¡°Ponerse una prenda solo tres veces es una falta de respeto¡±
Las dise?adoras de Carmen 17 reivindican el poder de la artesan¨ªa y la exclusividad de sus creaciones
Carmen 17 es el nombre del binomio formado por las madrile?as Arancha Rodrig¨¢lvarez (46 a?os) y Sof¨ªa Nieto (32). Este taller de dise?o y realizaci¨®n de vestuario para cine, artes esc¨¦nicas y ropa a medida fue bautizado as¨ª por su ubicaci¨®n, a escasos metros de la Puerta del Sol. Abrieron sus puertas en 2013, cuando el sal¨®n de la casa de Nieto se les qued¨® peque?o. Este verano han tenido que afrontar una reforma integral del estudio. No es solo el precio a pagar por el crecimiento de su actividad, tambi¨¦n forma parte del acuerdo que cerraron con los propietarios del inmueble, m¨¢s interesados en convertirlo en un piso tur¨ªstico.
?Vaya sitio para trabajar!
Arancha Rodrig¨¢lvarez: Es un valor a?adido. Nuestra vida personal y el trabajo est¨¢n muy unidos: vivimos junto al taller. Somos amigas adem¨¢s de socias. El tiempo que requiere el taller y las experiencias que aporta son parte de nuestra vida.
?Por qu¨¦ era importante resistir?
Sof¨ªa Nieto: Aqu¨ª encontramos esos lugares que dan sabor a la vida, como Pontejos, La Casa de las Torrijas, las tiendas de telas, bordados Xutchill o el taller de tinte de Mar¨ªa Calder¨®n. Es complicado cuando los alquileres suben tanto, pero el centro de Madrid no es un parque tem¨¢tico.
?A qu¨¦ se refieren?
A. R. Todo cambia r¨¢pido. Los vecinos son expulsados de sus casas para convertirlas en pisos tur¨ªsticos y las tiendas de toda la vida cierran para montar franquicias. El fast fashion es un modelo de vida suicida que acaba con todo, tambi¨¦n con la vida real de las ciudades.
?En qu¨¦ consiste su trabajo?
A. R. No hacemos colecciones de moda, sino dise?os exclusivos. Preguntamos a nuestros clientes qu¨¦ estilos le gustan y c¨®mo se sienten c¨®modos. Estudiamos al personaje y traducimos su car¨¢cter a la prenda.
?C¨®mo lo hacen?
A. R. No hay receta. Tampoco fusilamos ni repetimos. Si alguien ha visto una creaci¨®n en otro sitio y nos la pide, le decimos que no. El nuestro es un trabajo art¨ªstico. Hay cosas que no se pueden hacer industrialmente.
?Es cara la ropa a medida?
S. N. Depende de con qu¨¦ se compare. Si la gente hiciera la cuenta de cu¨¢nto se gasta en fast fashion al a?o, se sorprender¨ªa. Con 3.000 euros te haces la ropa a medida que necesitas. Adem¨¢s, te va a quedar mejor y te va a durar mucho m¨¢s tiempo. Hay que ser coherente con lo que se consume.
?Hay trucos para dise?ar?
S. N. No hay ning¨²n dise?o malo, sino una aplicaci¨®n err¨®nea. Todo dise?o tiene sentido, seg¨²n qui¨¦n y c¨®mo lo lleve.
?Hemos olvidado lo artesano?
A. R. No cuidamos la artesan¨ªa porque estamos embobados con otros est¨ªmulos.
?C¨®mo viste Madrid?
S. N. Es un lugar ecl¨¦ctico y flexible. En lugares m¨¢s peque?os hay una imposici¨®n, pero aqu¨ª la gente viste como le sale del madro?o.
?Hacia d¨®nde va la moda?
A. R. No lo sabemos, ni nos interesa. Nos importa el impacto social. Ponerse una prenda solo tres veces es una falta de respeto.
?La culpa es de las redes sociales?
A. R. Nos horrorizan las influencers. Estamos en contra de ese modelo de negocio porque anula por completo a las personas.
?Qu¨¦ es lo m¨¢s complicado?
A. R. Las limitaciones de tiempo y presupuesto.
?En qu¨¦ se inspiran?
S. N. Tenemos un gran amor por el folclore.
?Se est¨¢n perdiendo ciertas tradiciones?
A. R. No, la gente se viste de chulapo en San Isidro. Hay un grupo fiel de gente mayor, pero cada vez son m¨¢s los j¨®venes que abrazan la tradici¨®n.
?Qu¨¦ es el nuevo casticismo?
S. N. Hemos innovado con trajes de chulapa. El primero fue para Sabina Urraca, periodista.
En ese aparec¨ªa un mensaje.
A. R. Sabina volv¨ªa a casa de las fiestas de la Paloma y sufri¨® una agresi¨®n. Pedimos a Ezequiel Hurtado, un dise?ador gr¨¢fico, que creara un logo combativo y Sabina nos propuso a?adir el ¡°Ves tranquila, a la manera de hablar castiza¡±. Nos parece una forma de sensibilizar. Hemos hecho mil parches para denunciar una realidad que hay que cambiar. Las mujeres no estamos seguras al caminar de noche solas.
Unidas por el cine
Cuando Arancha Rodrig¨¢lvarez acab¨® su carrera de Matem¨¢ticas en 1999 se dio cuenta de que no quer¨ªa dedicarse a ello, as¨ª que se march¨® a trabajar a Londres. Su vida cambi¨® cuando descubri¨® Saint Martins, una escuela de arte donde estudi¨® moda. Al regresar a Espa?a conoci¨® a Sof¨ªa, que estudiaba en la RESAD y dise?aba el vestuario de un montaje. Una de las actrices que participaba las present¨® y colaboraron juntas por primera vez. Luego volvieron a hacerlo en una pel¨ªcula, La estrella, lo que les llev¨® a montar juntas un negocio. Desde entonces son inseparables.
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