡°Estamos euf¨®ricos viendo la cantidad gente que se ha lanzado con m¨¢s de 40 grados para defender Madrid Central. Una contundente respuesta a esta decisi¨®n inaudita del Ayuntamiento de acabar con una medida que funciona y de paso arrasar las ?reas de Prioridad Residencial que llevan 15 a?os funcionando¡±, explicaba Adri¨¢n Fern¨¢ndez responsable de movilidad Greenpeace.

¡°Aparte de la salud, el lunes la ciudad puede ser un caos¡±, agregaba el representante de la organizaci¨®n ecologista, que, como otras 70 de diferentes ¨¢mbitos (la FRAVM; Fridays for Future o la FAPA Giner de los R¨ªos), es parte de la Plataforma en defensa de Madrid Central, que se form¨® hace menos de una semana, despu¨¦s de que el alcalde anunciara la moratoria de multas en Madrid Central.

La paralizaci¨®n de facto de la ZBE ¡ªque comienza el 1 de julio y en principio durar¨¢ tres meses¡ª ha prendido la mecha de la movilizaci¨®n contra el nuevo Ayuntamiento. Un hecho inaudito en Madrid: nunca un alcalde hab¨ªa sufrido una protesta tan multitudinaria a las dos semanas de hacerse con el bast¨®n de mando. Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, del Partido Popular, dirige Cibeles desde el 15 de junio, cuando consigui¨® el apoyo de Ciudadanos, partido con el que cogobierna, y de la ultraderecha de Vox, cuyos votos son indispensables para que las derechas sumen mayor¨ªa. ¡°Al tr¨ªo de Col¨®n, le va la poluci¨®n¡±, coreaban los manifestantes.

¡°El gobierno tiene que rectificar¡±, recomendaba In¨¦s Saban¨¦s, edil de M¨¢s Madrid y delegada de Medioambiente en el Gobierno de Carmena. De hecho, Saban¨¦s fue la impulsora de Madrid Central. ¡°Ha sido espectacular. Me ha emocionado¡±, reconoc¨ªa la exdelegada al ver el volumen de personas que se concentraron ayer entre Callao y Cibeles. ¡°Los madrile?os se han apropiado de la medida porque han visto que ha sido buena para ellos y por eso han reaccionado¡±, continuaba Saban¨¦s. Para el socialista Pepu Hern¨¢ndez, ¡°queda clara la ignorancia de quienes quieren revertir la medida; los ciudadanos piensan que quitarla es irresponsable¡±. Por el volumen de manifestantes, esos ciudadanos son muchos. Y ayer exhibieron m¨²sculo.

La Plataforma en defensa de Madrid Central ha ido sumando r¨¢pidamente apoyos. Si en Change.org recogieron m¨¢s de 200.000 firmas; al manifiesto se adhirieron m¨¢s de un centenar de celebrities ¡ªcomo Pen¨¦lope Cruz, El gran Wyoming, Christina Rosenvinge, Elvira Lindo, o Antonio Resines¡ª. ¡°No hay una raz¨®n de peso para paralizar la medida¡±, dec¨ªa Javier Bardem en la Cadena SER. ¡°Esto tienen un nombre: revanchismo pol¨ªtico¡±, a?ad¨ªa la portavoz de M¨¢s Madrid, Marta Higueras, a escasos metros de la cabecera de la manifestaci¨®n.

Aunque la protesta era por Madrid Central, a la convocatoria se unieron otros damnificados por las decisiones del Ayuntamiento de las derechas. En las ¨²ltimas dos semanas, Cibeles ha anunciado el cierre de la Oficina de Derechos Humanos y Memoria; apagado de los sem¨¢foros de la A-5; retirado las pancartas feministas y de apoyo a los refugiados; cancelado la proyecci¨®n de un documental en el Campo de Cebada; o cerrado el espacio vecinal La Gasolinera. ¡°Quiere abrir Madrid Central a los coches y cerrar los espacios vecinales. Esto deja clara la prioridad del nuevo Ayuntamiento¡±, lamentaba desde la manifestaci¨®n de Madrid Central Pa¨²l S¨¢ez, de 52 a?os, vecino del distrito Salamanca, y asiduo a La Gasolinera.

Vox pide una rojigualda

El Ayuntamiento tambi¨¦n ha molestado al colectivo LGTBIQ. Por un lado, con la censura de parte de una campa?a del Orgullo (concretamente de los mensajes m¨¢s reivindicativos). Por otro, con el movimiento de la bandera arco¨ªris del lugar que ha ocupado estos a?os: ese sitio fue ocupado el pasado jueves por una bandera de Espa?a que Vox hab¨ªa pedido instalar al alcalde Almeida a comienzos de semana en un mensaje en Twitter. Desde el Consistorio no encuentran ninguna conexi¨®n con ambos hechos.

¡°Desplazar la bandera del Orgullo es una falta de respeto hacia el movimiento LGTBI. Les importamos tres narices; la han puesto para cumplir el expediente. Adem¨¢s, usan la bandera nacional como arma arrojadiza contra un colectivo¡±, se quejaba Clara L¨®pez, de 39 a?os, que fue a la manifestaci¨®n de MC con un pa?uelo arco¨ªris al cuello.

Para Yetta Aguado, portavoz de la Plataforma, ¡°puede que se hayan unido otras sensibilidades a la convocatoria, pero nuestra movilizaci¨®n era clara: en defensa de Madrid Central. Y ha sido un ¨¦xito rotundo¡±. ¡°Pensamos que MC es una medida de calado pero no solo por la contaminaci¨®n sino tambi¨¦n por el modelo de ciudad que propone¡±, agregaba Aguado. Considera que el triunfo de la concentraci¨®n ha sido principalmente porque Madrid Central funciona. ¡°Los datos de poluci¨®n de mayo son hist¨®ricos [14 de las 24 estaciones de la capital registraron ese mes los niveles m¨¢s bajos de ¨®xidos de nitr¨®geno en una d¨¦cada] y los de junio apuntan en esa direcci¨®n¡±, explicaba Aguado, ¡°pero adem¨¢s, la ciudad se vuelve m¨¢s amable. La defensa de la medida es clara¡±.

La Plataforma de defensa de Madrid Central considera que tras la muestra de fuerza de ayer, ¡°el Ayuntamiento deber¨ªa parar la moratoria¡±: ¡°Es lo que ped¨ªamos hoy y es algo que, como ha quedado demostrado, comparte mucha gente¡±. El colectivo ha pedido audiencia al alcalde, pero tienen claro que no piensan abandonar las calles.

Ma?ana, primer d¨ªa de la moratoria de multas por acceder a la zona de bajas emisiones, van a estar en las cinco entradas a Madrid Central para organizar ¡°piquetes informativos¡±: ¡°Ante la irresponsabilidad del equipo de Gobierno municipal, vamos a apelar a la responsabilidad de la ciudadan¨ªa¡±.

Imaginaci¨®n contra la poluci¨®n

Los madrile?os que acudieron ayer a la manifestaci¨®n convocada por la Plataforma en defensa de Madrid Central tiraron de ingenio para reprochar al alcalde Almeida (PP) su intenci¨®n de paralizar ma?ana la zona de bajas emisiones. ¡°Pensamos diferente, respiramos igual¡±, se le¨ªa en una de ellas con dos mu?ecos, uno de color azul y otro verde, pero ambos con los pulmones limpios.

La preocupaci¨®n por la salud, m¨¢s all¨¢ de ideolog¨ªas concretas, protagonizaron varios carteles: ¡°Qu¨¦ alcalde es este que nos quiere enfermos¡±. La imagen de un ni?o con un respirador emulaba los mensajes de las cajetillas de tabaco en otra pancarta. ¡°El humo de tu coche produce asma infantil¡±, advert¨ªa. Solo faltaba a?adir que era una advertencia de las autoridades sanitarias (que lo es).

Muchos iban con mascarillas, pero algunos preve¨ªan un futuro donde estas se transformaran en un complemento m¨¢s, e incluso convertirse en tendencia, en caso de que la zona de bajas emisiones termine desapareciendo de la capital. ¡°Moda 2030¡± avisaba el cartel que llevaba una manifestante y en el que aparec¨ªa una modelo y ataviada con una mascarilla. El ¨²ltimo grito.

¡°T¨ªo Pepito [en referencia a Almeida pues sus sobrinas le llaman as¨ª], ?pagar¨¢s de tu bolsillo la multa de la Uni¨®n Europea?¡±, se preguntaba un hombre que llevaba una pancarta amarilla que cubr¨ªa todo su cuerpo. Le acompa?aba una mujer con gorro de paja ¡ª¡°Para el calor, que casi no se puede estar¡±, aclaraba¡ª y en silla de ruedas. Tambi¨¦n ten¨ªa un mensaje para el alcalde: ¡°No al cierre de Madrid Central. T¨ªo Pepito, ?es nuestra salud!¡±.

La originalidad no solo ha aparecido en pancartas y c¨¢nticos (¡°?No hay fachada para tanto facha!¡±). Si Alberto llevaba su bicicleta y la alzaba como una pancarta m¨¢s; Thomas, originario de Holanda, pero que reside en Madrid, iba exhibiendo una planta. ¡°El Gobierno de Carmena apostaba por un Madrid; veremos este nuevo Ayuntamiento¡±, apuntaba el ciclista. ¡°Creo que es muy mala idea quitar MC¡±, dec¨ªa el holand¨¦s, ¡°a algunos les falta conciencia ambiental¡±