Peso Pluma en el Festival de Vi?a del Mar: la visita que incomoda a Chile
El certamen musical confirma la participaci¨®n del fen¨®meno de la m¨²sica urbana mexicana, pese a las presiones para que lo cancelaran por su apolog¨ªa a la narcocultura

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A mi me gusta chambear
Y si la orden es matar
eso no se cuestiona
La estrofa es de Gavil¨¢n II, una canci¨®n que interpreta el mexicano Peso Pluma, de 24 a?os, y su primo Tito Double P. Tiene 56 millones de reproducciones en YouTube. No es uno de los grandes ¨¦xitos de Peso Pluma, pero es el tipo de letras que ha incomodado a parte de la sociedad chilena, especialmente la pol¨ªtica, que lleva d¨ªas abogando por que el Festival de Vi?a del Mar cancele la participaci¨®n del artista por considerar que sus canciones son una apolog¨ªa al narcotr¨¢fico y la violencia y que darle tribuna en el masivo certamen musical implica normalizar la narcocultura. El certamen, sin embargo, ha ratificado este mi¨¦rcoles la asistencia del cantante. ¡°No existen argumentos jur¨ªdicos ni contractuales para revocar la participaci¨®n del artista¡±, ha informado la organizaci¨®n en un comunicado.
El debate sobre Peso Pluma escal¨® esta semana hasta el palacio presidencial de La Moneda y el Congreso. La academia, por su parte, se dividi¨® entre los que abogaban por cancelar el espect¨¢culo del mexicano y quienes defend¨ªan que eso no iba a cambiar que los j¨®venes lo escuchen, m¨¢s bien cerrar¨ªa una discusi¨®n que, debido a la crisis de seguridad que azota al pa¨ªs, deber¨ªa abrirse.
Peso Pluma no es un artista que reciba mucha atenci¨®n medi¨¢tica en Chile. S¨ª son¨® su nombre cuando la revista Rolling Stone nombr¨® mejor canci¨®n de 2023 su tema Ella baila sola o cuando desbord¨® el Movistar Arena como parte de su gira internacional que recaud¨® 1,8 millones de d¨®lares. Una columna de opini¨®n del soci¨®logo Alberto Mayol, sin embargo, cambi¨® el panorama la semana pasada al plantear que en un evento p¨²blico, transmitido por un canal del Estado, le dar¨¢ tribuna a un promotor de la cultura narco.
El texto provoc¨® varios coletazos. La diputada Joanna P¨¦rez, del partido Dem¨®cratas, de centro, present¨® un proyecto de ley para prohibir la participaci¨®n de artistas que promuevan el narcotr¨¢fico y otras actividades delictivas en eventos masivos financiados con recursos p¨²blicos, mientras el directorio de Televisi¨®n Nacional de Chile (TVN), el canal de televisi¨®n p¨²blico que se encarga de parte de la gesti¨®n y de la transmisi¨®n del Festival de Vi?a del Mar, solicit¨® este martes cancelar la participaci¨®n del cantante mexicano, argumentando que ¡°no puede compartir, transmitir, ni fomentar, repertorios alusivos a la violencia, el narcotr¨¢fico y otros elementos relacionados con la llamada narcocultura¡±. La petici¨®n no prosper¨®.
La alcaldesa Macarena Ripamonti, militante de Revoluci¨®n Democr¨¢tica del Frente Amplio, la coalici¨®n del presidente Boric, no se ha pronunciado sobre la pol¨¦mica. Para definir la parrilla del festival, los canales de televisi¨®n, que hacen de productores del evento, deben proponer un listado de artistas al municipio y este es el que da el visto bueno o descarta a cada uno. Este peri¨®dico intent¨® contactar a la alcaldesa Ripamonti sin ¨¦xito.
¡°Si este asunto escal¨® como escal¨®, no es porque la columna sea extraordinaria ni porque la cantidad de p¨²blico que me lee habitualmente sea gigantesca¡±, dijo Mayol a EL PA?S. ¡°Fue porque, justamente, toc¨® las fibras sensibles. Despert¨® la sensaci¨®n de que al menos tenemos que discutir esta problem¨¢tica en serio a nivel pol¨ªtico y no quedarnos en la inacci¨®n¡±. Marisol Garc¨ªa, periodista especializada en m¨²sica popular chilena, asegur¨® a esta diario que considera necesario debatir sobre la m¨²sica popular y sus v¨ªnculos con la violencia y sus efectos, pero cree que esa discusi¨®n excede por mucho la figura de Peso Pluma. ¡°En los ¨²ltimos a?os ha habido un descuido en lo que se est¨¢ desarrollando en el trap, donde menores aparecen con armas o apolog¨ªas de violencia. Es necesario discutirlo, pero no he visto una inquietud previa por ese tipo de debates y me sorprende que se instale s¨²bitamente por la venida de un m¨²sico exitoso¡±.
La investigadora agreg¨®: ¡°Parte de la m¨²sica urbana abre un campo de debate porque hace apolog¨ªa del consumo, de la erotizaci¨®n de los menores y de la violencia de manera preocupante. Pero dudo que el ruido que est¨¢ haciendo la pol¨¦mica de Peso Pluma alcance los niveles de mayor profundizaci¨®n y valent¨ªa que requieren estas discusiones. No tengo mucha confianza en que esta pol¨¦mica llegue a donde debe llegar¡±, a?adi¨® Garc¨ªa.
La antrop¨®loga Carla Pinochet, investigadora del N¨²cleo Milenio en Culturas Musicales y Sonoras (CMUS), descart¨® la eficiencia de los mecanismos de censura que, adem¨¢s, pueden ser acomodaticios seg¨²n la autoridad de turno. ¡°?Qu¨¦ pas¨® con Peso Pluma? Que antes no lo conoc¨ªa mucha gente y ahora lo conoce todo el mundo¡±, dice Pinochet. ¡°En vez de prohibir la m¨²sica que hoy se escucha en las periferias urbanas, planteemos programas especializados para discutir los problemas urgentes como la narcocultura y que no estamos siendo capaces de tener como sociedad. Los medios de comunicaci¨®n pueden jugar un rol muy importante, los talleres donde los j¨®venes crean sus producciones digitales, en las bibliotecas populares¡ Hay que escuchar a los que est¨¢n escuchando esta m¨²sica¡±, plante¨® la investigadora a EL PA?S.
La fil¨®sofa chilena Lucy Oporto, antes de que se conociera la decisi¨®n final del festival, abogaba para que se cancelara la participaci¨®n de Peso Pluma, aunque lo ve¨ªa dif¨ªcil por los intereses econ¨®micos involucrados. ¡°Es un peligro para la ciudad, ya deteriorada. No me extra?ar¨ªa que ocurriese algo similar a lo que ya ha ocurrido, con ocasi¨®n de los narco-velorios y narco-funerales¡±, planteaba desde Valpara¨ªso, donde reside, la ciudad vecina a Vi?a del Mar. ¡°Al parecer, la fascinaci¨®n colectiva que han despertado estos j¨®venes pseudoartistas en otros j¨®venes, y en no pocos adultos con educaci¨®n (Marcianeke, sin ir m¨¢s lejos), se debe a lo que representan: capacidad de ganar dinero, fama y poder de influencia r¨¢pidamente, como apoteosis de la sociedad de consumo y sus lacras, aunque eso implique la extinci¨®n de lo humano, f¨ªsica y ps¨ªquica, y la aniquilaci¨®n de la juventud¡±, sostuvo Oporto.
El debate sobre la narcocultura pilla a Chile en un momento sensible. El pa¨ªs enfrenta una grave crisis de seguridad, con un aumento en los delitos violentos como los homicidios por arma de fuego. Un par de semanas atr¨¢s, tres personas ¡ªincluida una ni?a de 13 a?os¡ª murieron producto de una balacera durante la grabaci¨®n de un v¨ªdeo musical de un artista urbano en la poblaci¨®n La Victoria, una zona popular y simb¨®lica de Santiago. El pasado s¨¢bado, una ni?a de 10 a?os fue asesinada en Maip¨², un municipio popular y poblado, y el lunes se supo del homicidio de un hombre en un sector cercano a la escena del crimen.
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