Un escritor franc¨¦s gana la batalla legal para publicar la segunda parte de 'Los miserables'
La familia de V¨ªctor Hugo hab¨ªa denunciado a Fran?ois Ceresa porque sus dos novelas eran una imitaci¨®n comercial que atentaba contra la integridad de la obra de su antepasado
Los herederos de V¨ªctor Hugo han perdido este viernes la batalla legal que emprendieron en 2001 contra dos novelas de Fran?ois Ceresa presentadas como continuaci¨®n de Los Miserables y que para la familia del m¨ªtico escritor franc¨¦s no son m¨¢s que una imitaci¨®n puramente comercial que atenta contra la integridad de la obra de su antepasado.
Las obras en cuesti¨®n son Cosette o el tiempo de las ilusiones y Marius o el fugitivo, publicadas por Plon y en las que el Tribunal de Apelaci¨®n de Par¨ªs no ve atentado alguno contra la integridad de la obra original de V¨ªctor Hugo ni al derecho moral de su autor.
La decisi¨®n rectifica la sentencia del mismo Tribunal dictada en marzo de 2004 que daba la raz¨®n a los demandantes al considerar que no se pod¨ªa escribir la continuaci¨®n de una obra como Los Miserables sin atentar contra el derecho moral de V¨ªctor Hugo. En aquel momento la Corte calific¨® la novela de "verdadero monumento de la literatura mundial" y no "una simple novela en la que se describ¨ªa un comportamiento filos¨®fico y pol¨ªtico". Unos argumentos que, en enero de 2007 fueron rechazados por el Tribunal Supremo, que anul¨® la decisi¨®n de la Corte de Apelaci¨®n alegando que no ten¨ªa que juzgar el "m¨¦rito" de la obra o su car¨¢cter de obra "culminada" sino si las novelas denunciadas "alteraban" el escrito de V¨ªctor Hugo o provocaban una "confusi¨®n" sobre su paternidad.
Las adaptaciones no pueden ser prohibidas
Con una composici¨®n distinta, el Tribunal ha llegado a la conclusi¨®n de que un autor no puede, apoy¨¢ndose en el derecho moral -que no es un derecho absoluto-, prohibir que su obra sea objeto de adaptaciones, especialmente del mismo tipo. En su sentencia, recuerda que la libertad de creaci¨®n confiere a todos la facultad de "intentar" concebir y realizar una continuaci¨®n una vez que la obra es de dominio p¨²blico, siempre y cuando el autor de la misma sea "fiel" a la obra y respete su esp¨ªritu, algo que no excluye sin embargo "cierta libertad de expresi¨®n y de concepci¨®n".
Los herederos de V¨ªctor Hugo presentaron en 2001 una denuncia contra Fran?ois Ceresa y reclamaban 4,5 millones de francos franceses, unos 675.000 de los actuales euros, en concepto de da?os e intereses, as¨ª como la prohibici¨®n de sus libros. Posteriormente, abandonaron la reclamaci¨®n monetaria y la idea de impedir la publicaci¨®n de las obras, pero mantuvieron la querella.
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