¡°Es un milagro que la revista aguante 35 a?os¡±
La publicaci¨®n resiste a internet y a la ca¨ªda de lectores de papel
Primero fue Vibraciones, en los lejanos setenta, luego fue Rock Espezial y, desde 1984, es RockdeLux, la revista decana de la prensa musical espa?ola. Vivi¨® sus momentos de gloria entre finales de los noventa y mediados de los a?os 2000 y desde entonces se mantiene aunque con crecientes dificultades. ¡°Primero nos golpe¨® la crisis econ¨®mica, luego la crisis de lectura y m¨¢s tarde la crisis de la gratuidad, nadie quiere pagar por los contenidos en la red. Desde entonces, resistimos¡±, afirma con un moh¨ªn de fatalidad Santi Carrillo, el director de una publicaci¨®n que celebra sus 35 a?os de existencia. Y lo hace con un n¨²mero especial en el que repasa lo mejor de la ¨²ltima d¨¦cada no solo en m¨²sica, sino tambi¨¦n en series, c¨®mics, cine y literatura. ¡°Estos n¨²meros son los que mejor se venden porque en el fondo funcionan como gu¨ªa de consumo y resumen de las mejores producciones culturales¡±, puntualiza. Dios aprieta, pero no ahoga, que dec¨ªan los abuelos.
N¨²meros como este, de amplio espectro cultural, pueden ser el futuro de la publicaci¨®n, obligada a redefinirse en tiempos hostiles: ¡°Estamos d¨¢ndole vueltas a otro tipo de publicaci¨®n, una revista que ampl¨ªe la mirada cultural, que incluso entre sin frivolidad en asuntos de consumo, que desarrolle de otra manera los temas y las entrevistas y que as¨ª responda a los nuevos tiempos. De momento es solo una idea¡±. Y es que los tiempos han cambiado incluso m¨¢s de lo que Bob Dylan preve¨ªa: ¡°Hoy, el oyente accede a la m¨²sica en el mismo momento que t¨² y puede tomar las decisiones de compra en un instante. Ahora funcionamos m¨¢s que nunca como filtro y gu¨ªa en una jungla en la que es f¨¢cil perderse¡±.
Para Carrillo, la digitalizaci¨®n e internet han tra¨ªdo lo que ¨¦l considera el punto de inflexi¨®n de la crisis de la prensa, la m¨²sica y la de la informaci¨®n general. Cree que ¡°se han conjugado la gratuidad propia de la red con la p¨¦rdida del h¨¢bito de lectura en papel entre los m¨¢s j¨®venes¡±. De aqu¨ª se derivar¨ªa el tercer elemento que ahondar¨ªa en el car¨¢cter resistencial de Rockdelux, la dificultad de renovar su p¨²blico: ¡°Los m¨¢s j¨®venes viven en las pantallas y nosotros, pese a tener web, no queremos entrar en un mundo que te obliga a ofrecer contenidos gratis y que no da tiempo a ponderar la m¨²sica de la que hablas. En la red se opina con mucha frivolidad¡±.
Los efectos de la tecnolog¨ªa se hacen notar tambi¨¦n en aspectos tan musicales como el languidecer de los ¨¢lbumes: ¡°Muchos de los nuevos estilos, los de los m¨¢s j¨®venes, ya se expresan por medio de canciones, como ha demostrado Rosal¨ªa editando canci¨®n m¨¢s clip. Ello implica dificultades para percibir el asentamiento de un artista y su posible trascendencia, pues todo es veloz y fungible. Nosotros, como representantes de la vieja escuela del rock, nos sentimos sometidos al concepto ¨¢lbum¡±, asegura. Eso dificulta la conexi¨®n entre la revista y la juventud y sus nuevas tendencias, torpedeando la subsiguiente renovaci¨®n de p¨²blico: ¡°Cuando dedicamos la portada a J. Balvin e hicimos un informe sobre reguet¨®n logramos que nuestros lectores no nos comprendieran y los destinatarios naturales de esta informaci¨®n no se dieron por aludidos al no leer papel. Fue el n¨²mero que menos vendi¨® en la historia de la revista¡±, reconoce sinceramente Carrillo.
Ortodoxia y prestigio
Percibida siempre como una revista muy especializada y ajena a lo m¨¢s popular, su director reconoce parcialmente algunos errores: ¡°la ortodoxia y el purismo de Rockdelux, que siempre ha mantenido distancias con lo m¨¢s popular, se han evaluado como elementos que han cerrado el nicho de p¨²blico de la revista. Quiz¨¢s hemos pagado mantener nuestra postura, un poco ajena a lo que estaba pasando para no entrar en el juego de las marcas y se nos ha percibido como los raros que est¨¢bamos al margen. Es probable que hayamos abonado esta idea¡±, concede.
La ventaja es que el prestigio de la revista se mantiene inc¨®lume, que el rigor sigue siendo un elemento central y que en el fondo su credibilidad es lo que le ha mantenido a flote m¨¢s de tres d¨¦cadas: ¡°Mantenernos 35 a?os ha sido un triunfo y, pese a lo que cuesta encontrar un quiosco, nos siguen comprando¡±. No es poco en estos tiempos l¨ªquidos.
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