Espa?a, pa¨ªs l¨ªder en visitas a Mega

Me quieres, pero ?cu¨¢nto me quieres? La pregunta, sin respuestas en muchas parejas, tiene ya su veredicto (parcial) en el caso de una relaci¨®n algo m¨¢s virtual: la de Espa?a con Mega, la nueva web de archivos y descargas de contenidos de Kim Dotcom. El inform¨¢tico alem¨¢n ¡ªen libertad condicional y acusado de pirater¨ªa inform¨¢tica por el FBI por su anterior creaci¨®n, la ya cerrada Megaupload¡ª escribi¨® el viernes pasado en su cuenta de Twitter: "Espa?a ama Mega y Mega ama Espa?a". Normal, ya que durante tres semanas consecutivas (b¨¢sicamente, desde que existe Mega) es el pa¨ªs que m¨¢s tr¨¢fico ha proporcionado a nivel mundial a la nueva criatura de Dotcom.

Es decir, que se quieren. El cu¨¢nto se puede sacar de los datos que ofrece la consultora ComScore, que cada mes monitoriza el tr¨¢fico en Internet. Del ¨²ltimo balance, publicado hoy y referido a enero de 2013, se descubre que, en realidad, el idilio entre Espa?a y Dotcom no es tan fuerte. 389.000 usuarios ¨²nicos accedieron a Mega desde el territorio espa?ol el primer mes del a?o, lo que queda muy lejos de los millones de personas que visitan algunos de los l¨ªderes de tr¨¢fico como Google o Facebook. De total de internautas de Espa?a, un 1,5% entr¨® en la nueva web de Dotcom. Para hacerse una idea, la audiencia de Mega es m¨¢s comparable con la de una p¨¢gina como Realmadrid.com.

Hay que se?alar, sin embargo, que el sitio web naci¨® la tarde del 19 de enero (el 20 en Nueva Zelanda) y fue pr¨¢cticamente inaccesible durante su primera jornada de vida, de ah¨ª que el c¨¢lculo de ComScore solo tenga en cuenta 12 d¨ªas. Multiplicando la misma media por todos los d¨ªas del mes, y dando por hecho que el efecto novedad del lanzamiento de Mega no se desinflara, se llegar¨ªa a poco m¨¢s de un mill¨®n de usuarios ¨²nicos. Con esa cifra la criatura de Kim Dotcom alcanzar¨ªa el nivel de p¨¢ginas como change.org o meneame.net y se colocar¨ªa por encima de Rapidshare, por poner un ejemplo de una de sus mayores competidoras entre las webs de descargas y archivo de documentos.

En cuanto al perfil de los enamorados, resulta que el usuario medio que accede a Mega desde Espa?a tiene (por ahora) entre 25 y 34 a?os, es hombre, sin hijos y procedente de la clase media. Muchas de las visitas proceden de las llamadas p¨¢ginas de enlaces. Se trata, al fin y al cabo, del mismo proceso que ocurr¨ªa con Megaupload, la anterior creaci¨®n de Dotcom: al subir un archivo, la p¨¢gina ofrec¨ªa un enlace para acceder a ¨¦l. Varias webs de enlaces publicaban esa direcci¨®n y as¨ª millones de usuarios disfrutaban gratuitamente, entre otros archivos, de pel¨ªculas, series y canciones protegidas por el derecho de autor.

El primer mes de la nueva web ha dado m¨¢s problemas por su lentitud inicial que por? denuncias

Por eso, entre otras razones, el FBI cerr¨® Megaupload y acusa a Dotcom y otros seis socios de "megaconspiraci¨®n" y de provocar da?os a la industria cultural por 386 millones de euros. Y por eso, en su nueva creaci¨®n, el alem¨¢n ha introducido una novedad: al guardar un archivo en Mega no solo se recibe un enlace sino tambi¨¦n una contrase?a, ambos imprescindibles para el acceso al documento. "Solo tu tendr¨¢s las claves. Y lo que hagas con ellas es tu responsabilidad", asegur¨® a la revista Wired el propio Dotcom.

Sin embargo, el alem¨¢n ya ha tenido que intervenir hasta ahora en unos 150 casos (de los casi 100 millones de archivos que sostiene que est¨¢ hospedando en Mega), por violaciones del copyright que alguna entidad de gesti¨®n de los derechos de autor ha denunciado a la p¨¢gina y que Kim Dotcom se encarg¨® de retirar. Tambi¨¦n hizo bloquear un portal aut¨®nomo, nacido pocos d¨ªas despu¨¦s del lanzamiento de Mega, que permit¨ªa buscar pel¨ªculas, canciones y dem¨¢s documentos subidos en el gran archivo digital ideado por ¨¦l.

El primer mes de Mega ha tenido m¨¢s problemas por su lentitud inicial que por denuncias de autores y creadores. Aun as¨ª, la p¨¢gina, y el hecho de que Espa?a lidera el tr¨¢fico hacia ella, no deben de hacerle especial ilusi¨®n a la IIPA (Alianza Internacional por la propiedad intelectual). Este conglomerado de creadores, dotado de gran influencia en su pa¨ªs, justamente acaba de pedir al Gobierno de Estados Unidos que Espa?a vuelva a la lista negra de la pirater¨ªa, la llamada lista 301, de la que por fin logr¨® salir el a?o pasado. Esto s¨ª que no suena a idilio.