Tejones contra trenes: las madrigueras amenazan la red de ferrocarriles de Pa¨ªses Bajos

La habilidad del tej¨®n (Meles meles) para construir madrigueras ha puesto en jaque a los ferrocarriles holandeses. De la familia de los must¨¦lidos y parientes de nutrias y comadrejas, su presencia no es nueva en Pa¨ªses Bajos: es una especie protegida que suma unos 7.000 ejemplares. Sin embargo, la red de t¨²neles que han cavado bajo las v¨ªas ha obligado a paralizar el tr¨¢fico en un tramo de la provincia de Frisia, situada al noreste. A finales de marzo, ocurri¨® lo mismo en Brabante, al sur, y hubo que detener el paso de los trenes durante unos d¨ªas para facilitar la mudanza de los mam¨ªferos a otros lugares. ProRail, la empresa encargada del mantenimiento de la red ferroviaria, calcula que hay tejones en al menos 40 puntos del trazado nacional que pueden comprometer la seguridad del tr¨¢fico. El reto consiste en ofrecerles cubiles alternativos para que no regresen a las l¨ªneas f¨¦rreas.

En Brabante, en la ruta que une las ciudades de Den Bosch y Eindhoven, fue preciso actuar con diligencia porque los trenes transportan a unas 50.000 personas diarias en los tramos afectados. Cuatro o cinco tejones hab¨ªan excavado all¨ª, bajo el terrapl¨¦n del ferrocarril, y hubo que bloquear su regreso a las madrigueras a base de trampillas. Como ten¨ªan v¨ªas naturales de escape, marcharon por su cuenta y no hizo falta crear una guarida artificial. Una vez sellados los t¨²neles, se coloc¨® una malla a prueba de excavaciones y el servicio pudo reanudarse el 29 de marzo. Si bien cada caso es distinto, en algunos lugares es posible instalar una tuber¨ªa como las del alcantarillado como paso seguro bajo el tren. Si no, se ofrece una tejonera en forma de mont¨ªculo con vegetaci¨®n, y con alimento cercano, para evitar excavaciones peligrosas. Cuando todo falla, llevarlos a otro lugar es la soluci¨®n.

En Frisia, donde exist¨ªan tantos t¨²neles subterr¨¢neos como para haber hundido las v¨ªas, los tejones no ten¨ªan otro lugar a donde ir. La madriguera, tambi¨¦n de unos cinco ejemplares, era mucho m¨¢s profunda y las autoridades tuvieron que evitar que estos animales se trasladaran al dique de defensa contra las inundaciones, situado a unos pocos metros de su guarida. Para ello, se ha creado un h¨¢bitat alternativo, cercano al original. Es una r¨¦plica de los suyos, pero como ya no podr¨¢n cavar donde sol¨ªan, hace falta cierto tiempo para que lo acepten. De ah¨ª que el conjunto de los trabajos deba prolongarse al menos hasta el 23 de abril entre las localidades de Workum y Stavoren. Est¨¢n a unos 18 kil¨®metros y hay l¨ªnea de autob¨²s.

De cuerpo alargado y patas cortas y fuertes, los tejones adultos miden unos 80 cent¨ªmetros y pesan hasta 16 kilos. Es un animal muy sociable, con unas reconocibles franjas negras sobre su cabeza blanca, y pasa gran parte de su vida bajo tierra. Los t¨²neles que cava pueden tener un di¨¢metro de 30 cent¨ªmetros, y las c¨¢maras internas de la madriguera alcanzan unos 50 cent¨ªmetros de altura. Hay una c¨¢mara principal, acolchada con restos vegetales, una secundaria para la crianza, sistemas de ventilaci¨®n y de escape en caso de peligro, y una c¨¢mara destinada para defecar, conocida como retrete. ¡°Toda esa red puede provocar hundimientos en las v¨ªas, y hace cuatro a?os ya advertimos a las autoridades ferroviarias y de carreteras de que buscaran una alternativa. Los responsables de la gesti¨®n de los diques reaccionaron enseguida. Los otros, no tanto¡±, explica Jaap Dirkmaat, fundador de Das & Boom (tej¨®n y ¨¢rbol) una fundaci¨®n especializada en su protecci¨®n y la de su h¨¢bitat. Sus expertos asesoran en el realojo de mam¨ªfero, que debe hacerse con permiso del Gobierno y bajo la supervisi¨®n de ecologistas y veterinarios. La habilidad de los tejones para hurgar en la tierra con el hocico es notoria, y Dirkmaat ha comprobado que ¡°han llegado a desplazar entre tres y cuatro metros c¨²bicos de arena en una sola noche; multiplique eso a lo largo de los a?os¡±.

ProRail ha colgado en su p¨¢gina web un relato detallado de la situaci¨®n, tanto en Brabante como en Frisia, donde asegura que ¡°eval¨²an los riesgos de todos estos lugares y se les est¨¢ dando prioridad¡±. Por otro lado, recuerdan que ¡°intervenir en la vida y el entorno del tej¨®n requiere de un permiso oficial, y tiene que haber un plan fundamentado en observaciones sobre el terreno realizadas a lo largo de meses, e incluso a?os¡±. Respecto al caso frisio, ProRail indica que los trabajos implican la retirada de ¡°unos 150 metros de v¨ªa y balasto, la capa de grava que se tiende sobre la plataforma de las v¨ªas f¨¦rreas para sujetar sobre ella las traviesas¡±. Si encuentran tejones en las madrigueras porque no salen solos, el veterinario debe anestesiarlos para luego trasladarlos a un refugio temporal. Si no, la tejonera artificial est¨¢ ya preparada.

1.500 atropellos en 2022

A principios del siglo XX hab¨ªa unos 12.000 ejemplares en Pa¨ªses Bajos. La poblaci¨®n se redujo a 1.200 debido a la caza, pero se ha ido recuperando desde que se introdujo un plan de protecci¨®n en los a?os ochenta. Dirkmaat asegura que los adultos pueden ser feroces y no tienen enemigos, aunque los lobos y los zorros s¨ª pueden llevarse a las cr¨ªas. ¡°El mayor peligro es el tr¨¢fico, y en 2022 murieron atropellados unos 1.500¡å, dice. Los tejones son omn¨ªvoros y pueden comer desde peque?os reptiles y lombrices, a frutas, plantas y larvas, que desentierran. Viven en grupos de hasta 12 miembros, y se aparean entre la primavera y el verano. La hembra puede guardar el ¨®vulo fecundado durante varios meses, en lo que se denomina implantaci¨®n retardada, hasta que las condiciones ambientales sean propicias. La gestaci¨®n dura 65 d¨ªas y tienen de dos a seis cr¨ªas.

En Europa, la protecci¨®n de estos must¨¦lidos difiere seg¨²n los pa¨ªses. En Reino Unido, solo se les puede cazar con licencia y cuando se teme que puedan transmitir tuberculosis al ganado vacuno dom¨¦stico, seg¨²n fuentes de Das&Boom. En Alemania, la situaci¨®n var¨ªa en los estados federados (los l?nder). Lo mismo ocurre por territorios en Francia, B¨¦lgica, Italia y B¨¦lgica. En Pa¨ªses Bajos, ¡°hay un presupuesto de nueve millones anuales de euros para apartar a los animales del tr¨¢fico, no solo a los tejones¡±, seg¨²n la misma fundaci¨®n holandesa. Los ingenieros abren t¨²neles o tienden puentes alternativos para que los animales puedan encontrar alimento.

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