La alcaldesa de M¨®stoles, reprobada: ¡°No he colocado a nadie a dedo¡±
La votaci¨®n, que no es vinculante, sale adelante por 17 votos en contra de Noelia Posse, 10, los del PSOE, que la apoyan
S¨ª a su reprobaci¨®n como alcaldesa de M¨®stoles. Traducci¨®n: no a la socialista Noelia Posse, que seguir¨¢ en el cargo hasta que dimita o la oposici¨®n se una en bloque y firme una moci¨®n de censura que anhela, pero no afianza. La segunda ciudad de la Comunidad de Madrid (200.000 vecinos) ha vivido este lunes un pleno extraordinario. Los 13 concejales de la oposici¨®n (seis del Partido Popular, cinco de Ciudadanos y dos de Vox), convocaron esta sesi¨®n tras la crisis generada en el Ayuntamiento por el nombramiento, por parte de la regidora, de cuatro cargos en septiembre, adem¨¢s de un aumento econ¨®mico: su hermana, su t¨ªo, una amiga ¨ªntima, un amigo de una compa?era y un complemento de 800 euros a su expareja. Ninguno de ellos sigue ya en el puesto. ¡°Ya he pagado un alto precio por ello¡±, ha dicho la alcaldesa. Sin embargo, tambi¨¦n fue reprobada por las formaciones de izquierdas que apoyaron su investidura en junio: Podemos (dos ediles) y M¨¢s Madrid Ganar M¨®stoles (otros dos). El resultado de la votaci¨®n fue contundente, pero no vinculante: 17 votos a favor y 10 en contra, los de los socialistas.
A las 9.15 de la ma?ana una fila de vecinos hac¨ªa cola para entrar al Ayuntamiento. ¡°Esta se?ora seguir¨¢ hasta que quieran en La Moncloa¡±, afirmaba To?i Qui?ones, de 65 a?os. ¡°Se la ha criticado demasiado¡±, aseguraba Florentino Rodr¨ªguez, de 68. 45 minutos despu¨¦s, con el pleno abarrotado y con vecinos que no pudieron entrar viendo la sesi¨®n desde las televisiones de los pasillos, Posse pronunci¨® las cinco palabras esperadas: ¡°Vamos a iniciar el debate¡±.
¡°Desde Podemos M¨®stoles¡±, observ¨® la portavoz M¨®nica Monterreal, ¡°creemos que debe dar un paso a un lado. Hay que decir que esto es para una persona en concreto, no para el PSOE. Queremos un gobierno progresista. Muchas gracias¡±. La alcaldesa, que ejerc¨ªa de moderadora en su propia moci¨®n, contest¨® ipso facto: ¡°Gracias a usted. Ahora, Vox¡±. E Israel D¨ªaz ¡ªcon una corbata verde a juego con el color de su formaci¨®n¡ª consider¨® que antes de opinar sobre la regidora Posse, era necesario aclarar una duda que no estaba encima de la mesa. ¡°Esto lo hubiera hecho igual si un hombre estuviera en el cargo. Lo digo para que nadie me acuse de mis¨®gino¡±. La pol¨ªtica mostole?a ha llegado a tal punto que hasta explica lo que no hay que hay explicar.
¡°Esta situaci¨®n ha llegado demasiado lejos", prosigui¨®, ¡°hasta ?ngel Gabilondo le anim¨® a que dimitiera¡±. Posse, que pas¨® medio pleno mirando unos papeles y anotando frases con su zurda, hizo un gesto contrariado al escuchar el nombre del portavoz de su partido en la Asamblea de Madrid. Aprovechando esta mueca, el edil de la formaci¨®n de Santiago Abascal comenz¨® a jugar con el nombre de Franco: ¡°Franco est¨¢ esc¨¦ptico¡±. La sala intuy¨® que Vox hablaba del secretario regional Jos¨¦ Manuel Franco al hablar de Franco en presente y no en pasado. Un sketch.
El portavoz del PSOE y secretario general de la agrupaci¨®n local, Alejandro Mart¨ªn, quiso aclarar este punto minutos despu¨¦s: ¡°La exhumaci¨®n de Franco es el jueves, lo digo porque como hablan tanto de ¨¦l¡¡±. Un par de vecinos soltaron unas carcajadas que sonaron m¨¢s a enlatadas que a sinceras. ¡°Nosotros asumimos los errores¡±, insisti¨® el socialista, ¡°sabemos que la acci¨®n de Gobierno no es perfecta. ?Se han puesto ustedes ante el espejo?¡±. Y comenz¨® a enumerar casos de enchufismo de todos los partidos por Espa?a: ¡°Se?ores de Ciudadanos, ?son ustedes el Don Limpio de la pol¨ªtica?¡±.
El portavoz de Ciudadanos, Jos¨¦ Antonio Luelmo, y la concejala Raquel Guerrero asintieron con la cabeza pese a que la pregunta era ret¨®rica. Ante semejante respuesta, Luelmo y Guerrero cuchichearon al o¨ªdo con la boca tapada, como si, adem¨¢s de concejales, tambi¨¦n fuesen futbolistas. Fue tal la ristra de acusaciones del PSOE al resto de formaciones que un banco del pleno comenz¨® a gritar que hab¨ªa que volver a la ciudad: ¡°M¨®stoles, M¨®stoles, M¨®stoles¡±.
¡°Aqu¨ª la que ha nombrado a su hermana ha sido usted. Dimita¡±, replic¨® M¨¢s Madrid Ganar M¨®stoles. ¡°?Sabe lo que nos hubiese costado los enchufes?", contest¨® Ciudadanos, ¡°?un mill¨®n de euros!¡±. Fue entonces cuando Posse pidi¨® la palabra. ¡°Ser¨¦ breve¡±, dijo. ¡°Comet¨ª un error. No he colocado a nadie a dedo¡±. Desde el pasillo se colaron con fuerza los abucheos por debajo de la puerta. ¡°Lo que no se gana en las urnas no se puede ganar en los despachos¡±. Minutos despu¨¦s, el secretario ley¨® la votaci¨®n: 17 votos a favor de la reprobaci¨®n y 10 en contra.
Fuentes de la direcci¨®n regional encabezadas sostienen que ¡°la votaci¨®n solo puede ayudar a que ella reflexione¡±. La regidora se fundi¨® en un fuerte abrazo con uno de sus ediles tras la votaci¨®n. El PSOE de M¨®stoles celebra hasta las reprobaciones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.