Nazis, psicopat¨ªas y autores esquivos

ELPA?S.com re¨²ne una veintena de recomendaciones para orientarse entre la amplia oferta literaria del 23 de abril, D¨ªa del Libro.

NOVELA:

El tesoro de Sierra Madre, de B. Traven (Acantilado)

Autor enigm¨¢tico, profesional de la mixtificaci¨®n de la propia identidad y narrador fuera de lo com¨²n, B. Traven (1890?-1969?) regresa a las librer¨ªas con la reedici¨®n en Espa?a de una de sus grandes novelas, El tesoro de Sierra Madre (1935). Ambientada en el M¨¦xico de los a?os veinte, cuenta las andanzas de tres estadounidenses sin blanca que encuentran una mina de oro en la cordillera del t¨ªtulo. La disputa por la posesi¨®n del tesoro divide a los tres nuevos ricos y muestra poco a poco los devastadores efectos de la codicia. Un pulso narrativo que fascin¨® a cientos de lectores, como Albert Einstein, que dijo que Traven ser¨ªa el autor que se llevar¨ªa a una isla desierta, o John Huston, que adapt¨® la novela al cine en 1948 con Humphrey Bogart.

El misterio del escritor invisible (El Pa¨ªs Semanal)

Anatom¨ªa de un instante, de Javier Cercas (Mondadori)

Tras abordar la Guerra Civil en el best seller Soldados de Salamina (Tusquets), el novelista Javier Cercas (Ibahernando, C¨¢ceres, 1962) regresa a un cap¨ªtulo crucial de la historia de Espa?a, el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981. El gesto de Su¨¢rez, Guti¨¦rrez Mellado y Carrillo, los tres ¨²nicos que rechazan echarse al suelo ante los tiros de los golpistas que irrumpen en el Congreso de los Diputados, sirve de punto de partida a Cercas para "interpretar" aquel intento de finiquitar la naciente democracia. Mezcla de cr¨®nica, ensayo y novela, seg¨²n Cercas, Anatom¨ªa de un instante intenta hacer comprensible aquel cap¨ªtulo, con especial atenci¨®n al clima pol¨ªtico y social que lo facilit¨®. Un golpe que, seg¨²n el autor, no fue nada risible. "?sa es la trola m¨¢s grande, de opereta nada, y estuvo a punto de salir bien".

Cercas aborda el 23-F, por Jacinto Ant¨®n

23-F, el juicio a los hijos, por Jes¨²s Ruiz Mantilla

Tres h¨¦roes en un instante, por Jordi Gracia

El miedo, de Gabriel Chevalier (Acantilado)

Uno de los relatos menos conocidos sobre la Gran Guerra es El miedo (1930), de Gabriel Chevallier (1895-1969), un alegato descarnado contra la miseria moral de la guerra y una desactivaci¨®n de la ¨¦pica de todo conflicto armado. Su antibelicismo es tan convincente que poco despu¨¦s de ser publicada, en 1939, el autor y el editor acordaron suspender la publicaci¨®n; en tiempos de una guerra inminente, no era lo m¨¢s adecuado socavar el esp¨ªritu patri¨®tico. Enmarcado en el grupo de El fuego, de Henri Barbusse, y Sin novedad en el frente, de Erich Maria Remarque, Chevallier contribuye a la desmitificaci¨®n completa de la guerra, lejos de aproximaciones redentoras como la de Ernst J¨¹nger en Tempestades de acero.

El coraz¨®n de las tinieblas, de Joseph Conrad (Mondadori)

Una nueva traducci¨®n a cargo de Miguel Temprano Garc¨ªa actualiza el cl¨¢sico de Joseph Conrad (1857-1924) sobre los excesos del colonialismo en el laberinto ignoto del ?frica negra del siglo XIX. Inspir¨¢ndose en el r¨¦gimen brutal del rey Leopoldo II de B¨¦lgica, que expoli¨® los recuros naturales del Congo y masacr¨® a su poblaci¨®n, v¨ªctima de las atrocidades de los comerciantes de caucho, Conrad traza un descenso a las profundidades del alma y a los l¨ªmites de la civilizaci¨®n. El volumen incorpora por primera vez los cuadernos de notas Diario del Congo y Cuaderno del r¨ªo arriba, que escribi¨® el autor durante sus viajes al Congo belga a finales del siglo XIX y que le sirvieron de gu¨ªa para escribir la novela.

La gran trilog¨ªa, de Gregor von Rezzori (Anagrama)

La desaparici¨®n de ese exuberante y precario mosaico que fue el Imperio Austroh¨²ngaro sumi¨® para siempre en el desarraigo a sus s¨²bditos. Uno de los mayores cronistas de esa decadencia fue, junto a Joseph Roth, el hombre de letras Gregor von Rezzori (1914-1998), pol¨ªglota y multidisciplinar, de quien ahora se publica en Espa?a La gran trilog¨ªa, que comprende el libro de memorias Flores en la nieve y las novelas Un armi?o en Chernopol y Memorias de un antisemita. Von Rezzori compone aqu¨ª un tr¨ªptico sobre la desaparecida identidad mitteleuropea.

BIOGRAF?A, MEMORIAS E HISTORIA:

Hacia el amanecer, de Michael Greenberg (Seix Barral)

Un d¨ªa de verano de 1996 la adolescente Sally sufri¨® un brote psic¨®tico. Su car¨¢cter entusiasta fue tragado por un trastorno bipolar que la convirti¨® en una completa extra?a para su propia familia. Su padre, el periodista neoyorquino Michael Greenberg, colaborador de The Times Literary Supplement, tuvo que aprender junto a su esposa a convivir con la enajenaci¨®n de su hija de 15 a?os. El relato de esa experiencia, con momentos de rabia, frustraci¨®n y culpabilidad, lo ha recogido en Hacia el amanecer, una cruda aproximaci¨®n a la tragedia de la alienaci¨®n de un ser querido. Lo que sit¨²a su testimonio por encima de otras morias, seg¨²n The New York Times, "es el sincero pesimismo de Greenberg, su humor negro y su incapacidad fundamental para darle sentido al sufrimiento de su hija, y mucho menos para extraer una lecci¨®n optimista". La propia Sally, que vive en Vermont y recibe tratamiento m¨¦dico, se sorprendi¨® al leer el libro: "Me sent¨ª como si leyera la vida de otra persona, una chica de 15 a?os que hab¨ªa estado en el infierno y que era la ¨²nica que no lo sab¨ªa".

"En 1996 mi hija se volvi¨® loca", por Elvira Lindo

Juan Belmonte, matador de toros, de Manuel Chaves Nogales (Libros del Asteroide)

Considerada la mejor biograf¨ªa de las letras espa?olas, narra la vida del torero sevillano Juan Belmonte, fundador del toreo moderno y personalidad magn¨¦tica. El periodista Manuel Chaves Nogales (1897-1944), uno de los grandes reporteros espa?oles del siglo XX, entrevist¨® al diestro y escribi¨® su vida, desde sus infancia de p¨ªcaro callejero en las calles del casco antiguo de Sevilla y lo acompa?a hasta la consagraci¨®n y sus duelos con Joselito. Compa?ero de generaci¨®n de Josep Pla, Gaziel, Julio Camba y Eugeni Xammar, entre otros, Chaves Nogales logra un retrato de una vivacidad asombrosa con una estricta concisi¨®n ling¨¹¨ªstica. Su Belmonte trasciende el alcance del biografiado como gran renovador de la tauromaquia y se encarna en una personalidad de una fuerza considerable, protagonista de una estampa exuberante de la Espa?a de princpios del siglo XX.

El genio escondido, por Jes¨²s Ruiz Mantilla

Diario, de H¨¦l¨¨ne Berr (Anagrama)

Tras sesenta a?os olvidado en lo alto de un armario, por fin en 2008 lleg¨® a las librer¨ªas francesas Diario, de H¨¦l¨¨ne Berr, una joven burguesa jud¨ªa que, como tantos compatriotas, sufri¨® la ocupaci¨®n de Par¨ªs por las tropas nazis entre 1942 y 1944. Berr recoge en su Diario, dirigido a su prometido, Jean Morawiecki, numerosas escenas de exclusi¨®n social en el transporte p¨²blico, detenciones irregulares, humillaciones y saqueos perpetrados por las autoridades colaboracionistas. El testimonio de Berr llega a Espa?a tras vender 100.000 ejemplares en Francia, donde ya han comparado su experiencia con la de la holandesa Ana Frank, con la que comparti¨® destino. Ambas murieron en Bergen-Belsen, en Alemania, pocos d¨ªas antes de que los aliados liberaran el campo de concentraci¨®n. La ¨²ltima anotaci¨®n, del 15 de febrero de 1944, es una cita de El coraz¨®n de las tinieblas, de Joseph Conrad: "?Horror! ?Horror! ?Horror!".

El honor de la Rep¨²blica, de ?ngel Vi?as (Cr¨ªtica)

Reuniendo un gran volumen de datos recientemente desclasificados en archivos de de varios pa¨ªs , el historiador ?ngel Vi?as (Madrid, 1941) arroja nueva luz sobre la Guerra Civil en El honor de la Rep¨²blica. Desmonta leyendas como la de que el golpe de Estado del bando nacional se llev¨® a cabo para evitar una revoluci¨®n comunista y demuestra que el Gobierno republicano no s¨®lo tuvo que luchar contra los golpistas sino tambi¨¦n contra Alemania e Italia, que intervinieron desde el principio del conflicto. Este volumen cierra la trilog¨ªa de la Guerra Civil iniciada con La soledad de la Rep¨²blica y El escudo de la Rep¨²blica.

"La Rep¨²blica tuvo que pelear con el Eje", por Jos¨¦ Andr¨¦s Rojo

Diario de Berl¨ªn, de William Shirer (Debate)

Corresponsal de la CBS en Berl¨ªn (fue colega de Ed Murrow, el protagonista de Buenas noches y buena suerte) durante el estallido de la Segunda Guerra Mundial, el historiador y reportero William Shirer (1904-1993) vivi¨® la escalada del terror del Tercer Reich. Casi clandestinamente escribi¨® un diario en el que anotaba el avance desbocado de la brutalidad nazi. Por fin, en 1941, consigui¨® huir de Alemania y publicar su testimonio en Estados Unidos para que todo el mundo supiera lo que acontec¨ªa en el coraz¨®n de Europa. Fue una documentaci¨®n insustituible que le sirvi¨® para escribir su mayor obra, Ascensi¨®n y ca¨ªda del Tercer Reich (1960).

ENSAYO:

?Por qu¨¦ creemos en cosas raras?, de Michael Shermer (Alba)

Abundan cada vez m¨¢s los supuestos argumentos cient¨ªficos que se emplean para demostrar las ideas m¨¢s peregrinas. Se usan documentos para probar que la Tierra fue creada tal y como narra la Biblia, o que el Holocausto nunca existi¨® y se recurre a la f¨ªsica cu¨¢ntica para demostrar la existencia de Dios. Contra todo este uso fraudulento de la ciencia se enfrenta Michael Schermer (Glendale, California, EE UU, 1954), doctor en Historia de la Ciencia, en Por qu¨¦ creemos en cosas raras, un cl¨¢sico de la divulgaci¨®n cient¨ªfica que arremete contra toda pseudociencia. Armado con un escepticismo siempre alerta, Schermer desgrana desde las trampas del pensamiento "que pueden llevar a cualquiera a creer en cosas raras" hasta las incongruencias del creacionismo o la insostenibilidad del negacionismo. "Un hombre sabio adecua su verdad a la prueba", escribe Schermer, citando a Hume. Y concluye: "Es imposible encontrar mejor lema para el escepticismo".

Yo soy un extra?o bucle, de Douglas R. Hofstadter (Tusquets)

Armado con las herramientas de la ciencia cognitiva, el f¨ªsico y matem¨¢tico Douglas R. Hofstadter (Nueva York, 1945) salta al abordaje de la consciencia con la intenci¨®n de describir c¨®mo surge el yo a partir de un conjunto de neuronas, sangre y huesos. Tras un primer, ambicioso y complejo asedio al yo en el monumental ensayo G?del, Escher, Bach (1979), donde combinaba la filosof¨ªa y la neurociencia con las citas a los dibujos de Escher y Alicia en el pa¨ªs de las maravillas, de Lewis Carroll, Hofstadter regresa para intentar acotar esa esquiva sustancia autorreferencial que es el yo.

Pensamientos, de Joseph Joubert (Pen¨ªnsula)

Pocos asuntos escapan a la consideraci¨®n de Joseph Joubert (1754-1824)), pensador y gran aforista franc¨¦s cuyas m¨¢ximas se recogen en el volumen Pensamientos, un vadem¨¦cum de c¨¢psulas sobre relaciones humanas, pol¨ªtica, historia, literatura, el amor y la muerte, y tantos otras cuestiones de calado humano. Esta nueva edici¨®n re¨²ne en una traducci¨®n unitaria la obra joubertiana que se econtraba dispersa y descuidada. Miembro de esa alineaci¨®n de ensayistas que parte de Montaigne, en el siglo XVI, y contin¨²a con Pascal, La Bruy¨¨re y La Rochefoucauld y Chateaubriand, entre otros. Due?o de un estilo su pensamiento se sit¨²a en los cimientos del mundo moderno. "Quisiera que los pensamientos se sucedieran en un libro como los astros en el cielo, con orden, con armon¨ªa, pero f¨¢cilmente y a intervalos, sin tocarse, sin confundirse; y no obstante no sin seguirse, sin concordar, sin combinarse", escribe Joubert. "S¨ª, quisiera que fluyesen sin agarrarse y sujetarse, de modo que cada uno de ellos pudiera subsistir independiente. Nada de cohesi¨®n demasiado estricta; pero nada tampoco de incoherencias: la m¨¢s leve es monstruosa".

Josep Pla y el viejo periodismo, de Xavier Pericay (Destino)

Nost¨¢lgico del viejo periodismo, ese que "nunca vivi¨® preocupado, ni poco ni mucho, por las fronteras entre ficci¨®n y no ficci¨®n", el columnista Xavier Pericay (Barcelona, 1956) evoca una ¨¦poca dorada del periodismo espa?ol, la de los a?os veinte, a trav¨¦s de la figura de Josep Pla, quiz¨¢ el mayor prosista de las letras catalanas del siglo XX. Pericay se remonta al periodo en el que Pla se inicia en el periodismo, es decir, desde el verano de 1919 cuando comienza a escribir en Las Noticias, hasta la primavera de 1922, cuando cubre la Conferencia Internacional de G¨¦nova. "Mi oficio ha sido el periodismo", escribi¨® Pla en Notas para S¨ªlvia, "Era un oficio que le llevaba a uno a hablar con la gente, a leer y a escribir. Es lo que he hecho toda mi vida". Se trata de un viaje al tiempo en el que vivi¨® una alineaci¨®n period¨ªstica impresionante: Julio Camba, Gaziel, Eugeni Xammar, Corpus Barga y Manuel Chaves Nogales entre otros. Un canto al periodismo del "compromiso con la informaci¨®n, que es como decir con la verdad".

POES?A:

?nima m¨ªa, de Carlos Marzal (Tusquets)

Reconocido como una de las voces m¨¢s vigorosas de la poes¨ªa espa?ola actual, Carlos Marzal (Valencia, 1961) recrea en ?nima m¨ªa un mundo atravesado por la celebraci¨®n de la existencia y circundado por la conciencia de la desaz¨®n. Premio Nacional de la Cr¨ªtica en 2002 por Metales pesados, Marzal alterna aqu¨ª los tonos eleg¨ªacos y melanc¨®licos, entre otros, en un poemario m¨²ltiple sobre las facetas del alma y la redenci¨®n de la escritura.

Sonetos, de William Shakespeare (Galaxia Gutenberg)

Cuando se cumple el cuarto centenario de la publicaci¨®n de los Sonetos, de William Shakespeare (1564-1616), el traductor Andr¨¦s Ehrenhaus ha vertido sus versos de nuevo al espa?ol con la intenci¨®n de aproximarse al m¨¢ximo a la forma po¨¦tica original. En sus 154 sonetos, el dramaturgo reflexiona sobre el amor y la belleza, con unos versos de un ambiguo erotismo soterrado (el destinatario es a veces un hombre y otras, una mujer), sin dejar las alusiones a la pol¨ªtica ni las meditaciones sobre la mortalidad. El volumen se presenta en edici¨®n biling¨¹e, junto al poema "relegado" Lamento de una amante.

M?SICA:

La m¨²sica es mi amante. Memorias de Duke Ellington, de Edward Kennedy Ellington (Global Rhythm)

Quiz¨¢ nunca le gustaran demasiado las confesiones, pero cuando se puso a ello, Duke Ellington se lo tom¨® en serio. Considerado una de las figuras m¨¢s influyentes de la historia del jazz (o american music, como ¨¦l prefer¨ªa llamarla), el pianista y compositor nacido Edward Kennedy Ellington (1899-1974) echa la vista atr¨¢s sin cortapisas en estas sustanciosas memorias. En ellas se abre con una perspectiva crepuscular para recordar la etapa m¨¢s popular del jazz, durante la que Ellington emergi¨® junto a su orquesta como un creador de referencia. El pianista hilvana recuerdos y an¨¦cdotas por los que circulan algunos gigantes de la m¨²sica del siglo XX, desde Frank Sinatra a Miles Davis, pasando por Ella Fitzgerald, John Coltrane y Charlie Parker.

C?MIC:

Breakdowns, de Art Spiegelman (Mondadori)

Antes de que Maus le lanzara al Olimpo del c¨®mic (su retrato del Holocausto le vali¨® el Premio Pulitzer, el ¨²nico concedido a un historietista), Art Spiegelman (Estocolmo, 1948) fue un dibujante underground inmerso en la exuberancia creativa de los a?os setenta. Aquellos a?os de entrada vacilante en el noveno arte los recogi¨® en el volumen Breakdowns (1978), reci¨¦n reeditado en EE UU y que ahora se publica en Espa?a. Incluye 12 p¨¢ginas nuevas en las que narra el nacimiento de su pasi¨®n por el arte secuencial. En conjunto, se trata de una especie de confesi¨®n de uno de los artistas que, como Will Eisner y Alan Moore, ha ensanchado los l¨ªmites expresivos del c¨®mic.

La leyenda del tebeo tiene un pasado, por B¨¢rbara Celis

Las calles de arena, de Paco Roca (Astiberri)

En una ciudad que mezcla el tono de pesadilla de Kafka, el gusto por las paradojas de Borges y la inversi¨®n l¨®gica de Lewis Carroll es donde ha situado el historietista Paco Roca (Valencia, 1969) su nueva historia, Las calles de arena. Tras recibir el Premio Nacional del C¨®mic 2008 por su retrato del Alzh¨¦imer en Arrugas, Roca se mete de lleno en un relato fant¨¢stico protagonizado por un elenco de seres extraordinarios, como un vagabundo que roba identidades, un tipo que duerme en un ata¨²d con la intenci¨®n de morirse y un cient¨ªfico que clona mujeres iguales a un amor perdido con el ¨¢nimo de que le quieran. Todos parecen encerrados en una urbe laber¨ªntica.

El barrio de nunca salir, por Tereixa Constenla