Los carteristas provocan una huelga de empleados en el Louvre
Unos 200 trabajadores dicen que no dan abasto para vigilar el museo, que hoy vuelve a abrir La direcci¨®n "apoya" a los vigilantes y recuerda que ya avis¨® a las autoridades del problema
El Museo del Louvre tuvo que cerrar sus puertas este mi¨¦rcoles a causa de un paro de los guardias de seguridad, que protestan contra la presencia de "carteristas, cada vez m¨¢s numerosa y agresiva" tanto dentro como en los alrededores del museo. Los vigilantes que cuidan la pinacoteca m¨¢s grande y visitada del mundo, cerca de un millar, afirman que se ven desbordados por los rateros y que a veces ellos mismos son sus v¨ªctimas. Seg¨²n los sindicatos, docenas de turistas y visitantes han sido desvalijados en el Louvre en los ¨²ltimos meses, y la situaci¨®n est¨¢ fuera de control.
"Importante. Por circunstancias excepcionales, el museo est¨¢ actualmente cerrado. Pedimos disculpas a nuestros visitantes, y les mantendremos informado de la hora de reapertura". Con ese mensaje recibe la web del Museo de Louvre a quien teclee su direcci¨®n en Internet.?La direcci¨®n ha se?alado en una nota que muestra "su apoyo total" a los vigilantes.
La direcci¨®n del museo explica que ya present¨® una denuncia ante la Fiscal¨ªa de Par¨ªs en diciembre de 2012 por los frecuentes robos, y a?ade que pidi¨® refuerzos policiales para mejorar la seguridad. Un portavoz del Louvre ha explicado que la justicia y la polic¨ªa "se han movilizado y han mantenido reuniones de trabajo para aumentar la presencia policial". Esto no evit¨® que ayer unos 200 vigilantes ejercieran su derecho a la huelga, lo que oblig¨® a cerrar las puertas del museo durante un d¨ªa. Hoy el Louvre ha vuelto a abrir con una veintena de polic¨ªas de refuerzo, informa la agencia Europa Press.
Seg¨²n la agencia France Presse, un centenar de guardias se concentr¨® ante el Ministerio de Cultura para pedir una soluci¨®n al problema tras una reuni¨®n de la plataforma intersindical con la direcci¨®n. El colectivo sindical inform¨® de que la ministra de Cultura,?Aur¨¦lie Filippetti, se ha comprometido a estudiar este asunto con sus hom¨®logos de Interior y Justicia con el fin de reforzar la seguridad en los accesos al Louvre.
En muchos casos se trata de menores que quedan r¨¢pidamente en libertad
Christelle Guyader, representante de uno de los sindicatos, ha resumido as¨ª la situaci¨®n: "Los guardias est¨¢n hartos. Vienen con el miedo en la tripa al trabajo porque se enfrentan a bandas organizadas de carteristas que son cada vez m¨¢s violentos. Algunos son menores y entran gratis al museo, pero, aunque la polic¨ªa los detenga, vuelven al cabo de unos d¨ªas". Uno de sus colegas ha referido el caso de una sala que tuvo que ser evacuada un domingo por los estragos causados por una pareja de rateros.
Los carteristas est¨¢n "cerca de las entradas, a la salida del metro Palais Royal- Museo del Louvre, y en el propio museo, est¨¢n en todas partes y ni siquiera se esconden", ha explicado un empleado al diario Metro. Entre los miles de visitantes afectados est¨¢ una profesora austriaca de franc¨¦s, Monika Kreuzig, que de visita en la capital francesa ha visto c¨®mo tras hacer cola "durante una hora ha sido en vano" por el cierre del museo.
Varios agentes de seguridad afirman que han recibido "escupitajos, golpes, insultos y amenazas" de los rufianes, y explican que, aunque han presentado numerosas quejas y denuncias a la polic¨ªa, "no han dado resultados". La direcci¨®n ha precisado que ya ha trasladado a la fiscal¨ªa 150 denuncias de particulares y que ha prohibido la entrada a los sospechosos que ha podido identificar. Las medidas, en todo caso, no parecen haber funcionado, pese a que, de los mil vigilantes que tiene el museo, 470 circulan como media a diario por las instalaciones.
Babelia
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