Isidre Nonell, el artista denostado

"La historia de los pintores Mari¨¤ Fortuny e Isidre Nonell es muy parecida: los dos murieron j¨®venes, con 36 y 38 a?os respectivamente, en un momento en el que estaban inmersos en un proceso de cambio, por lo que es una especulaci¨®n querer saber hacia d¨®nde iban a llevar su obra y qu¨¦ iban a pintar a continuaci¨®n", explica Cristina Mendoza, subdirectora del Museo Nacional de Arte de Catalunya (MNAC), y una de las mayores especialistas en Nonell, el pintor que falleci¨® el 21 de febrero de 2011, hoy justo hace un siglo.

Considerado uno de los pintores catalanes m¨¢s destacados de principios del siglo XX y una figura b¨¢sica del ¨²ltimo modernismo, Nonell, nacido en Barcelona en 1872, se caracteriza por tratar temas que no estaban de moda en su tiempo y centrar sus trabajos en seres marginados, como los afectados de cretinismo, una enfermedad cong¨¦nita que provoca retardo en el crecimiento f¨ªsico y mental y, sobre todo, a mujeres gitanas, su producci¨®n m¨¢s personal y singular, que aparecen lejos del folklorismo y siempre en actitud reflexiva, aislada, cabizbaja y melanc¨®lica. "Nonell es el artista denostado de la pintura catalana del siglo XX, porque su pintura fue una patada en el est¨®mago a la burgues¨ªa conservadora acostumbrada a trabajos m¨¢s amables y coloristas", explica Mendoza.

Tras volver de Par¨ªs, donde vivi¨® entre 1897 y 1900 y contact¨® con las vanguardias del momento, expuso en cuatro ocasiones en la Sala Par¨¦s, la ¨²nica galer¨ªa de Barcelona, a partir del a?o 1902. "De forma monotem¨¢tica presentaba las figuras aisladas de mujeres de etnia gitana, sin ning¨²n tipo de an¨¦cdota, con un lenguaje nuevo y provocador, por lo que la cr¨ªtica fue tan feroz y el rechazo tal, que el propietario de la galer¨ªa le asegur¨® que jam¨¢s volver¨ªa a exponer y se recomend¨® que incluso ingresara en un manicomio", explica la experta en arte del siglo XIX. Pese a la adversidad continu¨® pintando en su estudio, aislado de las corrientes del momento y mantenido por su familia que era propietaria de un peque?o comercio de pasta para sopa cerca del Palau de la M¨²sica.

As¨ª hasta que en 1910, Miquel Utrillo, "un personaje vital y el cerebro de operaciones art¨ªsticas de principios de siglo que no ha sido del todo reconocido" recomend¨® al due?o de la galer¨ªa del Faian? Catal¨¤ de Barcelona que organizara una antol¨®gica sobre Nonell. Seg¨²n explica Mendoza, "nunca una muestra de este tipo fue tan f¨¢cil ya que se trat¨® de coger las obras que Nonell ten¨ªa en casa ya que no hab¨ªa vendido nada de su producci¨®n".

La exposici¨®n fue todo un ¨¦xito, "porque hab¨ªa evolucionado, hab¨ªa aclarado su paleta y sus mujeres eran m¨¢s amables, menos derrotadas, aunque sin grandes concesiones a la an¨¦cdota". Lo curioso, explica Mendoza, es que Nonell, no quiso acomodarse al p¨²blico, y lejos de ahondar en su ¨¦xito cambi¨® de tema y se dedic¨® a los bodegones, que nunca hab¨ªa cultivado y pint¨® 11 antes de fallecer en febrero de 1911.

Pese al poco reconocimiento que tuvo en vida, Nonell es hoy un autor muy valorado por carism¨¢tico y uno de los m¨¢s cotizados de su ¨¦poca. El MNAC cuenta con 46 pinturas y 150 dibujos (algunos de los cuales ilustran la fotogaler¨ªa que acompa?a el texto) que permiten seguir su trayectoria pict¨®rica entre 1901 y 1911, aunque no dispone de ninguno de los paisajes que realiz¨® solo en su juventud. La colecci¨®n es, seg¨²n Mendoza, "la mejor de este autor, tanto en pintura como en dibujo", aunque aclara que sus cuadros y dibujos est¨¢n muy repartidos en colecciones particulares catalanas y del resto de Espa?a, de donde proced¨ªan "Gitana" y "Dos Gitanas", que se pudieron ver el a?o pasado en la exposici¨®n Convidats d'Honor que organiz¨® el MNAC para celebrar sus 75 a?os.

En el a?o 2000 la propia Cristina Mendoza, junto a Merce Do?ate, comisari¨® la exposici¨®n "Isidre Nonell, 1872-1911" que se pudo ver en el MNAC y luego viaj¨® a Madrid. "Fue una antol¨®gica muy buena donde reunimos una buena cantidad de obras e hicimos un cat¨¢logo razonado donde publicamos toda la bibliograf¨ªa y la correspondencia, adem¨¢s de rehacer el cat¨¢logo de la exposici¨®n de 1910 que signific¨® el reconocimiento del pintor", asegura Mendoza para justificar que este a?o no est¨¦ preparada ninguna actividad coincidiendo con este aniversario.

Si est¨¢ previsto que Mendoza imparta un curso de verano de la Universidad de Barcelona (El Juliol a la UB) sobre este autor. "Ser¨¢ sobre el a?o 1911 analizado como bisagra entre dos ¨¦pocas, fue el a?o de la muerte de Nonell y del fin del modernismo y la fecha del nacimiento simb¨®lico, con la primera exposici¨®n de Joaquim Sunyer, del noucentismo".