Una herramienta de inteligencia artificial ayuda a la restauraci¨®n y atribuci¨®n de textos antiguos

Las inscripciones, textos escritos sobre materiales duraderos, pueden ser una muy buena fuente para conocer la vida y la sociedad de la ¨¦poca. Uno de los problemas con los que se encuentran los historiadores es que estas inscripciones en ocasiones est¨¢n incompletas o se han movido del lugar donde se crearon. En 2017, Yannis Assael, cient¨ªfico en inteligencia artificial y actual investigador de DeepMind de Google, y Thea Sommerschield, historiadora y becaria Marie Curie de la Universidad de Venecia, conversaban sobre estas tareas desafiantes para los historiadores y llegaron a la conclusi¨®n del gran potencial cooperativo entre sus disciplinas. As¨ª fue como naci¨® Ithaca, una red neuronal profunda para la restauraci¨®n textual y la atribuci¨®n geogr¨¢fica y cronol¨®gica de inscripciones griegas antiguas. Esta herramienta est¨¢ pensada para trabajar de manera conjunta con profesionales de la historia: por s¨ª sola logra una precisi¨®n del 62% para restaurar textos da?ados, pero unida al trabajo de historiadores logra mejorar la precisi¨®n de los profesionales de un 25% a un 72%. El porcentaje de precisi¨®n en la ubicaci¨®n es del 71% y, adem¨¢s, puede fechar las inscripciones en menos de 30 a?os.

Con el objetivo de maximizar la colaboraci¨®n entre historiadores y el aprendizaje profundo, esta herramienta ofrece m¨²ltiples hip¨®tesis. Para la restauraci¨®n, Ithaca proporciona 20 predicciones decodificadas y clasificadas por probabilidad. De esta manera, se facilita que los historiadores puedan escoger entre las sugerencias de la herramienta, teniendo en cuenta su conocimiento. En cuanto a la atribuci¨®n geogr¨¢fica, el instrumento clasifica los resultados entre 84 regiones; la lista de regiones candidatas se implementa en un mapa y un gr¨¢fico de barras. Por ¨²ltimo, en vez de ofrecer una un valor para la cronolog¨ªa, predice una distribuci¨®n categ¨®rica sobre fechas, que se agrupan en intervalos de 10 a?os, entre el 800 a.C y el 800 d.C.

¡°Nuestro objetivo era explorar c¨®mo el aprendizaje autom¨¢tico puede ayudar a los historiadores a interpretar mejor estas inscripciones, brindando una comprensi¨®n m¨¢s rica de la historia antigua¡±, comentan Assael y Sommerschield. El nombre de la herramienta fue elegido porque hace referencia a la isla griega de la Odisea de Homero. ¡°Pensamos que ser¨ªa un buen nombre porque tiene el significado de devolver algo o alguien a sus or¨ªgenes¡±, detallan.

Ithaca es un tipo de inteligencia artificial llamado modelo de aprendizaje profundo (deep learning model). Se basa en una red neuronal, inspirada en las redes neuronales que se tienen en el cerebro humano, seg¨²n comentan los investigadores. ¡°Hemos entrenado ordenadores para usar estas redes neuronales para grandes cantidades de datos, para que puedan aplicar lo que han aprendido en nuevos datos que no han visto antes. Se entrena en el conjunto de datos m¨¢s grande de inscripciones griegas antiguas¡±, detallan. Otro aspecto que resaltan es que, por la arquitectura de la herramienta, es f¨¢cilmente aplicable a cualquier idioma antiguo, ¡°desde el lat¨ªn hasta el maya y el acadio¡±, adem¨¢s de a cualquier medio escrito, ¡°desde papiros hasta manuscritos¡±. Ithaca, fruto de la investigaci¨®n multidisciplinar de diferentes entidades y empresa, ha sido presentada en un estudio publicado recientemente en Nature y est¨¢ disponible p¨²blicamente en su web.

Fernando Notario, doctor en Historia, profesor de Geograf¨ªa e Historia y cuya l¨ªnea de investigaci¨®n, entre otras, es la historiograf¨ªa de la antig¨¹edad cl¨¢sica, resume que los principales problemas que los profesionales tienen en esta disciplina en concreto son las fuentes porque se conserva una fracci¨®n m¨ªnima de documentos procedentes del mundo antiguo. ¡°No es una soluci¨®n m¨¢gica, pero es una manera de agilizar y ¡°objetificar¡± cosas que ya hacemos recientemente¡±, sentencia. Nerea Luis, doctora en Inteligencia Artificial, defiende que tiene ¡°mucho sentido¡± que se haga de forma colaborativa con la inteligencia artificial y que este modelo de colaboraci¨®n ¡°se va a ver mucho. ¡°Te lleva tambi¨¦n a no olvidar¡±.

Para evitar que algunas lenguas no se olviden, el Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en ingl¨¦s), present¨® en 2020 un sistema desarrollado por investigadores de Ciencias de la Computaci¨®n e Inteligencia Artificial (CSAIL) del MIT capaz de descifrar autom¨¢ticamente un idioma perdido, sin necesidad de un conocimiento avanzado en su relaci¨®n con otros idiomas. Adem¨¢s, puede determinar por s¨ª solo relaciones entre idiomas. El objetivo final es que el sistema pueda ayudar a los ling¨¹istas a conseguir descifrar idiomas que se han perdido a lo largo de la historia.

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