Dimes y diretes en torno al ¡®enigma de Mas del Vent¡¯

Todo lo que rodea al claustro de estilo rom¨¢nico de la finca Mas del Vent de Palam¨®s, incluida su piscina de casa de campo de millonarios con buen gusto y los coquetos pinos colindantes, huele a misterio. Y si alg¨²n sabueso de la ficci¨®n hist¨®rica quiere husmear un poco en el asunto y echar la imaginaci¨®n a volar, ah¨ª tiene chicha. ?Por qu¨¦ no? Ya ocurri¨® con el superventas Jos¨¦ Luis Corral y el C¨®dice Calixtino robado (y ahora recuperado) en Santiago: que ambos dos acabaron felizmente casados en forma de novel¨®n.

El 'affaire' del claustro da para una novela con vocaci¨®n de superventas

Abundante chicha hay, en efecto, en este asunto de piedras milenarias ¡ªo no¡ª, investigadores desinteresados ¡ªo no¡ª, pol¨ªticos solo movidos por el servicio a la sociedad y zarandajas as¨ª ¡ªo no¡ª y la tradicional evidencia de bonachones curas vendiendo cosas a anticuarios ojo avizor. O no. A lo peor todo fue un sue?o. O un montaje circense de piedra. Tambi¨¦n tendr¨¢n chicha ese hipot¨¦tico novelista, su hipot¨¦tico editor y el hipot¨¦tico adelanto editorial a buen seguro astron¨®mico, en la propia actitud de los responsables de la Generalitat. Unos gestores pol¨ªtico-culturales que, m¨¢s all¨¢ de convocar a un grupo de expertos para poner en com¨²n y consensuar con ellos la postura a adoptar en cuanto a la autenticidad o no del claustro, les sientan a la mesa para decirles algo as¨ª como: ¡°Se?ores, esto es lo que hay, y esto es lo que tenemos que consensuar y firmar de forma un¨¢nime¡±. Y como las unanimidades impuestas suelen ser perezosas y un pel¨ªn indignas, ocurre que el anhelado consenso ha saltado por los aires ¡ªal menos por ahora¡ª y algunos de los profesores, t¨¦cnicos y estudiosos han dicho nones.

La Generalitat trata de forzar el consenso de cara a un dictamen

Tan extravagante resulta sostener que el claustro de Mas del Vent es rom¨¢nico desde la primera hasta la ¨²ltima piedra como pretender que alguien se tom¨® la molestia, en el siglo XIX o XX, de fabricar su personal montaplex de piedra para sacarse unos cuartillos. Casi todos los expertos que han dado su opini¨®n en este rocambolesco asunto ¡ªhistoriadores del arte, arquitectos, arque¨®logos, ge¨®logos, conservadores...¡ª han mostrado un mayor o menor grado de escepticismo en cuanto a la autenticidad del enigma de Mas del Vent. Normal. Sostener con tanta rotundidad que todo es un pastiche, chocar, choca. Pero una cosa est¨¢ clara: sea cual sea el dictamen final, el misterio seguir¨¢ revoloteando por entre el aire limpio del Bajo Ampurd¨¢n.