El descubrimiento de una periodista

La periodista, y ahora tambi¨¦n escritora, Natalia Sanmartin Fenollera (A Estrada, Pontevedra, 1970)?ha irrumpido con fuerza en el mercado literario con su primera novela El despertar de la se?orita Prim (Planeta). Y se puede decir, que lo ha hecho por la puerta grande. Antes de su publicaci¨®n a comienzos de abril, Sanmartin capt¨® ya el inter¨¦s de algunas de las m¨¢s prestigiosas editoriales de Italia (Mondadori), Reino Unido (Little Brown), Estados Unidos (Atria Books - Simon & Shuster), Francia (Grasset) y Alemania (Thiele Verlag), entre otras. Todas ellas se hicieron con los derechos de la novela en la pasada Feria de Fr¨¢ncfort. As¨ª, la novela ha sido traducida a seis idiomas y distribuida en 70 pa¨ªses. "Ya con que se publicase en Espa?a hubiese sido una satisfacci¨®n muy grande. Todo esto me ha pillado por sorpresa y a¨²n lo estoy digiriendo", comenta incr¨¦dula su autora, periodista y responsable de la secci¨®n de Opini¨®n en el diario econ¨®mico Cinco D¨ªas.

La novela arranca con la llegada de la altamente formada Prudencia Prim a San Ireneo de Arnois, un pueblo que se refugia de la vida e influencias de la modernidad. Contratada por el misterioso "hombre del sill¨®n", la protagonista descubre poco a poco la peculiar forma de vida de la peque?a localidad. En su primera edici¨®n, el libro cuenta con una tirada de 10.000 ejemplares -cuando lo habitual se encuentra en torno a las 2.000 copias-, que ya se ha agotado, seg¨²n Planeta.

Algo t¨ªmida y nerviosa, Sanmartin demuestra en seguida en un cara a cara su inevitable pasi¨®n por su trabajo de periodista al comenzar la entrevista preguntando. Ya entrados en materia, la jefa de opini¨®n del diario econ¨®mico Cinco D¨ªas confiesa que la idea de escribir el libro surgi¨® tras a?os de lectura y la necesidad de sentarse a escribir una historia en la que se hablase sobre el valor de las cosas sencillas que se han ido perdiendo en el camino hacia lo que algunos llaman progreso y modernidad. "Quer¨ªa poner la atenci¨®n sobre una serie de cosas que hemos ido dejando de lado como el tiempo, que es el gran tesoro que no se puede comprar pero que tiene un valor incalculable. El tiempo para reflexionar, conversar, para estar con amigos, ver crecer a los ni?os...". Este punto de vista queda plasmado en la novela a trav¨¦s de los habitantes de San Ireneo, quienes representan una forma de vida pausada que busca recuperar la sencillez.

Parte del ¨¦xito de El despertar de la se?orita Prim reside en una r¨¢pida lectura en la que los ojos saltan de una palabra a otra a trav¨¦s de ¨¢giles conversaciones y preguntas sobre los personajes y el mundo que rodea al libro. "Creo que puede gustar porque ese pueblecito es un modelo de la vieja tradici¨®n europea, la occidental. El mundo se ha vuelto hostil y necesitamos hacer un ejercicio de reflexi¨®n y ver qu¨¦ hay que recuperar". Asimismo, el rescate de las peque?as cosas de la vida -aut¨¦ntico leitmotiv de esta novela- ti?e sus p¨¢ginas de un optimismo at¨ªpico en estos sombr¨ªos tiempos de crisis, ansiedad y urgencias no siempre justificadas. "Otras se basan en la parte oscura del ser humano, que existe, pero quer¨ªa que se reflejasen cosas simples pero luminosas como la camarader¨ªa o el esp¨ªritu de comunidad", apunta la escritora.?

"Quer¨ªa poner la atenci¨®n sobre cosas que hemos ido dejando de lado como el tiempo, el gran tesoro que no se puede comprar pero que tiene un valor incalculable"

En su peque?o Walden, Sanmartin subraya constantemente la idea de recuperar el tiempo, que a d¨ªa de hoy sacrificamos en forma de descanso, y que nos impide algo tan importante como pensar. "En el ritmo de vida acelerado que llevamos es imposible tener tiempo para preguntarse cosas y, si no lo haces, tampoco buscas respuestas. Ten¨ªa ganas de decir que quiz¨¢s es un momento en el que hay mucha gente de distinta sensibilidad que se queja de que hay algo en nuestro estilo de vida que no funciona", argumenta con preocupaci¨®n, "el trabajo ha invadido la vida privada de forma inconcebible. Tenemos los iPhone, Blackberry y los WhatsApp entran continuamente y ni siquiera estamos sujetos a un horario de trabajo. Cuando algo no funciona hacemos tabla rasa y buscamos soluciones nuevas, cuando a lo mejor resulta que ya existen algunas".

Seguidora de la obra de Jane Austen, Dickens, Tolstoi y Julio Verne, entre otros, la periodista revela que el anonimato del coprotagonista de su libro -el hombre del sill¨®n- es, en realidad, un gui?o a Elizabeth Von Arnim. "Es una escritora que me gusta mucho. En Elizabeth y su jard¨ªn alem¨¢n, que es una delicia, habla de su marido y le denomina el 'hombre airado', nunca dice c¨®mo se llama. Tambi¨¦n es la idea de que la se?orita Prim llega y le pone una etiqueta despectiva", aclara Sanmart¨ªn, licenciada tambi¨¦n en derecho. De la misma manera, dice Sanmart¨ªn, la madre del hombre del sill¨®n carece de nombre para recalcar la imagen de frialdad y distancia propias de una arist¨®crata como ella.

La novela ha tardado dos a?os en ver la luz, ya que la periodista escrib¨ªa entre vacaciones y fines de semana debido a las nueve o m¨¢s horas de trabajo diarias. "He disfrutado mucho escribiendo. No ha sido un esfuerzo, ni voy a decir que era una v¨¢lvula de escape pero s¨ª que me gustaba ir a ese pueblo". Este placer, asegura, forma parte de la libertad y satisfacci¨®n que produce crear un mundo y convertirse en un peque?o dios, en la l¨ªnea del escritor sudafricano J. R. R. Tolkien.??

Presente en la novela en boca de la se?orita Prim y el hombre del sill¨®n, el estado de la literatura femenina es otro tema que preocupa a Sanmart¨ªn. La periodista cree que actualmente existe una fuerte divisi¨®n en los h¨¢bitos de lectura entre hombres y mujeres, ya que hace 100 a?os ser¨ªa menos complicado que un hombre leyera Orgullo y prejuicio. "En una ¨¦poca que canta a la igualdad, la literatura est¨¢ polarizada. Te lo dicen las editoriales. La ficci¨®n la leen sobre todo mujeres y si es con una escritora detr¨¢s lo ves hasta en las portadas. Est¨¢ dirigido a un p¨²blico femenino.

La periodista y ahora escritora Natalia Sanmartin Fenollera afirma no haberse planteado una segunda novela. Pero si la primera sigue a este paso, seguro que el lector vuelve a verla en las librer¨ªas.