¡°Un principito con el que emocionarse hasta el corvej¨®n¡±

Para Jos¨¦ Luis G¨®mez, la decisi¨®n de meterse en la piel de El principito,el cl¨¢sico de Antoine de Saint-Exup¨¦ry, se bas¨® en gran medida en un hecho tan aparentemente dom¨¦stico como trascendental: el convencimiento de que deb¨ªa regalar a su hija Clara la representaci¨®n de este texto. Pero aqu¨ª el peque?o antih¨¦roe no sale a descubrir un m¨¢gico universo, sino que emprende un posible y agridulce viaje final hacia las estrellas, en el que es acompa?ado por un aviador, un zorro, una rosa, una serpiente¡­ siempre interpretados por Inma Nieto. El espect¨¢culo empez¨® su andadura anoche en el teatro de la Abad¨ªa de Madrid, donde estar¨¢ hasta el 17 de noviembre.

G¨®mez conoc¨ªa al director italogermano Roberto Ciulli y su teatro del Ruhr desde hace d¨¦cadas y hace alg¨²n tiempo vio en aquel escenario El principito que interpreta el propio Ciulli con Maria Neumann. ¡°Me gust¨®, aunque quiz¨¢ no sea esa la palabra que define lo que me pas¨®. Me movi¨®, me intrig¨®, me atrajo, pero no hablamos de nada m¨¢s hasta que a?os despu¨¦s le propuse hacer una nueva versi¨®n para aqu¨ª, y ya entonces supe que Inma ser¨ªa la persona que tendr¨ªa que asumir el resto de personajes y objetos de la obra¡±.

Ahora G¨®mez tiene mucho m¨¢s claro lo que le atrajo de este montaje, que en la versi¨®n espa?ola tiene cambios sustanciales. ¡°Es un espect¨¢culo que est¨¢ a medio camino entre Beckett y Saint-Exup¨¦ry, porque es m¨¢s luminoso que Beckett, aunque al mismo tiempo es una especie de Final de partida, con much¨ªsima luz¡±, se?ala G¨®mez de este espect¨¢culo que cree pueden ver perfectamente espectadores a partir de 11 o 12 a?os, tanto si conocen el texto como si no.

El director de La Abad¨ªa tambi¨¦n observa en el montaje un leve toque del lenguaje de clown, ¡°pero tratado con cuidado, porque ese lenguaje puede ser muy intrusivo y se puede emancipar del contenido¡±, sostiene, al tiempo que tiene claro que el clown siempre ha sido una manera de ir al encuentro de ese ni?o que uno lleva dentro. Aqu¨ª el viaje inici¨¢tico no es el de un ni?o y un universo que descubre. El espect¨¢culo tiene algo de un peque?o pr¨ªncipe que se va hacia las estrellas y que se enfrenta a una despedida m¨¢s definitiva, por lo que el espectador tambi¨¦n se encuentra con un viaje inici¨¢tico que lo m¨¢s importante que ense?a, seg¨²n G¨®mez, es a perder el miedo: ¡°Se puede hablar de eso con sencillez; el viaje final es sencillo y simplificador, aunque en lugar de decir que se va a la nada, prefiero pensar que se va al origen, de donde vinimos, y creo que el origen es un sitio de luz¡±.

El actor y acad¨¦mico, que canturrea en escena una melod¨ªa conocida, pero con una letra de Jes¨²s Mun¨¢rriz ¡ªambas con un perfume melanc¨®lico¡ª, define este trabajo como un espect¨¢culo ¡°de extraordinaria e inmensa sencillez, herencia del teatro contempor¨¢neo, y al mismo tiempo es de una gran profundidad, donde el humor y la emoci¨®n se dan la mano. Es un espect¨¢culo para sonre¨ªr y emocionarse hasta el corvej¨®n¡­ Aparentemente peque?o, pero inmenso¡±.

Como a¨²n no ha tomado posesi¨®n de su sill¨®n en la Real Academia no tiene obligaci¨®n de acudir cada jueves a las sesiones plenarias. ¡°Cuando llegue el momento tendr¨¦ que no actuar los jueves, o empezar m¨¢s tarde, porque en la Academia inicio una etapa muy importante, pues ya est¨¢ en marcha el proyecto de oralidad del castellano¡±. El actor afirma que el trabajo de El principito le ha pedido una forma de energ¨ªa muy sutil y muy fina: ¡°Ha sido uno de los frutos de esta aventura, que me ha sumergido en un trabajo distinto al que he usado, o que me ha sido accesible, y est¨¢ siendo un gran descubrimiento¡±.