La antigua red de cauces inutilizados que agravaron la inundaci¨®n de la Vega Baja
Los ecologistas critican el ¡°estado de degradaci¨®n¡± de las salidas al mar del agua del Segura
El agua que cae en tromba, como ha sucedido recientemente en la Vega Baja del Segura (Alicante) no se puede controlar. Buena parte del territorio de la comarca m¨¢s meridional de la provincia de Alicante est¨¢ ganado al mar y la posibilidad de que se inunde es siempre elevada. Por este motivo, "ya en la Edad Media se teji¨® una red de azarbes", los canales que reciben el agua sobrante de riegos o lluvias, "cauces que tienen que evacuar hasta el mar las aguas que inundan la Vega Baja". Sin embargo, esta red se encuentra "en un completo estado de degradaci¨®n", seg¨²n denuncian desde la asociaci¨®n ecologista Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA), que prev¨¦n que el anegamiento de tierras se prolongue m¨¢s de lo deseable.
Las v¨ªas de salida del agua ca¨ªda, desbordada del Segura y acumulada en los terrenos agr¨ªcolas o urbanos se han estrechado, cimentado, impermeabilizado, taponado y descuidado, seg¨²n denuncian Sergio Arroyo y Miguel ?ngel Pav¨®n, miembros de AHSA. Por un lado, la Generalitat Valenciana ha invertido dinero p¨²blico en "forrar de hormig¨®n" los azarbes, con el fin de "modernizar los sistemas de regad¨ªo y ahorrar agua". Sin embargo, a juicio de Arroyo, lo que se ha conseguido es "estrechar e impermeabilizar su cauce", con lo que "se ralentiza" la salida del agua y se "disminuye la capacidad de drenaje del terreno", factores que favorecen el estancamiento. Sobre todo, si se tiene en cuenta que la recanalizaci¨®n del Segura efectuada a partir de 1987 situ¨® el curso del agua "por encima de los terrenos circundantes", con lo que se dificulta que pueda recoger el caudal estancado.
Tampoco ayuda, contin¨²an, la falta de "trabajos de control, limpieza y mantenimiento del cauce del Segura", labor que corresponde a la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Segura (CHS). Arroyo asegura que este organismo, dependiente del Gobierno, abandon¨® esta tarea en 2015 y "achac¨® la culpa del estado del r¨ªo a los ayuntamientos", a los que lleg¨® a "incoar expedientes sancionadores", como en el caso de Guardamar, localidad en la que desemboca el r¨ªo. Esta actitud, puntualiza Arroyo, "se rectific¨® en 2018", con la sustituci¨®n de la c¨²pula directiva de la CHS. Los nuevos dirigentes "ordenaron puntuales limpiezas de basura y vegetaci¨®n en algunos puntos de la desembocadura del r¨ªo".
Sin embargo, desde AHSA aseguran que la gesti¨®n de la confederaci¨®n en los ¨²ltimos episodios de lluvias ha sido deficiente. Como muestra, alegan que la barrera de contenci¨®n de residuos que se instal¨® en el cauce viejo del Segura, a la altura de Guardamar, actu¨® de tap¨®n durante los primeros d¨ªas de temporal. "Y fue el propio ayuntamiento el que tuvo que abrir esta infraestructura, a pesar de que depende de la CHS".
El recorrido que hace AHSA por las "decisiones pol¨ªticas cortoplacistas y adoptadas de espaldas a la realidad, a la naturaleza, a la emergencia clim¨¢tica y a las propias personas" en el cauce del Segura no se queda exclusivamente en la desembocadura ni en los azarbes que dan salida al mar, sino que se remonta a la frontera con la provincia de Murcia. "El r¨ªo Ch¨ªcamo", que vierte en el Segura, "no est¨¢ canalizado desde el municipio de Benferri", a pesar de que era una actuaci¨®n incluida en el Plan de Acci¨®n Territorial de Prevenci¨®n del Riesgo de Inundaci¨®n en la Comunidad Valenciana (Patricova), firmado por el Consell en 2003. "Se presupuestaron 870 millones para obra civil y en la Vega Baja, pr¨¢cticamente no se ha ejecutado nada", denuncia Pav¨®n.
Cauce eliminado
"El cauce del Ch¨ªcamo que existi¨® ha sido aterrado y eliminado" por la extensi¨®n de terreno agr¨ªcola y la construcci¨®n de viviendas y el agua que deb¨ªa conducir como "funci¨®n natural", en realidad, "se desparrama libremente por todos los terrenos del corredor entre las sierras de Orihuela y Callosa, inund¨¢ndolo todo a su paso". Es uno de los vectores "por los que ha entrado agua en Orihuela, Redov¨¢n, Cox y Granja de Rocamora", advierte Arroyo. "El pol¨ªgono del Campo Alto y el barrio de San Carlos", ambos en Orihuela, se han inundado por esta causa, a?ade Pav¨®n.
Tampoco se han ejecutado, contin¨²an los representantes de AHSA, los 600 millones de euros que el Patricova destin¨® a "medidas de restauraci¨®n hidrol¨®gica forestal", es decir, la restauraci¨®n de una cubierta vegetal que pretend¨ªa "reducir las escorrent¨ªas a favor de la absorci¨®n de agua hacia los acu¨ªferos". Con lo que, en opini¨®n de Pav¨®n, el plan auton¨®mico "se ha mostrado completamente insuficiente al no servir para atajar el descontrol urban¨ªstico" ni las cat¨¢strofes naturales.
Finalmente, Pav¨®n hace hincapi¨¦ en el camping del grupo Marjal que se inund¨® estos d¨ªas y oblig¨® a su desalojo, situado en "unos terrenos no solo inundables, sino incluidos en un espacio natural protegido por el Cat¨¢logo de Zonas H¨²medas de la Comunidad Valenciana", junto a la desembocadura del r¨ªo en Guardamar. Para Pav¨®n, "lo m¨¢s l¨®gico ser¨ªa desmantelar y cerrar" estas instalaciones, pero apunta que "nadie, ni el ayuntamiento, ni la CHS ni la Generalitat han hecho nada para corregir la situaci¨®n".
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