Woody Allen sobre la muerte: "Estoy en contra"

Hace ya algunos a?os, a este cronista le entr¨® un ataque de risa en medio de la rueda de prensa que un selenita imposible con aspecto de ser humano ofrec¨ªa en el palacio de Festivales de Cannes. Cuando alguien le pregunt¨® qu¨¦ sent¨ªa por estar aqu¨ª, dijo: "Estoy muy contento de estar en Francia, un pa¨ªs que adoro a pesar de que ustedes se coman algo tan asqueroso como los caracoles".

Hay pocos seres tan dotados y tan r¨¢pidos para el humor como Allen Stewart Konigsberg, alias Woody Allen (Nuerva York, 1935).

Lo ha vuelto a demostrar hoy por partida doble. Primero, con su nueva y desopilante pel¨ªcula, la comedia dram¨¢tica (pero mucho m¨¢s de lo primero que de lo segundo) You will meet a tall dark stranger protagonizada por un reparto de ultralujo formado por Naomi Watts, Anthony Hopkins, Antonio Banderas, Josh Brolin, Freida Pinto y Gemma Jones. Despu¨¦s, y como era de esperar, con una espectacular actuaci¨®n ante los medios de comunicaci¨®n de todo el mundo destacados en Cannes, donde las carcajadas han vuelto a brotar a cada ocurrencia del genio. Porque como aut¨¦nticas actuaciones hay que considerar las presencias del cineasta m¨¢s prol¨ªfico ante los periodistas. Con Woody Allen, se sabe que en cualquier momento estallar¨¢ la perla cultivada. Como esta de hoy: preguntado sobre su relaci¨®n exacta con la muerte, el due?o de las gafas de pasta m¨¢s famosas del mundo ha soltado con voz dubitativa: "Estooo... la verdad es que no ha cambiado demasiado, es la de siempre: estoy en contra de ella". Y ha a?adido, ya entre el estruendo de risas de la gran sala de conferencias de prensa del b¨²nker de La Croisette: "Bueno, mis padres vivieron bastante, as¨ª que en el plano gen¨¦tico estoy muy bien, pero yo soy m¨¢s bien cobarde".

You will meet a tall dark stranger es Allen en estado puro, con sus miserias desoladoras, sus prejuicios y sus frustraciones, pero todo pasado por el tamiz de la m¨¢s inteligente de las carcajadas; una tristeza disfrazada, podr¨ªa casi decirse. Un escritor frustrado y lig¨®n, un abuelete que toma Viagra para arrejuntarse con un ca?¨®n sexual, su ex mujer, una se?ora hechizada por los adivinos y por el whisky, el due?o de una lujosa galer¨ªa de arte que practica el chisgarab¨ªs amoral, una se?ora estupenda -la mujer del escritor frustrado y lig¨®n- colgada del galerista... la galer¨ªa de personajes es impresionante y las situaciones fraguadas por los dedos de Woody Allen (que no ser¨¢n los de Warren Beatty, como a ¨¦l le gustar¨ªa, pero no est¨¢n mal) devuelven al cineasta de Brooklyn al Olimpo del cine y hacen olvidar las estridencias y las dudas de, por ejemplo, Vicky Cristina Barcelona.

No es alegre el nuevo Woody Allen, porque ni la risa ni la carcajada logran tapar del todo la monta?a de nuestras miserias, que est¨¢n y estar¨¢n ah¨ª debajo impert¨¦rritas. Y de hecho, no es alegre la vida para este gran buf¨®n del cine moderno. ?l mismo se encarga de admitirlo a las claras: "Soy m¨¢s bien alguien triste y pesimista, bueno, creao que ya de ni?o lo era, y no estoy diciendo que esto empeore con la edad, pero la vida es como una pesadilla, y el ¨²nico modo de afrontarla es mentirnos a nosotros mismos. No lo digo yo, ya lo dijeron Nietschze y Freud: hay que vivir en la ilusi¨®n, si no, esto es insoportable". M¨¢s tristeza disfrazada, m¨¢s melancol¨ªa te?ida de cachondeo.

Adem¨¢s, Woody Allen reconoce otra cosa: para desgracia de muchos de sus seguidores, ya no quiere hacer los viejos papeles rom¨¢nticos que sol¨ªa hacer en sus propias pel¨ªculas. Hay una raz¨®n de peso: "Ya no tengo edad para interpretar el papel del que seduce a la chica guapa. Y como se pueden imaginar, resulta muy frustrante no poder hacerlo cuando se trabaja con Naomi Watts, con Scarlett Johanson..." A sus 74 a?os, Woody Allen lanza un consejo de amigo: "?Saben? La vejez no tiene ninguna gracia, no es una buena historia, te da problemas de espalda, cada vez pierdes m¨¢s vista, y uno no se hace ni m¨¢s inteligente ni m¨¢s generoso con la edad... as¨ª que, si pueden, eviten la vejez".

La ¨²ltima pel¨ªcula de Woody Allen, comentada por Carlos Boyero

Woody Allen sigue en forma