Andreu Mart¨ªn: "Escribo gracias a V¨¢zquez Montalb¨¢n"
El escritor recibe en el marco de BCNegra el VI Premio Pepe Carvalho
El escritor Andreu Mart¨ªn (Barcelona, 1949) ha obtenido muchos premios, dentro y fuera de Espa?a, incluso un Nacional de Literatura Juvenil por No demanis llobarro fora de temporada (No pidas sardina fuera de temporada), pero el que ha recibido esta tarde, en el marco de BCNegra, el VI Premio Pepe Carvalho, le emociona y le llena de recuerdos. "Soy escritor porque Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n escribi¨® Tatuaje. Por aquella ¨¦poca yo hac¨ªa guiones de c¨®mic, pero despu¨¦s de Tatuaje y tambi¨¦n de Joc brut, de Pedrolo, y de Mica en mica s'omple la pica, de Jaume Fuster, empec¨¦ mi primera novela, Aprende y calla (Aprende y calla). La present¨¦ a un premio que convocaba Libros de la Frontera y no me lo dieron. Volv¨ª a los c¨®mics".
En aquella ¨¦poca trabajaba en la revista Muchas gracias y al otro lado del pasillo estaba Por favor. Un d¨ªa, un colega le dijo que hab¨ªa alguien que le quer¨ªa conocer. Mart¨ªn se fue hacia la puerta y se encontr¨® con V¨¢zquez Montalb¨¢n, Mars¨¦ y a Perich. "Los tres hab¨ªan estado en el jurado que no me dio el premio. Manolo me dijo: 'Me gusta mucho tu libro. Cuenta conmigo. Qu¨¦ generoso era. Perich a?adi¨®: 'No sabes d¨®nde te metes'. Y Mars¨¦ me cogi¨® por la manga me dio las gracias por el peque?o homenaje que le hac¨ªa en Aprende y calla y me dijo: "Tu novela es buena, pero no muy buena. Sal¨ª flotando del despacho. Eran mis ¨ªdolos. Ese encuentro hizo de m¨ª un escritor".
Aprende y calla se public¨® en 1979 y desde entonces Andreu Mart¨ªn no ha parado de escribir y de publicar. A veces da la sensaci¨®n, como suced¨ªa con V¨¢zquez Montalb¨¢n, que tiene un mont¨®n de ordenadores y que en cada uno de ellos escribe una historia diferente".
Una novela de 900 p¨¢ginas
Ahora mismo, Mart¨ªn est¨¢ embarcado en una novela de 900 p¨¢ginas sobre los pistoleros, desde 1920 hasta 1945, con maquis incluidos, y por la que desfilan personajes como Francesc Segu¨ª o Salvador Segu¨ª, el Noi del sucre. Se titula Cabaret Pompeia y estaba en el Paralelo de Barcelona, donde ahora se ubica la sala porno Bagdad. El Pompeia sufri¨® un bombazo en 1920 y, cuenta el escritor, en el Bagdad aun llaman Pompeia al almac¨¦n de bebidas. "La Barcelona de aquellos a?os era m¨¢s dura que Chicago". La novela est¨¢ narrada a trav¨¦s de tres personajes nacidos en 1900. "Es la historia de una generaci¨®n. Antes de escribir una novela ya me la s¨¦ de memoria".
No es la primera vez que Andreu Mart¨ªn mezcla historia y g¨¦nero negro. Barcelona tr¨¢gica, por ejemplo, se desarrolla durante la Semana Tr¨¢gica de julio de 1909.
El escritor alterna las novelas juveniles con las negras. Entre las primeras, destaca la serie del detective adolescente Flanagan, escrita a cuatro manos con Jaume Ribera, nueve novelas de las que se vendieron dos millones de ejemplares. "La literatura juvenil me gusta, porque da m¨¢s libertad que la que supuestamente escribes para adultos, pero tambi¨¦n puede ser excluyente".
"La violencia no es ¨¦pica"
Tiene otra serie protagonizada por una joven mossa d'esquadra, se publica simult¨¢neamente en catal¨¢n y en castellano y ya han aparecido tres t¨ªtulos: La nit que Wendy va apendre a volar (La noche que Wendy aprendi¨® a volar), Wendy ataca y Wendy i l'enemic invisible (Wendy y el enemigo invisible). "No quer¨ªa un polic¨ªa de ¨¦lite sino de alguien que patrullara las calles".
A veces cuesta imaginar que estas series, aptas para j¨®venes y adultos, llenas de humor y amables, hayan sido escritas por el mismo autor de novelas tan duras como Pr¨®tesis, El se?or Capone no est¨¢ en casa, Por amor al arte o El d¨ªa menos pensado. "Si hablamos de Pr¨®tesis, tiene un componente adolescente de rebeld¨ªa contra las instituciones. Cuando la escrib¨ª hubiera dinamitado muchas cosas. Andreu Mart¨ªn se ha hecho mayor, ahora, a mi edad, no escribir¨ªa Pr¨®tesis. La violencia no es ¨¦pica, no es la soluci¨®n de nada".
M¨¢s maduro, como dice ¨¦l, escribe tambi¨¦n con Jaume Ribera, una saga protagonizada por el investigador privado ?ngel Esquius. Han aparecido cuatro t¨ªtulos: Con la muerte no se juega, La clave de la llave, La monja que perdi¨® la cabeza y Si hay que matar se mata. Y, en solitario, tiene otra serie muy original: Asesinatos en clave de jazz. De la banda sonora, que se incluye en un disquete, se encarga David Nel.lo.
Saxofonista con banda
Mart¨ªn se divierte mucho con esta colecci¨®n, cuyo protagonista es un saxofonista que tiene una banda llamada El Signo de los Cuatro (un gui?o a Conan Doyle y a Sherlock Holmes), en la que mezcla g¨¦nero negro con metaliteratura. En los diferentes t¨ªtulos, como El blues del detective inmortal o El blues de la semana negra, rinde homenaje a V¨¢zquez Montalb¨¢n, La Semana Negra de Gij¨®n, Juan Madrid, Jorge Mart¨ªnez Reverte, Juli¨¢n Ib¨¢?ez...
Andreu Mart¨ªn tiene mucha experiencia acumulada. Lo que m¨¢s valora ahora es la "imaginaci¨®n de la ficci¨®n"."El realismo es como una bola de hierro enganchada al pie. Cuando escrib¨ª Pr¨®tesis no me preocup¨¦ por el sistema de investigaci¨®n policial de entonces y Philip Marlowe nunca intent¨® acercarse a la realidad. Nos rompemos los cuernos para que la ficci¨®n supere a la realidad, porque la realidad es inveros¨ªmil y la ficci¨®n por definici¨®n tiene que ser veros¨ªmil".
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