Las consecuencias del ¡®efecto Ruim¨¢n¡¯

El caso Ruim¨¢n ya se ha convertido en el fen¨®meno televisivo de la semana. Protagonizado en directo, el desplante del cantante canario, que abandon¨® inesperadamente, levant¨® enseguida una ola de comentarios en Twitter, convirti¨¦ndose inmediatamente en trending topic (TT), as¨ª como una tremenda repercusi¨®n medi¨¢tica. Pero, ?servir¨¢ al artista para conseguir mayor fama? Y el programa, ?ganar¨¢ audiencia?

¡°En la ¨²ltima gala, desde m¨¢s o menos las 10.45 hasta las 03.00 Ruim¨¢n fue TT, y eso es brutal para una persona casi an¨®nima¡±, explica Eduardo Pr¨¢danos, consultor en territorio creativo y director acad¨¦mico del PDP, experto en transmedia y televisi¨®n social. Con todo, el programa, que en la pasada gala suscit¨® 28 TT nacionales y 23 mundiales, sumando 283.225 mensajes, se ha caracterizado desde el comienzo por su enfoque en la audiencia social, tanto que desde su primera emisi¨®n se convirti¨® en l¨ªder en Espa?a, con m¨¢s de 200.000 mensajes enviados cada retransmisi¨®n. Todo lo que ocurre en La voz encuentra eco en la Red.

En la gala del pasado 7 de noviembre, grabada, la concursante Sharay Abell¨¢n tambi¨¦n dio que hablar con su desairada salida tras haber sido expulsada, provocando la subsiguiente avalancha de comentarios en la Red. ¡°Esto no se not¨® en la audiencia¡±, apuntilla Jorge D¨ªez, de la web de audiencias y actualidad televisiva La Parab¨®lica. Pero lo de este mi¨¦rcoles fue en directo.

El directo, generador de tensi¨®n

¡°Creo que estos espacios viven de la pol¨¦mica que se genera y que no est¨¢ prevista¡±, explica Pr¨¢danos. ¡°Pero yo no lo veo como algo malo, sino que refuerza el producto, porque lo est¨¢ dotando de vida¡±. El espectador, se?ala D¨ªez, comprende que las reacciones de los concursantes en directo quedan fuera del control del programa: quien deber¨¢ justificarse es quien act¨²a fuera del guion.?

Cuando alguien se sale de la l¨ªnea marcada mientras se est¨¢ en el aire, el espacio se ve obligado a improvisar sobre la marcha. De tener una escaleta prevista, el equipo de La Voz tuvo que adaptarse a las nuevas circunstancias tras el abandono de Ruim¨¢n, que no dud¨® en exprimir, esperando hasta alrededor de las 2.00 de la madrugada para revelar que el cantante, que hizo su anuncio antes de las 23.00, finalmente no continuar¨ªa participando a pesar de haber sido salvado por un 41,6% de los votos del p¨²blico.

Que esa espera les ayud¨® a cosechar el favorable dato de audiencia del 33% de la cuota de pantalla (4,8 millones de espectadores de media), parece una deducci¨®n l¨®gica. El registro del minuto de oro de la jornada, que lleg¨® a las 22.59 horas, tras la intervenci¨®n de Ruim¨¢n, (con 6.365.000 telespectadores y el 30,1% del share), tambi¨¦n indica que, cuando se corre la voz sobre una cuesti¨®n controvertida, ya sea a trav¨¦s de las redes sociales o del boca a oreja, la gente enciende el televisor. ¡°Pero esto se suele quedar en el momento del calent¨®n¡±, matiza D¨ªez.

Ruim¨¢n y Melendi, los m¨¢s beneficiados

Lo que no est¨¢ tan claro es si la expectaci¨®n se podr¨¢ mantener para futuras ediciones. ¡°Posiblemente por el morbo de lo que pueda opinar Melendi o Jes¨²s V¨¢zquez, el pr¨®ximo episodio tendr¨¢ aceptaci¨®n¡±, opina Carlos Velarde, de La Parab¨®lica. M¨¢s adelante, el premio se lo llevar¨¢ posiblemente el propio causante de la pol¨¦mica.

Como recuerda Velarde, eso fue lo que le ocurri¨® a Roser, la cantante del talent de 2002 Popstars. Aunque fue seleccionada para pasar a la final, decidi¨® renunciar y cederle el puesto a una compa?era, lo que acab¨® por darle m¨¢s popularidad a ella que a la ganadora. ¡°Al final beneficiar¨¢ m¨¢s a Ruim¨¢n que al propio programa, porque parec¨ªa que ¨¦l no iba a ganar¡±, dice Velarde. Su posible paso por distintos programas, algo habitual en Telecinco, tambi¨¦n servir¨¢ para nutrir la parrilla de la cadena.

Y si alguien m¨¢s queda por obtener rentabilidad, ese es Melendi, el mentor musical de Ruim¨¢n. Tras conocer las intenciones de su apadrinado, ¨¦l se convirti¨® tambi¨¦n moment¨¢neamente en TT, bajo el hashtag #PobreMelendi. ¡°Antes ca¨ªa bastante mal, sobre todo desde su incidente con el avi¨®n [el cantante provoc¨® un altercado en un avi¨®n que tuvo que volver al aeropuerto tras haber despegado]¡±, explica Pr¨¢danos, ¡°Pero ahora una gran mayor¨ªa de los tuits que genera llevan contenido de apoyo¡±.

Como una evoluci¨®n de los reality shows, seg¨²n explica Pr¨¢danos, este tipo de programas de talentos basan gran parte de su atractivo en la historia personal de los participantes. ¡°Importa c¨®mo se sienten, c¨®mo se aprenden la canci¨®n, c¨®mo se relacionan entre ellos¡­¡±, se?ala. ¡°Pero creo que esto no tiene que hacer feo al programa¡±. Si se habla de la vida, como en ella, surgir¨¢n imprevistos. Y las cadenas, como empresas que son, deber¨¢n jugar sus cartas.