Nadie frena la ca¨ªda libre del urogallo

En ninguno de los pocos reductos donde sobrevive el urogallo en Espa?a (Cordillera Cant¨¢brica y Pirineos) se ha encontrado la f¨®rmula para frenar su declive a pesar de las inversiones y los esfuerzos realizados. Los cient¨ªficos denuncian que la gesti¨®n no ha sido la adecuada, la cr¨ªa en cautividad no ha funcionado y no se ha protegido el territorio de actividades humanas como la caza de otras especies, la apertura de pistas forestales o la celebraci¨®n de carreras de monta?a, que producen un alto e...

En ninguno de los pocos reductos donde sobrevive el urogallo en Espa?a (Cordillera Cant¨¢brica y Pirineos) se ha encontrado la f¨®rmula para frenar su declive a pesar de las inversiones y los esfuerzos realizados. Los cient¨ªficos denuncian que la gesti¨®n no ha sido la adecuada, la cr¨ªa en cautividad no ha funcionado y no se ha protegido el territorio de actividades humanas como la caza de otras especies, la apertura de pistas forestales o la celebraci¨®n de carreras de monta?a, que producen un alto estr¨¦s en la especie. El Libro Rojo de las Aves apunta a la existencia de unos 700 individuos, 292 (200 machos y 92 hembras) de la subespecie de la Cordillera Cant¨¢brica (Tetrao urogallus cantabricus) y m¨¢s de 400 de la subespecie pirenaica (Tetrao urogallus aquitanicus). Estos n¨²cleos constituyen el l¨ªmite de la poblaci¨®n sur europea, lo que les hace muy sensibles al cambio clim¨¢tico.

La poblaci¨®n en peor situaci¨®n es la cant¨¢brica, que est¨¢ declarada desde 2018 en situaci¨®n cr¨ªtica. Un reciente estudio del Instituto de Investigaci¨®n de Recursos Cineg¨¦ticos (IREC) reduce todav¨ªa m¨¢s la poblaci¨®n cant¨¢brica, a tan solo 192 individuos. Los resultados indican que desde la d¨¦cada de 1970 se ha producido una reducci¨®n del 83% del ¨¢rea ocupada en esa zona.

El doctor en biolog¨ªa Javier Castroviejo, que describi¨® la subespecie cant¨¢brica desconocida hasta ese momento para la ciencia, vivi¨® la ¨¦poca en la que el urogallo se cazaba ¡°de una forma desaforada¡± y ahora vive la de su desaparici¨®n, ¡°tras un declive al que nadie quiso prestar atenci¨®n¡±. Los cazadores aprovechaban la ¨¦poca de celo en la que no oyen para abatirlos. ¡°Se mataban much¨ªsimo incluso antes de que pudieran cubrir a la hembra, yo les dec¨ªa horrorizado que pararan, pero no lo hac¨ªan¡±, rememora. Su caza se prohibi¨® en 1979, pero ya hab¨ªa provocado un desgarro dif¨ªcil de solucionar. Luego llegaron otra serie de ¡°desatinos¡±, que han contribuido al declive. ¡°Se abrieron pistas forestales, varias por cantaderos; hubo talas y un cambio enorme del uso del territorio con la desaparici¨®n de la ganader¨ªa, lo que provoc¨® la aparici¨®n de m¨¢s matorral y la explosi¨®n de jabal¨ªes, y todo ello en un contexto de cambio clim¨¢tico¡±, enumera.

Tambi¨¦n critica la forma en la que se ha invertido el dinero de Europa, 6,9 millones del Life+urogallo cant¨¢brico, que persegu¨ªa la cr¨ªa y reintroducci¨®n del ave en el Principado de Asturias desde un centro ubicado en Sobrescobio. No se consigui¨® reintroducir ning¨²n pollo y las otras medidas adoptadas tampoco pararon la sangr¨ªa de los gallos. A pesar del fracaso, se va a volver a intentar en un nuevo centro de cr¨ªa en Castilla y Le¨®n, para el que el Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica destin¨® 453.852 euros.

David Cubero, jefe de servicio de Espacios Naturales del Gobierno regional, subraya que ¡°no hay tiempo que perder porque la situaci¨®n es cr¨ªtica¡±. Admite que ¡°la cr¨ªa es compleja¡±, pero tiene confianza, porque a pesar de los malos resultados cosechados en Asturias ha quedado ¡°un bagaje de 10 a?os de experiencia¡±. El proyecto prev¨¦ la retirada de huevos de los nidos en el campo, su incubaci¨®n y, cuando ya est¨¦ asegurado el stock reproductor, la reintroducci¨®n de los pollos. Est¨¢n en contacto con Polonia donde logran sacar 70 pollos al a?o con 10 machos y 20 hembras. Ahora est¨¢n experimentando con ejemplares de la l¨ªnea europea, de linaje boreal diferente al de aqu¨ª, pero solo ¡°para poner a punto todas las t¨¦cnicas y protocolos¡±.

Las retiradas de huevos de los nidos en las fr¨¢giles poblaciones que quedan son muy pol¨¦micas. Ana Carricondo, coordinadora de Conservaci¨®n de la ONG SEO/BirdLife, explica que ellos ¡°no se van a oponer a la cr¨ªa porque la situaci¨®n es cr¨ªtica¡±, pero como ¡°una medida de ¨²ltima opci¨®n, porque lo primero es entender la causa del declive¡±. Si no se corrigen las amenazas que est¨¢n diezmando la poblaci¨®n en el h¨¢bitat, ¡°ser¨¢ imposible que esos pollos que sueltas salan adelante¡±. Otra de las medidas que se est¨¢n adoptando en Le¨®n y Asturias es el control de predadores que pueden competir con el urogallo. En Castilla y Le¨®n se retiran martas, que se llevan a otros lugares, y gatos asilvestrados, que se sacrifican a no ser que se entreguen a las juntas vecinales. Todo bajo un estricto control t¨¦cnico y cient¨ªfico, asegura el jefe de servicio.

Un drama de dif¨ªcil soluci¨®n

¡°Lo que ha pasado con el urogallo es un drama y con la tendencia actual no soy muy optimista en cuanto a las perspectivas futuras¡±, asegura Jes¨²s Mart¨ªnez Padilla, cient¨ªfico de la Fundaci¨®n Araid y del Instituto Pirenaico de Ecolog¨ªa y uno de los autores del estudio publicado esta semana, que ha confirmado la desaparici¨®n del urogallo de casi la mitad de las ¨¢reas que ocupaba en el Pirineo aragon¨¦s. El 90% de los ejemplares pirenaicos se concentra en Catalu?a ¨Dde 340 a 386 machos¨D, el 9% en Arag¨®n ¨Dde 34 a 38 machos en la parte nororiental¨D y el 1% en Navarra ¨Dde 0 a 3 machos¨D, indica el Libro Rojo de las Aves de SEO/BirdLife.

Los investigadores buscaron en los lugares donde se ten¨ªa constancia de la existencia actual o pasada de machos de urogallo durante el celo, cuando atraen a las hembras desplegando una espectacular cola y sin parar de cantar. De los 47 cantaderos que visitaron, en 18 la especie ¡°ha desaparecido¡±. Dentro de unos meses contar¨¢n con una estimaci¨®n del n¨²mero de aves, para lo que usar¨¢n el m¨¦todo utilizado en el ¨²ltimo censo realizado a la subespecie cant¨¢brica. Porque uno de los grandes problemas, apunta Mart¨ªnez Padilla, es que hay diferentes comunidades aut¨®nomas implicadas que usan sistemas de censo diferentes. ¡°As¨ª no hay forma de comparar ni de saber cu¨¢ntos hay ni donde est¨¢n¡±, comenta. Y eso ¡°es lo b¨¢sico, es de donde hay que partir¡±.

El cient¨ªfico admite que se est¨¢ realizando un esfuerzo, pero ¡°las medidas no han dado resultado, probablemente porque las causas del declive son muchas¡±. Falta conocimiento en cuanto al uso del h¨¢bitat de los machos y las hembras cuando no est¨¢n en el cantadero y de los pollos cuando se dispersan. En el estado de urgencia actual, pide ¡°anteponer los intereses biol¨®gicos a los administrativos y que existan unos patrones conjuntos, al menos de m¨ªnimos, que cumplan todas las comunidades¡±.

En Catalu?a tambi¨¦n se detecta un declive generalizado. En 10 a?os (de 2005 a 2015) el n¨²mero de machos descendi¨® un 33%. La regresi¨®n m¨¢s importante, del 70%, se ha producido en la comarca de la Cerdanya. La p¨¢gina web de la Generalitat se?ala como ejemplo de ¡°la cada vez m¨¢s precaria situaci¨®n de la especie¡± que en 2020 no se ha detectado ning¨²n macho en los cantaderos de la comarca del Pallars Juss¨¤, donde se estimaba en 2005 la presencia de unos 14 machos. Con este panorama el urogallo, el ave forestal de mayor tama?o de Europa con machos de entre 2,5 y 4,2 kilos y hembras de entre 1,2 y 2 kilos, lo tiene muy dif¨ªcil para sobrevivir.

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