Diez razones para ver Treme
El comienzo de la segunda temporada de Treme ya tiene fecha: el 24 de abril. La cadena HBO ha empezado la promoci¨®n de esta serie que cuenta la reconstrucci¨®n de Nueva Orle¨¢ns (tambi¨¦n conocida como NOLA)tras el hurac¨¢n Katrina. Creada por David Simon, Treme ha conseguido el benepl¨¢cito de la cr¨ªtica gracias a su gran calidad al tiempo que es fiel a la realidad. A un mes de que arranque la segunda temporada y tras visionar y disfrutar de la primera, te proponemos diez razones para no perderte Treme. Diez motivos ¨Cpod¨ªan ser m¨¢s- para ver una serie que aspira a la excelencia. Calidad garantizada. Y una cosa es cierta: si te gusta la m¨²sica norteamericana de ra¨ªces es un pecado no verla.
1. La m¨²sica. Es el primer motivo. Y no puede ser de otra forma. La serie tiene una selecci¨®n musical exquisita. Desde el comienzo hasta el final es un fant¨¢stico recorrido por los sonidos que forman Nueva Orle¨¢ns, bajo la piedra angular del jazz, aunque en sus cap¨ªtulos tambi¨¦n se escucha mucho R&B, funk, folk, honky-tonk y hasta rock. Es una fiesta del ritmo. Es una gozada para los o¨ªdos. La premisa es difundir el maravilloso legado afroamericano de la m¨²sica de Estados Unidos. S¨®lo con la canci¨®n de apertura se justifica este primer punto. Es la hipn¨®tica Treme del gran John Boutt¨¦. Pero hay much¨ªsimo m¨¢s. Mientras se cuentan sus historias entrelazadas, suenan composiciones de Fats Domino, Dr. John, Lee Dorsey, The Radiators, The Meters, por ejemplo, en el apartado del R&B. En un plano m¨¢s jazz suenan Louis Amstrong, Sonny Rollins, Coleman Hawkins o Allen Toussaint. En un ¨¢mbito m¨¢s rock se ponen canciones de Little Richard, Emmylou Harris, Randy Newman o Steve Earle. Escuchar estas canciones con el paisaje de Nueva Orle¨¢ns en la pantalla es sentir que tienes alas. Dan ganas de comprarse cincuenta discos. Y s¨ª, tambi¨¦n dan ganas de irse a vivir Nueva Orle¨¢ns. Puedes escuchar una amplia selecci¨®n de las canciones de Treme en esta lista de Spotify.
2. Los cameos. Otro de sus grandes atractivos. Los creadores de la serie han sido h¨¢biles y han jugado con un buen pu?ado de m¨²sicos para hacerlos aparecer en los cap¨ªtulos con una gran naturalidad, a medida que se desarrolla la trama. Adem¨¢s, no son apariciones forzadas. Al contrario, podr¨ªan haberse producido algunos hechos tal y como suceden en la serie. Es el caso de Elvis Costello que se le ve en un bar empap¨¢ndose de jazz para luego inspirarse en su nuevo trabajo. De hecho, Costello y el pianista Allen Toussaint aparecen juntos grabando ese disco fant¨¢stico que fue The River in Reverse (2006). Tambi¨¦n se ve a Dr. John, padre del R&B, o a Steve Earle y su hijo Justin haciendo ambos de cantantes. Tambi¨¦n el trompetista Kermit Ruffins que hace de s¨ª mismo como un ciudadano de NOLA, feliz con sus barbacoas en casa y sus noches de jazz de garito. Otros que aparecen son Sammie Big Sam Williams, Cassandra Wilson o Troy Trombone Shorty Andrews.
3. El toque HBO. Calidad certificada. La cadena de televisi¨®n por cable de EE UU, propiedad de Time Warner, ha demostrado en los ¨²ltimos a?os que la calidad no se puede sacrificar por la audiencia f¨¢cil o el producto barato. Los ejemplos son numerosos: Los Soprano, The Wire, A dos metros bajo tierra, Roma, Hermanos de Sangre, El s¨¦quito, The Pacific¡ Se cuenta que el jefe de ficciones de HBO dice a los guionistas novicios que entran en su despacho de Los ?ngeles: ¡°Olv¨ªdense del formato, el g¨¦nero, las estrellas, la duraci¨®n, el happy end, el estreno, la comercialidad, la realizaci¨®n y otra pamplinas. Act¨²en como novelistas.¡± Pues eso.
4. David Simon. El gran cerebro de todo esto. Si es trabajo de David Simon solo puede haber una palabra: sobresaliente. Simon se ha erigido como uno de los grandes hombres de la televisi¨®n estadounidense que vive su edad dorada. En la peque?a pantalla, el curr¨ªculum de Simon es de matr¨ªcula de honor. Es el creador de The Corner, The Wire y Generation Kill. Ahora, a?ade Treme. Pocos tienen (incluidos los directores de cine de los ¨²ltimos 30 a?os) su visi¨®n panor¨¢mica de la realidad estadounidense. Es un rastreador nato, bien sea para encontrar las miserias de la calle en Baltimore como para ilustrar la decadencia de la sociedad estadounidense. Con The Wire, este reportero, que pas¨® 12 a?os en el peri¨®dico Baltimore Sun, teji¨® una telara?a de personajes y tramas para ofrecer un producto total, que noquea y maravilla a la par. Ahora, utiliza las mismas teclas y resortes pero recorre menos surcos y trastiendas aunque a?ade m¨¢s clase. Por cierto, Simon muestra la misma lucidez en las entrevistas como en sus creaciones. Cuando habla del futuro del periodismo su voz no solo est¨¢ autorizada sino tambi¨¦n es necesaria.
5. Los actores. Si el espectador ha visto The Wire, se sorprender¨¢ y disfrutar¨¢ del cambio de papeles de algunos de los actores protagonistas de la serie de las esquinas de Baltimore. Y comprobar¨¢ algo que ya se demostr¨® en The Wire: los actores son buen¨ªsimos. Un papel destacado tiene en este sentido el magn¨ªfico Wendell Pierce, que hac¨ªa de polic¨ªa despreocupado y compa?ero de borracheras de McNulty en The Wire. En esta ocasi¨®n hace de Antonie Batiste, un trombotista vividor, separado y que sobrevive c¨®mo puede tocando el instrumento en una ciudad que poco a poco recupera el pulso. Tambi¨¦n el estupendo Clarke Peters, que tras hacer de drogadicto en The Corner y de Lester, el poli bueno e inteligente en The Wire, interpreta a un jefe indio que ama su ciudad y el Mardi Gras (festival de NOLA). La m¨¢s que solvente Khandi Alexander, que hac¨ªa de drogodependiente protagonista en The Corner, es aqu¨ª una mujer luchadora que busca a su hermano desaparecido. Dos actores que se incorporan a la plantilla de David Simon son el inigualable John Goodman y Melissa Leo. Ambos engrandecen la serie.
6. Comprobar c¨®mo somos los turistas. Cierto: el turista es como un hurac¨¢n que arrasa a su paso con el esp¨ªritu de las ciudades. Todos hemos sido alguna vez el t¨ªpico turista que piensa que ya sabe todo de una ciudad o que se siente pronto identificado con tal aspecto cultural o que quiere conocer ¡°todo¡± en apenas una semana en un lugar. ?Pero qui¨¦n puede sentir el verdadero palpito de una ciudad en un viaje de vacaciones? Treme critica todo esto de forma inteligente. As¨ª, se ve al turista que muy listo y guay pide ¡°algo aut¨¦ntico¡± al m¨²sico de la calle y recurre a la canci¨®n m¨¢s sobada de toda la historia de la ciudad. O a los turistas que viajan en un indecente autob¨²s visitando las zonas catastr¨®ficas. El objetivo: hacer fotos a los pobres, a los desheredados y a esos indios que viven en la calle.
7. Aspecto humano de la tragedia. El desarraigo marca el desarrollo de la serie. De hecho, es la trama principal de Treme. Con estilo, con guante blanco, se puede ver c¨®mo fueron la reconstrucci¨®n y los acontecimientos despu¨¦s de la tragedia que supuso el brutal paso del hurac¨¢n Katrina. Las p¨¦rdidas fueron humanas pero tambi¨¦n espirituales. A los cientos de muertos se suman los que sobrevivieron, que perdieron una parte de sus vidas. A gente como Creighton Bernette (John Goodman) le robaron su alma. A otros les mandaron a cualquier parte, de forma chapucera y sin importar nada todo lo dem¨¢s. ¡°?Pero hay negros en Nebraska?¡±, pregunta uno de los protagonistas cuando se entera que han mandado a una familia negra all¨ª. El Katrina acab¨® con una parte esencial de NOLA. Pero, ?hay fe? Tendr¨¢s que ver la serie.
8. Los indios y el Mardi Gras. Es una de las mejores tem¨¢ticas de todas las tratadas. El papel de los indios nativos americanos en Nueva Orle¨¢ns es fundamental para entender la ciudad. El mosaico de vivencias y momentos que muestra Treme supone un acercamiento extraordinario a la realidad de Nueva Orle¨¢ns, donde de siempre han convivido dos poblaciones negras como la ¡°criolla¡± y la ¡°americana¡±. Los criollos de Lousiana provienen de la antigua mezcla cultural franco-colonial. No son, como los dem¨¢s negros, descendientes de los esclavos liberados a fines de la guerra civil del norte contra el sur. Sus antecesores fueron libres mucho antes: los declararon as¨ª los ricos agricultores y comerciantes franceses con motivo de m¨¦ritos especiales. Los negros ¡°americanos¡± representaban al proletariado negro sin recursos, tan com¨²n en el sur estadounidense. Esa mezcla ofrece una riqueza cultural que no se tiene en otra parte del pa¨ªs. Lo instruido y cultivado de los criollos conviven con lo vital y espont¨¢neo de los americanos. Hay un orgullo latente en la m¨²sica de Nueva Orle¨¢ns. Ese ambiente fascinador, que mezcla Francia con Estados Unidos, tiene en el Mardi Gras, su famoso carnaval, su mayor expresi¨®n. Hay un cap¨ªtulo dedicado al gran carnaval.
9. Entender Nueva Orle¨¢ns y su hot. Los expertos en jazz siempre lo han dicho: en la m¨²sica de NOLA se da por primera vez la interpretaci¨®n hot. Hot significa ¡°caliente¡± y es caracter¨ªstico para el jazz y derivados un calor en la expresi¨®n llevada a su extremo. La formaci¨®n de sonidos, la articulaci¨®n, la entonaci¨®n o el vibrato tienen gran importancia. Se expresa lo que se siente. Treme tiene hot porque explica Nueva Orle¨¢ns por encima de etiquetas y t¨®picos. El espectador, como el oyente con la m¨²sica genuina de Nueva Orle¨¢ns, siente esa expresi¨®n llevada a lo real. Lo que flota es el sentimiento de una ciudad, formado por esperanzas y frustraciones, expresado con sonidos. Como dir¨ªan maestros del jazz como Louis Amstrong o Duke Ellington, si no tiene hot no es aut¨¦ntico. Y Treme tiene mucho hot para hablar de Nueva Orle¨¢ns.
10. La gloriosa segunda fila. Toda la poes¨ªa de la serie se halla en la segunda fila. ?Qu¨¦ es? ?Qu¨¦ significa? Es el lugar de encuentro entre el amor y la muerte, entre la celebraci¨®n y la p¨¦rdida. La segunda fila es Nueva Orle¨¢ns en estado puro. La tradici¨®n hace que esta ciudad sea especial por ella. Los funerales de NOLA han pasado a formar parte de la iconograf¨ªa popular. Son sepelios diferentes al resto, cada a?o menos frecuentes, pero que forman parte de la tradici¨®n nativa de la ciudad. Una banda interpreta m¨²sica triste mientras se lleva al fallecido hasta el cementerio, pero a la vuelta se vuelve con m¨²sica alegre. Custodiado por los m¨²sicos, los familiares y amigos, al muerto se le dice adi¨®s con un abrazo de vientos y metales sacado de lo profundo de la tierra de Lousiana donde vuelan el jazz y el R&B. Es un adi¨®s sonoro emocionante. En este desfile hay una l¨ªnea principal de m¨²sicos, pero tambi¨¦n una segunda fila. Esta segunda fila forma parte de un baile tradicional en el que las personas contonean el cuerpo y se dejan llevar por la m¨²sica. La m¨²sica regenera el esp¨ªritu. El dolor se expresa con el cuerpo y el sonido fascinante de NOLA. La serie comienza y acaba con la segunda fila. Es la esencia de Treme. Al final, te quedas con un nudo en la garganta, maravillado con su elegancia, su luz y su m¨²sica. Y entiendes que Nueva Orle¨¢ns no es una ciudad, es mucho m¨¢s: es un estado del alma.
((Diez canciones seleccionadas para ilustrar un playlist de Treme))
Create a playlist at MixPod.com
Comentarios
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.