Un rat¨®n de filmoteca uruguayo
La pel¨ªcula 'La vida ¨²til', del director Federico Veiroj, narra el viaje de un hombre apartado del mundo que ha amado toda su vida
El director uruguayo Federico Veiroj (Montevideo, 1976) vivi¨® seis a?os en Madrid. A comienzos del milenio, durante cuatro a?os, trabaj¨® en la Filmoteca Espa?ola. No era la primera vez que lo hac¨ªa. Veiroj hab¨ªa trabajado antes, de adolescente, en otras cinematecas. "Siempre intento hacerlo. Es un mundo que conozco y que me alimenta mucho". Y de ah¨ª parte la inspiraci¨®n para La vida ¨²til, el conmovedor relato de un hombre de 45 a?os que vive con sus padres y que, obligado por el cierre de la cinemateca en la que ha trabajado siempre, tiene que dejar el oficio que ha amado toda su vida. "Es la historia de un rat¨®n de filmoteca", glosa su director.
Sentado junto a la barra de la cafeter¨ªa de la Casa de Am¨¦rica, donde la pel¨ªcula se proyecta hasta el s¨¢bado, Veiroj relata que la historia comenz¨® a germinar desde sus d¨ªas en Madrid. Entonces naci¨® la historia de "un hombre sumergido en el mundo de las pel¨ªculas, como podr¨ªa ser un tipo muy metido en una biblioteca". Nueve a?os despu¨¦s, el resultado de aquella idea ha recibido ovaciones en donde se ha presentado y premios en los festivales a los que ha asistido. Entre ellos, una menci¨®n especial del Jurado en el festival de San Sebasti¨¢n, el primer premio Coral del festival de La Habana y el premio del Jurado del festival de Cartagena de Indias. Como Jorge, el protagonista de La vida ¨²til, ama el cine y se le nota. La pel¨ªcula es tambi¨¦n una denuncia por el recorte de fondos p¨²blicos a las instituciones culturales. La cinemateca retratada en el filme (que de hecho es la cinemateca uruguaya, aunque el detalle no se menciona) cierra cuando no puede pagar el alquiler del edificio. "Es un problema que tienen miles", explica. "A veces es m¨¢s verdad el cine que lo que pasa en la vida".
Hay otra particularidad en la cinta: el actor que da vida al protagonista, Jorge Jellinek, en realidad no es actor. Es cr¨ªtico de cine desde hace 27 a?os. Veiroj afirma que invit¨® a Jellinek porque encajaba con el personaje que ten¨ªa en mente y que trabajar con ¨¦l fue agradable. "Hizo todo lo que era necesario, todo lo que har¨ªa cualquier actor".
Un ambiente ¨²nico
La sucinta pel¨ªcula (no rebasa los 70 minutos) refleja el estoicismo de Jorge mientras es testigo del derrumbe del mundo en que ha vivido toda su vida. Veiroj explica, sin embargo, que no guarda ning¨²n tipo de resquemor hacia el mundo digital, tachado de responsable de la crisis en la producci¨®n de contenidos. "Es un hecho que se produce y se consume de una manera muy distinta a como se hac¨ªa hace 40 a?os, pero de ninguna manera estoy en contra de la tecnolog¨ªa", asegura. "Ahora es m¨¢s f¨¢cil que nunca ver una pel¨ªcula".
Y es posible hallar ese optimismo en el filme. La pel¨ªcula, fotografiada en un sobrio blanco y negro, no es un relato del desolador panorama que afronta un hombre desempleado. Narra tambi¨¦n su reinvenci¨®n: descubre que hay vida m¨¢s all¨¢ de la sala de proyecci¨®n. "Las cinematecas tienen un ambiente ¨²nico, aun cuando es posible ver pel¨ªculas en muchos lados, nunca ser¨¢ lo mismo a una sala de cine", comenta. "Pero eso tampoco puede hacer que se nieguen los cambios". No es la primera vez que Veiroj narra la metamorfosis de un hombre. Su primera pel¨ªcula, Acn¨¦ (estrenada en Espa?a en 2007), relata la adolescencia de un joven.
Sobre si pel¨ªculas como La vida ¨²til han contribuido a que el cine latinoamericano se sacuda las etiquetas, Veiroj opina que "es inevitable que se hagan generalizaciones, pero yo cuando veo una pel¨ªcula, la veo porque es una pel¨ªcula, no empujado por la nacionalidad que tenga".
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