Maya, una abeja centenaria con un oscuro pasado
El personaje creado en 1912 por el filonazi Waldemar Bonsels cumple un siglo Volver¨¢ a la tele en 2013 con una versi¨®n en 3D
Ya es casualidad que el a?o del Fin del Mundo Maya la abeja Maya tenga que cumplir un siglo. La centenaria himen¨®ptera, que no pertenece a ninguna civilizaci¨®n precolombina, llegar¨¢ a esa provecta edad el mes que viene. Sus primeras aventuras vieron la luz en forma de novela ¨CDie abenteuer der biene Maja, (Las aventuras de la abeja Maya)¨C en septiembre de 1912. El autor fue Waldemar Bonsels (1880¨C1952), pero la abeja que ¨¦l concibi¨® ten¨ªa poco de la perroflauta que triunf¨® en la serie de animaci¨®n de los a?os setenta y que el a?o que viene protagonizar¨¢ 78 nuevos cap¨ªtulos en 3D, un proyecto de la productora Studio100 que se ha retrasado un a?o y en el que se han invertido 10 millones de euros.
La Maya original no viv¨ªa en pa¨ªs tan multicolor. Seg¨²n relataba hace meses el Frankfurter Rundschau, el cuento sedujo a los soldados alemanes en las trincheras de la Primera Guerra Mundial. Bajo la artiller¨ªa pesada de la guerra de posiciones, los militares recurr¨ªan a la abeja por su mezcla de gusto por la aventura, misticismo hacia la naturaleza y su ¡°pat¨¦tico¡± sentido del hero¨ªsmo. Pero en las p¨¢ginas del cuento hay quien ha visto claves a¨²n m¨¢s sombr¨ªas: la colmena como ideal de sociedad totalitaria, un desprecio racista por las avispas...
¡°La pregunta que nos gu¨ªa es si este autor debe ser redescubierto o si su trabajo ha quedado olvidado con raz¨®n¡±, declar¨® a Die Welt el investigador Sven Hanuschek, de la Universidad Ludwig-Maximilians de M¨²nich. Hanuschek ha indagado en documentos que apuntan al antisemitismo de Bonsels (que muri¨® en 1952) y a una tendencia filonazi.
En los a?os 20 se public¨® la primera versi¨®n del cuento con dibujos y en 1925 el propio Bonsels rod¨® un documental con animales reales. Walt Disney se interes¨® por el personaje, pero recibi¨® el no por respuesta.
Los inquietantes or¨ªgenes de Maya quedaron sin embargo borrados por la versi¨®n televisiva del cuento. Una dicharachera coproduci¨®n elaborada por antiguas potencias del Eje (Jap¨®n, Alemania y Austria) que se estren¨® en Europa en 1976 (en Espa?a en 1978). Los valores de la serie son quiz¨¢ los opuestos a los del libro de Bonsels: pacifismo, libertad, tolerancia¡
En TV se introdujeron personajes muy famosos que no exist¨ªan en el relato original y que fueron agreg¨¢ndose en ediciones posteriores de la novela, en las que el tono militarista fue rebajado. ?Qui¨¦n no recuerda el di¨¢logo entre el z¨¢ngano Willy y Maya cu¨¢ndo esta le anima a que se d¨¦ un ba?o?: ¡°Es que el agua est¨¢ muy mojada¡±, se excusa el harag¨¢n. Tampoco estaba en el texto original Flip, el grillo violinista con chistera (el mismo sombrero que llevaba Pepito Grillo, por cierto). La siniestra ara?a Tecla, en cambio, acompa?a a Maya desde el principio.
El aspecto de la abeja ha cambiado bastante con el tiempo, en los setenta fue dise?ada por un artista japon¨¦s, mientras que Willy fue obra de Marty Murphy, animador de la Disney. La melod¨ªa de la serie es obra del compositor checo Karel Svoboda. Pese a sus 100 a?os, Maya luce m¨¢s estilizada que nunca y ha conseguido mantener su estatus de icono infantil europeo con m¨¢s solvencia que sus rivales Marco y Heidi. Existe una aplicaci¨®n para iPad y iPhone protagonizada por la abeja y pronto podremos verla volar en tres dimensiones, sobre esas flores que tanto ama. Quiz¨¢ alg¨²n soldado se eche la mano al bolsillo entre combate y combate para ver en el tel¨¦fono m¨®vil las nuevas aventuras de la abeja.
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