Seis a?os para una obra maestra
Kenneth Lonergan rod¨® en 2005 ¡®Margaret¡¯, un drama que le ha costado meses de montaje y demandas judiciales
Al otro lado de la l¨ªnea telef¨®nica, Kenneth Lonergan (Nueva York, 1962). A uno le entran ganas de decirle cosas cari?osas, de asegurarle que, a pesar de todos los pesares, Margaret es una gran pel¨ªcula. Esos pesares le han tenido atado durante seis a?os a un proyecto del que incluso han fallecido dos de sus productores: Sydney Pollack y Anthony Minghella. Durante ese tiempo, Lonergan, considerado el gran dramaturgo estadounidense de menos de 50 a?os ¨Cel m¨ªtico Ben Brantley, ahora cr¨ªtico teatral de The New York Times, es uno de sus grandes fans- y director de Puedes contar conmigo (2000), con la que fue candidato al Oscar al mejor guion -tambi¨¦n compiti¨® en los premios de Hollywood por su labor como escritor de Gangsters de Nueva York- solo vivi¨® para Margaret. ¡°Puede que al final todo ese dolor fuera necesario para un trabajo as¨ª¡±.
En 2004, Lonergan parec¨ªa un caballo ganador. Scott Rudin, el estudio Fox Searchlight y el inversor privado Gary Gilbert (due?o del equipo de baloncesto Cleveland Cavaliers), apostaron por financiar un guion, Margaret, al que Lonergan ya hab¨ªa dedicado dos a?os de escritura ¨C¡°antes de que pasemos a otras preguntas, s¨ª, reconozco que soy puntilloso y perfeccionista¡±-. El cineasta rod¨® el filme en Nueva York entre septiembre y noviembre de 2005 con un reparto de campanillas: Anna Paquin, Matt Damon, Mark Ruffalo, Matthew Broderick, Allison Janney y Jean Reno, entre otros. Todo iba bien. Entonces, ?qu¨¦ pas¨® para que se estrenara en EE UU a finales de 2011 y haya llegado a los cines espa?oles el viernes pasado?
Empecemos por el libreto: ¡°El primer borrador ten¨ªa 368 p¨¢ginas. Claro que lo pul¨ª antes del rodaje¡±. Var¨ªa much¨ªsimo, pero en condiciones normales, cada p¨¢gina de un guion supone un minuto de pel¨ªcula. El cineasta no film¨® tanto, sino que en el primer montaje se qued¨® en tres horas. Sin embargo, Lonergan hab¨ªa firmado una clausula por la que el metraje no deb¨ªa de superar los 150 minutos. Pidi¨® ayuda a varios amigos para que le ayudaran a decidir d¨®nde pod¨ªa pulir. ¡°Pollack aparece en los cr¨¦ditos porque fue uno de los primeros en leer el guion, me ayud¨® much¨ªsimo con sus comentarios y siempre fue un apoyo. Minguella era su socio en la productora y por eso acreditamos su nombre tambi¨¦n¡±. Margaret es un drama complejo ¡°en el que hay hasta 51 personajes con di¨¢logos¡±, recuerda Lonergan, que se guard¨® uno para interpretarlo ¨¦l mismo. ¡°En el germen de la historia estaba solo una chica que asiste a un accidente mortal de tr¨¢fico. Todo es extra?o para ella. Despu¨¦s decid¨ª que vi¨¦ramos su vida, porque su d¨ªa a d¨ªa sigue a pesar del accidente y a la vez cambia por ese accidente¡±. Anna Paquin es la protagonista, una adolescente complicada y a la vez com¨²n y corriente. ¡°Es que de eso va la pel¨ªcula, de c¨®mo cualquier chaval se cree un tipo especial, superior, y el descubrimiento gradual de que ni los padres son monstruos ni ellos el centro del universo. Sencillamente, son otro ser humano perdido en una ciudad como Nueva York¡±. Y con los mismos impulsos, deseos y emociones que quienes les rodean. ¡°Por eso necesitaba los otros personajes, para crear el equilibrio¡±. Lonergan habla de interactuaciones entre seres humanos, de Kubrick y Hitchcock ¨Caunque tras nombrarlos dice que por supuesto ¨¦l no es comparable con ambos-, de que rod¨® r¨¢pido pero que recuerda un plano de hasta 40 tomas, de que les dej¨® bastante libertad a los int¨¦rpretes ¡°porque todos eran y son buenos¡±.
Pero en la mesa de montaje se atasc¨®. ?l no quiere hablar mucho de esos a?os, pero acepta definir el proceso con una palabra, que suelta entre carcajadas: ¡°Complejo¡±. Los productores le presionaron, y ¨¦l no encontraba el camino. En oto?o de 2007, Dylan Tichenor, el montador de Brokeback mountain, es contratado para pulir Margaret y entrega una versi¨®n de dos horas que espanta a Lonergan. ¡°De verdad, yo no reducir¨ªa este enfrentamiento al cl¨¢sico combate arte contra dinero. No me parece justo¡ aunque huela a eso¡±.
Finalmente en junio de 2008 Kenneth Lonergan finaliza una pel¨ªcula de 150 minutos. Fox Searchlight est¨¢ contenta, Lonergan tambi¨¦n ¨C¡°S¨ª, en esencia es mi pel¨ªcula¡±-, Gilbert no. Por ello, reh¨²sa pagar la mitad de los casi diez millones de euros de presupuesto (su compromiso) y demanda al estudio y al cineasta. Les acusa de poco profesionales, de ralentizar a prop¨®sito todo el proceso. A partir de ese momento siguen tres a?os de denuncias y contradenuncias en el juzgado, aunque Gilbert acepta que Scorsese haga junto a Thelma Schoonmaker, su editora habitual, otro montaje ¨Cque incluso fue m¨¢s largo, de 160 minutos-. Esa es la pel¨ªcula que en agosto de 2011 se prepara para ser estrenada en el certamen de Toronto, pero que Gilbert, empecinado en apoyar el montaje de Tichenor, rechaza otra vez. ¡°Digamos que el tipo del cheque se interpuso en el proceso creativo¡±, comenta Lonergan, que legalmente tampoco tiene permitido decir mucho m¨¢s. En septiembre de 2011, Searchlight se harta y estrena Margaret en una sala neoyorquina y otra de Los ?ngeles con la versi¨®n de Lonergan de 150 minutos. Obviamente casi nadie la ve. Alg¨²n cr¨ªtico habla de obra maestra, el estudio se plantea un empuj¨®n para los Oscar, pero llega tarde. El drama languidece.
Y alcanzamos este mes de julio, cuando en EE UU se lanza el DVD con los dos montajes de Lonergan, el de 150 minutos y el de tres horas. ¡°Bueno, s¨ª, me parece que incluso podr¨ªan parecer pel¨ªculas diferentes, pero las dos son m¨ªas¡±. Al mismo tiempo Margaret se estrena en los cines en Espa?a y, para continuar con la ignominia, solo en versi¨®n doblada. El cineasta contesta al tel¨¦fono desde Los ?ngeles, donde asiste a una proyecci¨®n de promoci¨®n del DVD. ¡°Bueno, la vida sigue, he estrenado hace dos semanas una nueva obra en Nueva York [con cr¨ªticas buen¨ªsimas]¡±. Toda esta locura, este doloroso proceso, ?afectar¨¢ a sus futuros proyectos en el cine? ¡°Esa pregunta me la hago yo mismo muchas veces. La respuesta es que no lo s¨¦. Miento, creo que si vuelvo a dirigir un filme, ser¨¢ algo m¨¢s sencillo. Ni de broma tendr¨¦ 51 personajes con frase¡±.
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