El fundador de Rock in Rio apuesta por conservar la cita de Madrid
Roberto Medina anuncia oficialmente que el evento seguir¨¢ en Arganda del Rey Tras la ¨²ltima edici¨®n, se habl¨® de un posible adi¨®s a Espa?a
"Una decisi¨®n personal muy solitaria" del fundador de Rock in Rio, Roberto Medina, es lo que ha mantenido y mantiene a Madrid como una de las citas mundiales de este festival, aunque el brasile?o ha supeditado la continuidad de la franquicia espa?ola a que haya "cambios" en el mercado y en la mentalidad empresarial.
"Para hablar de Rock in Rio Madrid hay que hablar de la situaci¨®n de Espa?a como un todo", se?ala cautamente el directivo antes de aplicar la palabra "crisis" al festival, que en su reciente y ¨²ltima edici¨®n en la capital espa?ola reuni¨® a 173.000 personas, una "buena" cifra, reconoce, "pero no para su dimensi¨®n".
Medina se?ala directamente a la crisis econ¨®mica por la que atraviesa Espa?a, a su gesti¨®n ("Alemania ha emprendido un camino err¨®neo, no hay forma de mejorar sin una pauta de crecimiento", reflexiona) y tambi¨¦n al mundo empresarial.
"El mundo empresarial espa?ol est¨¢ muy acomodado despu¨¦s de cuatro a?os de crisis. Piensan igual que antes de ella", se queja este empresario, que vaticina un futuro "m¨¢s competitivo" y que en este dif¨ªcil contexto decidi¨® explotar a¨²n m¨¢s la marca "Rock in Rio" con nuevas sedes en Am¨¦rica Latina.
Sorprenden las cifras de asistencia en Espa?a con las de Portugal, un pa¨ªs afectado tambi¨¦n por la crisis, pero en el que el p¨²blico respondi¨® mucho mejor a la oferta musical, encabezada -eso s¨ª- por Bruce Springsteen, Stevie Wonder, Bryan Adams, Maroon 5, Metallica y The Offspring, entre otros.
Para ello, dice, cont¨® con la mayor inversi¨®n en sus seis a?os de historia lisboeta gracias a los patrocinadores, con su promoci¨®n y con unos veh¨ªculos de promoci¨®n "que all¨ª se movilizan diez veces m¨¢s", oportunidad que aprovecha para arremeter contra el papel de los medios espa?oles en la g¨¦nesis de esperanza.
"Portugal, como Am¨¦rica Latina, est¨¢ acostumbrada a la crisis. Hist¨®ricamente ha tenido problemas fuertes. Su gesti¨®n econ¨®mica es tan mala como la de Espa?a, pero la psicol¨®gica es mucho mejor".
"Cuando a m¨ª me secuestraron (en junio de 1990), estuve entre la vida y la muerte durante seis d¨ªas. Cuando yo ten¨ªa esperanza, ni ten¨ªa hambre ni nada", comenta a modo de ejemplo sobre uno de los episodios m¨¢s controvertidos de su biograf¨ªa, pues se lleg¨® a sospechar que pudo ser c¨®mplice de su propio secuestro, por el que se pagaron 2,5 millones de d¨®lares.
Medina no ve un lastre para la asistencia en los 33 kil¨®metros que separan el centro de Madrid de la Ciudad del Rock, en Arganda del Rey, pero s¨ª se detiene a valorar la responsabilidad del cartel programado para Madrid en 2012, con Man¨¢, Lenny Kravitz, David Guetta y Red Hot Chili Peppers como artistas principales, algunos de los cuales hab¨ªan actuado recientemente en la capital.
"Este a?o fue muy dif¨ªcil contratar a los cantantes que nuestro sondeo miraba, porque muy pocos artistas estaban en Europa por la crisis, hab¨ªa menos giras. Eso nos hizo quitar un d¨ªa de la programaci¨®n. No fue por una cuesti¨®n econ¨®mica, sino por falta de opciones", asegura sobre el recorte de cinco a cuatro jornadas.
Por si no fuera suficiente, Rihanna, la estrella de la segunda jornada, cancel¨® su actuaci¨®n a unos d¨ªas de su concierto para viajar a su pa¨ªs, Barbados, por la muerte repentina de su abuela.
"Era la primera vez en 30 a?os que sufr¨ªa una cancelaci¨®n solo unos d¨ªas antes. Pienso que Rihanna no debi¨®, fue una situaci¨®n dura, claro, pero una semana antes del concierto...", se lamenta.
Al preguntarle directamente por la viabilidad de Madrid 2014, Medina se?ala que las cosas est¨¢n hoy como cuando hace dos a?os tuvo que plantearse si celebraba esta ¨²ltima edici¨®n, con el criterio en contra de su equipo directivo, y ¨¦l apost¨® por Espa?a, entre otras cosas, dice, "para demostrar gratitud al mercado espa?ol".
"Claro que quiero volver a Espa?a. Mi mirada es global y, en ella, hay proyectos que pueden ir mal y otros bien, pero lo que quiero ver es un cambio de postura de los dirigentes de las compa?¨ªas", advierte este visionario, que critica la subida del IVA aplicado a los conciertos al 21%.
En esa l¨ªnea de defensa de Madrid, "una decisi¨®n personal muy solitaria" respecto al mismo equipo directivo, destaca el "espacio c¨ªvico privilegiado" del pa¨ªs. "El patrimonio de Espa?a es la ciudad, la estructura urbana, que es la mejor del mundo", dice.
A finales de a?o, avanza, volver¨¢ por estos lares para tantear a los patrocinadores, pero lanza un mensaje de puro optimismo: "Creo en Espa?a y creo que va a cambiar".
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