La maldici¨®n del cementerio de Tutuqu¨¦n: conserv¨® cuerpos 10.500 a?os y ahora sufre abandono

Un grupo de obreros comenzaba en 2005 la reconstrucci¨®n de un cuartel en la regi¨®n chilena del Maule, en el centro del pa¨ªs andino, cuando hallaron un cr¨¢neo. Llamaron a la polic¨ªa, la Fiscal¨ªa inici¨® una investigaci¨®n y los expertos del Consejo de Monumentos determinaron que se trataba del esqueleto de una mujer que hab¨ªa sido enterrada junto a una vasija de arcilla, pero no era una muerte reciente. Fue apenas la primera hebra del hallazgo arqueol¨®gico de un sitio f¨²nebre con al menos 42 cuerpos de hasta 10.760 a?os de antig¨¹edad, que fueron salvados por un equipo de especialistas liderado por el arque¨®logo Nelson Gaete. Es el cementerio de Tutuqu¨¦n, una localidad a unos dos kil¨®metros de la ciudad de Curic¨®, uno de los de mayor antig¨¹edad de Chile y de Latinoam¨¦rica. El terreno, donde todav¨ªa se conserva una cantidad indeterminada de restos humanos, pertenece al fisco. Aunque nunca se lleg¨® a levantar en el lugar la sede policial, est¨¢ abandonado pese a su valor patrimonial.

¡°Requiere de medidas de mantenci¨®n y resguardo m¨ªnimas para su conservaci¨®n¡±, asegura Gaete, arque¨®logo especialista en la poblaci¨®n de los cazadores-recolectores. Lo mismo opina el arquitecto Jos¨¦ Miguel Mardones, del estudio Archmotion, que hace a?os empuja un proyecto para levantar un museo de arqueolog¨ªa y cultura ind¨ªgena, un centro de contemplaci¨®n y otro de investigaci¨®n en torno a Tutuqu¨¦n. ¡°El sitio est¨¢ en completo abandono¡±, asegura el arquitecto que no se ha detenido en la b¨²squeda de financiamiento p¨²blico y privado. ¡°He visitado el lugar y hay restos de fogatas y botellas de cerveza¡±.

La Gobernaci¨®n provincial de Curic¨® tiene a cargo el terreno. De acuerdo al delegado presidencial, Roberto Gonz¨¢lez Olave, diversos organismos elaboraron en julio un proyecto de cierre perimetral para el cementerio de Tutuqu¨¦n. La comisi¨®n de arqueolog¨ªa del Consejo de Monumentos Nacionales, sin embargo, realiz¨® diversas observaciones a la propuesta ¡°ya que existe alta probabilidad de afectar material arqueol¨®gico que pueda a¨²n existir en el lugar¡±. Actualmente, seg¨²n Gonz¨¢lez, se trabaja en un nuevo plan para asegurar el sector.

Tutuqu¨¦n tiene diversas peculiaridades, no solamente su antig¨¹edad. ¡°La conservaci¨®n de los restos humanos es notable. Los huesos est¨¢n en muy buen estado¡±, comenta Gaete. Lo atribuye a las caracter¨ªsticas del suelo, que tiene gran contenido de ceniza de carb¨®n vegetal y que se adhiri¨® a los huesos humanos. ¡°Los protegi¨® como con una especie de p¨¢tina¡±, asegura el experto. La gran cantidad de cenizas tendr¨ªa relaci¨®n a ceremonias que se realizaban tanto en los entierros como en las visitas posteriores de las familias. Los muertos, de acuerdo a los estudios, no quedaban abandonados.

El trabajo de rescate se prolong¨® entre 2005 y 2006. Solo se centr¨® en la zona que hab¨ªa sido removida por la constructora, pero el resto permanece inalterado. Como los recursos eran m¨ªnimos, junto a Gaete trabaj¨® un equipo de especialistas que colabor¨® incluso gratuitamente. La gobernaci¨®n de Curic¨® de la ¨¦poca contrat¨® a mujeres desempleadas de la zona que ¨Ccon palas, picotas y carretillas¨C, hicieron un gran trabajo, pese a no tener gran educaci¨®n formal. ¡°Fue bastante impresionante¡±, recuerda el arque¨®logo. Como en la regi¨®n del Maule no exist¨ªa una infraestructura adecuada, los hallazgos fueron trasladados al Museo Regional de Rancagua, al sur de Santiago de Chile, donde permanecen hasta la actualidad.

El cementerio de Tutuqu¨¦n se ubica en un peque?o cerro alargado que no sobrepasa los dos metros. De acuerdo a los an¨¢lisis, no se trata de un t¨²mulo natural, sino que la peque?a loma se fue formando artificialmente por la misma actividad funeraria. De acuerdo al libro Tutuqu¨¦n, vestigios de los antiguos habitantes de Chile central, de las arque¨®logas Itac¨ª Correa y Carolina Carrasco, ¡°el cementerio se us¨® en tres momentos distintos¡±. Los cuerpos tienen entre 10.760-10.580 a?os de antig¨¹edad (8.810-8.630 A.C.) y 960-790 (990-1.160 D.C.), seg¨²n estudios realizados con t¨¦cnicas radiocarb¨®nicas. Es una de las tantas importancias del lugar: ¡°Son lugares f¨²nebres, de inhumaci¨®n, ceremoniales, rituales, con una gran tradici¨®n y pervivencia en el tiempo¡±, asegura Gaete, que menciona el hallazgo realizado muy cerca por sus colegas Blanca Tagle y Carmen del R¨ªo. Identificaron t¨²mulos funerarios en la cuenca del r¨ªo Tinguiririca con restos de una antig¨¹edad de unos 11.150 a?os.

La cantidad de cuerpos encontrados en Tutuqu¨¦n le da mayor valor arqueol¨®gico al hallazgo. Entre los 42 esqueletos hab¨ªa mujeres y hombres de diferentes edades. Incluso ni?os. Seg¨²n el libro Tutuqu¨¦n, cuatro son los individuos representantes del grupo humano que us¨® el cementerio en su momento m¨¢s antiguo. ¡°Se trata de tres mujeres, entre ellas una adulta media [entre 35 y 50 a?os], dos sub-adultas [entre 12 y 18 a?os], adem¨¢s de un infante menor a seis a?os¡±.

Hubo asuntos que llamaron especialmente la atenci¨®n de los investigadores: de acuerdo a la ¨¦poca, los esqueletos eran morfol¨®gicamente distintos, por la actividad y la dieta. Mientras algunos ten¨ªan cr¨¢neos alargados y estrechos (morfolog¨ªa dolicocr¨¢nea), los menos antiguos presentaron huesos de la cabeza cortos, anchos y altos (morfolog¨ªa braquicr¨¢nea). Un segundo elemento tiene relaci¨®n con las posturas. Primero enterraban de lado y con piernas semiflectadas, luego de espaldas y con las piernas bastante flectadas y, posteriormente, hiperflectados: ¡°Los amarraban hasta dejarlos como un verdadero paquetito¡±, informa Gaete.

Los esqueletos no estaban solos. ¡°La poblaci¨®n m¨¢s reciente es la ¨²nica que presenta ofrendas de vasijas cer¨¢micas, indicando que estas personas vivieron en un momento donde ya se conoc¨ªa la tecnolog¨ªa alfarera. Tambi¨¦n, los tipos de puntas de proyectil ofrendadas tienden a variar en t¨¦cnica y forma a trav¨¦s del tiempo¡±, asegura la publicaci¨®n de las investigadoras Correa y Carrasco.

La antig¨¹edad del hallazgo, a juicio de Gaete, entrega nuevos elementos de debate sobre el poblamiento de Am¨¦rica. En la misma l¨ªnea del sitio arqueol¨®gico de Monte Verde en el sur de Chile ?¨Cque tiene entre 14.500 y 18.500 a?os de antig¨¹edad¨C, Tutuqu¨¦n desaf¨ªa la teor¨ªa cl¨¢sica que indica que los primeros habitantes del continente pertenec¨ªan a la cultura Clovis, que vivi¨® en Am¨¦rica del Norte entre 12.910 a 12.710 a?os antes del presente . ¡°Tendr¨ªan que haberse venido volando¡±, cuestiona el arque¨®logo, que sue?a con un gran museo de los or¨ªgenes del Maule, que permita que los 42 restos identificados vuelvan desde la ciudad de Rancagua hasta el lugar donde permanecieron por milenos.

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