Ant¨®n Reixa: "No paro de o¨ªr '?pero d¨®nde te vas a meter!"

Hace cine, teatro, m¨²sica, video, poes¨ªa... Es uno de los m¨¢s inquietos representantes de la movida madrile?a, pero Ant¨®n Reixa, nombre por el que se conoce a Antonio Javier Eulogio Rodr¨ªguez Reija (Vigo, 1957), un inconformista de raza, ha decidido encabezar la lista de una de las candidaturas (AUNIR, Autores Unidos por la Refundaci¨®n) que se presentan a las pr¨®ximas elecciones del 7 de febrero a la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), un organismo que pasa por los momentos de mayor impopularidad de sus m¨¢s de 100 a?os de historia. Reixa, por v¨ªa telef¨®nica, habla de sus objetivos si llega a presidente de la SGAE, una entidad que, seg¨²n ¨¦l, padece una crisis interna no s¨®lo por las malas pr¨¢cticas de sus anteriores gestores, sino por una sospechosa descalificaci¨®n global del derecho de propiedad intelectual en una econom¨ªa de libre de mercado, en la que se sacraliza toda propiedad privada.

Pregunta. ?Cree que la impopularidad de la SGAE s¨®lo afecta directamente aesta entidad, o es s¨®lo una parte de un ataque a los derechos de autor en general?

Repuesta. La impopularidad de la SGAE fundamentalmente est¨¢ derivada de las malas pr¨¢cticas en las que ha incurrido la instituci¨®n. Las grandes operadoras y grupos de comunicaci¨®n pueden ser los interesados en descalificar el derecho de autor, pero creo que es razonable que la ciudadan¨ªa y los autores compartamos la convicci¨®n de que el derecho de autor es la base de la independencia y la libertad de la creaci¨®n cultural, sobre todo en un momento en que se van a reducir las ayudas culturales, cada vez se va imponer m¨¢s el mecenazgo cultural y, antes de que la cultura viva de la beneficencia, es importante que la industria cultural se mantenga por s¨ª misma; pocas remuneraciones son m¨¢s democr¨¢ticas que el derecho de autor, que s¨®lo le llega al creador de una obra que es utilizada y disfrutada.

P. ?Por qu¨¦ encabeza una candidatura de la SGAE, un hombre que tiene la imagen de anarcoide, vanguardista, progresista y casi antisistema?

R. Bueno, sigo en lo de la progres¨ªa. Es una situaci¨®n rara para m¨ª, no paro de o¨ªr a mi entorno dici¨¦ndome 'pero d¨®nde te vas a meter". Me presento por la condici¨®n que tengo en el derecho de autor y el coraje que me ha dado que, despu¨¦s de 25 a?os como socio, apenas me he reunido ni he participado en elecciones. Creo que gran parte de la responsabilidad de lo que ha ocurrido, adem¨¢s de los que han practicado esas acciones delictivas, est¨¢ en que los socios hemos dejado que se nos usurpe la representaci¨®n en la SGAE. Hay restaurar el buen nombre del derecho de autor a la ciudadan¨ªa. Para eso, y sin entrar en contradicci¨®n con mis convicciones, de lo que se trata de hacer una candidatura profesional, de gesti¨®n.

P. Usted sigui¨® con atenci¨®n el 15-M, un movimiento en el que hay una corriente muy beligerante hacia el modelo actual de gesti¨®n de los derechos de autor y hacia los objetivos de la SGAE.

R. Soy muy sensible al movimiento del 15-M y me llam¨® mucho la atenci¨®n que esos llamamientos contra la SGAE y contra el derecho de autor formaran parte de sus reivindicaciones. Ah¨ª se da un error de mirada, el problema del acceso a la cultura no es el derecho de autor, al rev¨¦s: deber¨ªa ser garant¨ªa para los usuarios de contenidos culturales.

P. ?Con qui¨¦n va a contar en su candidatura?

R. En enero lo haremos p¨²blico y hasta entonces tengo que guardar discreci¨®n y aunque est¨¢ casi todo hecho, hay que cerrar m¨¢s cosas.

P. ?Va a tener el mismo valor un voto de una persona en esas circunstancias que el voto de Serrat, Sabina o Jordi Galcer¨¢n?

R. En la SGAE hay voto ponderado. Seg¨²n el socio m¨¢s recauda, va acumulando votos. Hemos hecho una comparativa con las entidades de gesti¨®n europeas y esto se da en todas, y no hay que olvidar que la SGAE es una sociedad sin ¨¢nimo de lucro pero tiene un car¨¢cter de cooperativa, de entidad de gesti¨®n colectiva, y obviamente la SGAE se mantiene gracias a los descuentos que les aplican a los autores.

P. ?C¨®mo quiere que sea la SGAE del siglo XXI?

R. Transparente en la gesti¨®n. Ha fallado el mecanismo de control por parte del organismo regulador. Hay que formalizar un protocolo, para que el organismo regulador, ya sea el Ministerio de Cultura o el organismo gubernamental que sea, adem¨¢s de tener la potestad para gestionar los derechos de autor, pueda hacer un seguimiento continuado de lo que es la gesti¨®n. Imagino una SGAE en la que todos participemos, sobre todo los autores j¨®venes, porque hay un gran d¨¦ficit en este sentido, al igual que con las creadoras, ya que solo hay un 18 de mujeres entre los socios. Quiero imaginar una SGAE con una imagen restaurada ante la ciudadan¨ªa.

P. Hay quien sostiene que los creadores hande ajustarse al nuevo modelo de negocio de la Red.

R. El desaf¨ªo ide la SGAE es definir ese nuevo modelo de negocio, los autores ser¨ªamos la parte m¨¢s vulnerable y en el momento en que estamos -en el que los operadores han vendido todo lo que han querido en banda ancha- quiz¨¢ toca reflexionar. No se puede herir de muerte la industria cultural. Tendremos que adaptarnos y habr¨¢ que hacer mucho I + D.

P. ?Con la p¨¦rdida del prestigio de la SGAE en los ¨²ltimos a?os y meses, no cree que deber¨ªan plantearse cambiar el nombre de la entidad?

P. En nuestro programa se habla de esa posibilidad de cambiar la marca, pero se tiene que sustanciar, porque ser¨ªa demasiado f¨¢cil cambiar el nombre y que todo se arreglara. Tenemos de nuestro lado el sentido com¨²n y la complicidad un¨¢nime de los autores. Nuestro lema es devolver la SGAE a los socios y eso ya est¨¢ ocurriendo, pase lo que pase en las pr¨®ximas elecciones.

P. ?Le preocupa la competencia de la candidatura del ala conservadora liderada por Jos¨¦ Miguel Sastr¨®n?

R. No, en absoluto. La refundaci¨®n de la SGAE pasa porque la pr¨®xima junta directiva sea necesariamente plural y espero que en ella estemos todos representados. Adem¨¢s se pueden presentar candidatos individuales, porque las listas son abiertas.

P. Uno de los puntos d¨¦biles y controvertidos de la SGAE se deriva del tratamiento que le han dado al asunto del canon por copia privada.

R. Lo que queremos es que se cumpla la legalidad. Hay una disposici¨®n europea, que entendemos bien los autores, que dice que se debe discriminar en qu¨¦ medida los soportes inform¨¢ticos son utilizados para el intercambio de archivos con contenido cultural. En el cassette virgen hab¨ªa una tasa de copia privada, y eso que s¨®lo se utilizaba para grabar m¨²sica y poco m¨¢s, pero hoy los pendrives y los DVD se utilizan para eso y para mucho m¨¢s. Es un asunto que hay que adecuar, aunque la recaudaci¨®n de SGAE a trav¨¦s del canon no llega ni a un 10%. Lo que no se puede hacer por parte de los fabricantes es utilizar el canon para cargar precios abusivos cuando a veces el canon son unos c¨¦ntimos.

P. ?No es la situaci¨®n de la red de teatros Arteria una de las cuestiones m¨¢s grave que tiene ahora la SGAE encima de la mesa?

R. Se va a proponer una desinversi¨®n planificada. Lo que se ha hecho es una inversi¨®n absolutamente megal¨®mana y sin planificaci¨®n y se ha hipotecado a la Fundaci¨®n Autor con la compra de teatros. Se ha colapsado el trabajo formativo y promocional. Hay que desinvertir de manera planificada. No vamos a dar los teatros a precio de saldo.

P. Muchos socios en las ¨²ltimas d¨¦cadas ven¨ªan hablando de c¨®mo Eduardo Bautista hab¨ªa reflotado la SGAE. ?Qu¨¦ va a mantener o recuperar usted de esa etapa calificada durante a?os de espl¨¦ndida y en los ¨²ltimos tiempos de ca¨®tica?

R. No ser¨ªa capaz de hacer esa valoraci¨®n porque el shock ha sido y es terrible. Parece incre¨ªble que Bautista, que refund¨® la SGAE en los a?os 80, tras estar en manos de unos autores y m¨²sicos militares que no hab¨ªan asumido la transici¨®n democr¨¢tica, haya pervertido tanto la instituci¨®n. Lo que hay que mantener de la SGAE es el patrimonio que administra y tener en cuenta el capital humano, del que no se habla en los peri¨®dicos, que son los empleados de la SGAE. Quiero hablar con el Comit¨¦ de Empresa y con la red de los 200 comerciales que est¨¢n en la calle y hablan con los peque?os negocios con el objetivo de recaudar.