Nepotismo en las venas del notariado chileno

En un pa¨ªs donde un mill¨®n de personas est¨¢ sin trabajo y los ingresos promedio no son nada frente a los 14 millones mensuales que un notario puede llegar a ganar (unos 14.700 d¨®lares), sorprende que la abogada Mar¨ªa Elena Leiva, con apenas tres a?os de experiencia profesional, sea la ¡°¨²nica elegible¡± para un codiciado puesto notarial.

Sin embargo, este aparente asombro se desvanece al descubrir que es hermana del diputado del Partido Socialista Ra¨²l Leiva y que su t¨ªo, hermana y sobrino tambi¨¦n ejercen como notarios, dejando al descubierto un nepotismo y una endogamia descarados que afligen al sistema notarial chileno. Un sorprendente 40% de los notarios tiene lazos familiares con figuras prominentes del Poder Judicial y del Congreso (Am¨¦rica Transparente, 2020), tejiendo una red de favores que, ir¨®nicamente, erosiona la confianza en aquellos encargados de garantizar la misma fe p¨²blica. La justicia, lejos de ser ciega, parece guiarse por el ¨¢rbol geneal¨®gico.

?Un solo candidato en un sistema supuestamente meritocr¨¢tico y transparente? Algo huele mal y desde hace ya demasiado tiempo. Es cosa de revisar los variados esfuerzos legislativos infructuosos que no han llegado a puerto en las ¨²ltimas d¨¦cadas. De hecho, el ¨²ltimo intento, un proyecto de ley a¨²n en tr¨¢mite, se basa en un lapidario informe de 2018 de la Fiscal¨ªa Nacional Econ¨®mica (FNE), el cual dej¨® al descubierto que abolir las ganancias monop¨®licas requerir¨ªan de una profunda reforma al sistema notarial, sin medias tintas.

Ante la opacidad de los concursos para los cargos de notarios llevado a cabo por la Corte de Apelaciones, la iniciativa busca inyectar meritocracia a los nombramientos con par¨¢metros objetivos y transparentes de selecci¨®n. A ello se sumar¨ªan nuevas indicaciones del ministro de Justicia, para utilizar la Alta Direcci¨®n P¨²blica y as¨ª excluir al Poder Judicial del proceso, evitando la mano negra en la conformaci¨®n de ternas. Pero esto solo tendr¨¢ efectos si aplica a todas las notar¨ªas existentes. De lo contrario, habr¨¢ que esperar hasta que Mar¨ªa Elena Leiva cumpla los 75 a?os y otros cuantos m¨¢s vitalicios.

El problema no termina en el nombramiento, m¨¢s bien comienza: las notar¨ªas cobran precios que superan hasta 11,6 veces el m¨¢ximo permitido, discriminando incluso entre clientes de una misma notar¨ªa. Esto ocurre ante la indiferencia del ente fiscalizador ¨CPoder Judicial¨C y sin aprovechar los avances tecnol¨®gicos que permitir¨ªan no solo una mejor fiscalizaci¨®n, sino una reducci¨®n de costos de hasta el 96% si estos servicios se realizan en l¨ªnea (FNE, 2018).

Chile tiene apenas 1,66 notar¨ªas por cada 100 mil habitantes, una cifra baja en comparaci¨®n internacional (Agostini, 2023). Es esencial abrir la competencia, eliminando el l¨ªmite al n¨²mero de notar¨ªas y la restricci¨®n geogr¨¢fica, para as¨ª mejorar urgentemente la cobertura y calidad del servicio notarial. El proyecto en cuesti¨®n introduce la resistida figura de los fedatarios, concebidos como nuevos ministros de fe encargados de las funciones m¨¢s rutinarias. En el fondo, el objetivo es regularizar y ampliar la labor de los asistentes de mes¨®n que actualmente gestionan parte del 83% de los tr¨¢mites que no tienen contacto con el notario, sin requerir pericia jur¨ªdica significativa. Estos asistentes act¨²an como pseudo notarios, aumentando los ingresos del jefe. M¨¢s competencia con m¨¢s actores baja los precios.

Hemos visto ciertos progresos, ya que se han logrado simplificar algunos de los m¨¢s de 200 tr¨¢mites que nuestra legislaci¨®n obliga a notarizar. Aunque el camino es extenso y seguir¨¢ la resistencia del lobby y la captura regulatoria, la necesidad de una reforma profunda es imperativa frente a un sistema notarial ineficiente, poco innovador y de costos exorbitantes que no podemos seguir tolerando.