El pacto con el PSC en la Diputaci¨®n desgasta a Puigdemont
El malestar en el secesionismo contin¨²a y los del ex 'president' intentan levantar cabeza tras los ¨²ltimos reveses.
El independentismo m¨¢s movilizado tuvo que esperar 24 horas, el pasado jueves, para recibir una explicaci¨®n tras el pacto ¡°antinatura¡± entre Junts per Catalunya y el PSC en la Diputaci¨®n de Barcelona. ¡°Es necesaria una reflexi¨®n¡±, escribi¨® en Twitter el expresident Carles Puigdemont, huido de la justicia espa?ola en B¨¦lgica. Una idea que, desde Suiza, suscribi¨® la secretaria general de ERC, Marta Rovira. Sin embargo, el malestar en el secesionismo contin¨²a y los de Puigdemont intentan levantar cabeza tras los ¨²ltimos reveses.
El pacto gracias al cual los socialistas volvieron al poder provincial tras ocho a?os de dominio del PDeCAT (antes Converg¨¨ncia) se empez¨® a fraguar en B¨¦lgica el pasado 19 de junio. Justo el d¨ªa antes de que el tambi¨¦n expresidente catal¨¢n Artur Mas se reuniera con Puigdemont para abordar el futuro del espacio neoconvergente tras a?os de desencuentros. Hasta Waterloo fueron los alcaldes que hab¨ªan aguantado el embate de ERC ¡ªy que mayoritariamente no pusieron al expresidenthuido como centro de su campa?a¡ª y los que, siendo la lista m¨¢s votada, fueron defenestrados por los pactos de los republicanos con socialistas y otras formaciones. All¨ª le pidieron a Puigdemont la bendici¨®n para el pacto en Barcelona.
Estas dos operaciones, en lugar de recoser el espacio pol¨ªtico, han terminado por echar sal a las heridas entre los bloques que, si bien concuerdan en querer lograr la independencia, se enfrentan por el m¨¦todo para alcanzarla. El primer choque vino por la posibilidad de permitir la investidura de Pedro S¨¢nchez con una abstenci¨®n, algo que apoyan los pol¨ªticos presos pero que no es compartido por el grupo parlamentario y el entorno del expresidente en B¨¦lgica.
D¨ªa tras d¨ªa, el discurso oficial de los de Puigdemont es que los socialistas catalanes son lo mismo que el PP o Ciudadanos. ¡°El PSC es el autor del 155 y el carcelero de los presos y exiliados¡±, lleg¨® a decir la mano derecha del expresident en el Parlament, Albert Batet, cuando comenzaba el tira y afloja por los Presupuestos. Ahora se prestaban los votos para investir a la alcaldesa de L¡¯Hospitalet de Llobregat, N¨²ria Mar¨ªn, como nueva presidenta de un ente supramunicipal que gestiona unos mil millones de euros al a?o. Un jarro de agua fr¨ªa que hizo que hasta la propia ANC, muy cercana a Junts per Catalunya, se movilizara en contra de la decisi¨®n y convocara una manifestaci¨®n en la Diputaci¨®n.
Aparte del resultado del propio Puigdemont en las elecciones europeas (casi un mill¨®n de votos), el balance electoral de Junts per Catalunya no fue satisfactorio para la formaci¨®n otrora hegem¨®nica en el mundo local catal¨¢n. Perder la Diputaci¨®n ¡ªun instrumento muy importante a la hora de lograr inversiones en municipios peque?os y tener as¨ª obra de Gobierno de la cual presumir¡ª era un coste muy alto. Tambi¨¦n hay una vertiente econ¨®mica. En el mandato pasado, el PDeCAT contaba con 28 cargos de libre disposici¨®n en este ente, con una masa salarial de 1,8 millones de euros. Parte de este dinero va a las arcas del partido. Los neoconvergentes pasan duros momentos econ¨®micos y dejar de gobernar la Diputaci¨®n tambi¨¦n implicaba cortar una fuente de financiaci¨®n.
¡°Ha sido un proceso doloroso¡±, dijo Laura Borr¨¤s, la l¨ªder de Junts per Catalunya en el Congresos cuando en RNE le preguntaron por el pacto. Pero el ejercicio de realpolitik de Puigdemont ¡ªtambi¨¦n acompa?ado de una dosis de venganza ante los pactos de Esquerra con el PSC¡ª termin¨® por imponerse. Ni la oposici¨®n del actual presidente de la Generalitat, Quim Torra, ni el debate que se vivi¨® hasta ¨²ltimo minuto para intentar revertir el acuerdo logr¨® frenar el pacto. Este descontento se suma a la en¨¦sima promesa incumplida de Puigdemont. La campa?a de las europeas se bas¨® en su promesa de ocupar su esca?o como eurodiputado. ?l y sus ¨¢ulicos se dedicaron a repetir hasta la saciedad que ten¨ªan lista ¡°la jugada maestra¡± para recoger el acta sin comprometer su situaci¨®n legal y mantenerse libre. Ya en las pasadas elecciones catalanas de 2017, Puigdemont asegur¨®, pese a ser consciente de que ser¨ªa detenido al poner un pie en territorio espa?ol, que volver¨ªa si era elegido.
El expresidente ni siquiera se atrevi¨® a poner un pie en Estrasburgo. Su entorno puso fotos en redes sociales en las que insinuaban que estaba cerca, pero todo se qued¨® en una provocaci¨®n. Su batalla legal para ser candidato a las elecciones europeas y su triunfo no le han servido de nada.
M¨¢s acuerdos en el ¨¢mbito comarcal
El PSC tambi¨¦n ha logrado romper en el ¨¢mbito comarcal la pol¨ªtica de bloques que impera en la pol¨ªtica catalana por el proc¨¦s. Junts per Catalunya y los socialistas pactaron ayer gobernar el consejo comarcal del Tarragon¨¨s, que agrupa a 22 municipios. Con este acuerdo ascienden a 11 los entes de este tipo en el que hay sociovergencia. Catalu?a cuenta con un total de 40 consejos comarcales, entes que sirven para mancomunar servicios. Tradicionalmente neoconvergentes y republicanos ten¨ªan mayor¨ªa, pues ten¨ªan buen resultado en el ¨¢mbito rural.
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