El camino al Oscar de ¡®La semilla del fruto sagrado¡¯: censurada en Ir¨¢n y su director sentenciado a ocho a?os de prisi¨®n

Era principios de mayo de 2024. En v¨ªsperas de la presentaci¨®n de su nueva pel¨ªcula a concurso en el Festival de Cannes, en Francia, Mohammad Rasoulof recibi¨® la noticia de que hab¨ªa sido sentenciado, en su natal Ir¨¢n, a ocho a?os de prisi¨®n, a recibir latigazos y a la confiscaci¨®n de sus propiedades por el delito de ¡°colusi¨®n con la intenci¨®n de cometer cr¨ªmenes contra la seguridad del pa¨ªs¡±. Su crimen, seg¨²n la justicia de la Rep¨²blica isl¨¢mica, fue retratar, en La semilla del fruto sagrado, las protestas en Teher¨¢n, en 2022, a ra¨ªz del caso de Mahsa Amini, una joven de 22 a?os, que por llevar de forma ¡°inapropiada¡± el hiyab fue detenida en una comisar¨ªa, de la cual saldr¨ªa tres d¨ªas despu¨¦s con muerte cerebral tras sufrir una paliza por parte de la polic¨ªa, seg¨²n dio a conocer la Misi¨®n de Investigaci¨®n Independiente de la ONU sobre Ir¨¢n.

El filme, rodado en secreto y con su director supervisando la producci¨®n bajo arresto domiciliario ¡ªfue condenado en 2022 por criticar la represi¨®n de unas protestas desatadas por el derrumbe de un edificio que caus¨® decenas de muertos¡ª, ha sido nominado en la categor¨ªa de mejor pel¨ªcula de habla no inglesa en los premios Oscar, que se celebran el pr¨®ximo 2 de marzo. El director representar¨¢ a Alemania, donde permanece en el exilio tras abandonar su pa¨ªs el pasado a?o. Sus competidoras son Emilia P¨¦rez (Francia), Flow (Letonia), A¨²n estoy aqu¨ª (Brasil) y La chica de la aguja (Dinamarca).

En La semilla del fruto sagrado, Rasoulof Rasoulof hace un recorrido del drama al thriller para introducir al espectador en la fractura de una familia ante la toma de conciencia de sus dos hijas. El padre, un juez del r¨¦gimen, es una pieza m¨¢s de un sistema teol¨®gico patriarcal que no est¨¢ dispuesto a cambiar. Sin embargo, en su casa su esposa conoce la ola de protestas que siguieron a la muerte de Mahsa Amini a trav¨¦s de la televisi¨®n oficial mientras sus dos hijas lo hacen por las redes sociales. En un hogar aparentemente tranquilo y feliz, pero lleno de silencios, el director apela al uso de archivos reales de lo ocurrido hace casi tres a?os para cuestionar una sociedad sacudida por la violencia contra las mujeres.

En la pel¨ªcula la c¨¢mara juega un rol complejo, tanto como un arma del r¨¦gimen al momento de grabar las confesiones forzadas, as¨ª como un recurso de las manifestaciones que busca dar testigo de la violencia estatal durante las protestas. Rasoulouf, quien ya fue juzgado y estuvo preso en dos ocasiones previas, era consciente de las formas de operar del r¨¦gimen de los ayatolas.

¡°Esta doble utilizaci¨®n me pareci¨® interesante. Yo mismo durante todos esos a?os de juicios, de interrogatorios y en prisi¨®n hab¨ªa visto c¨®mo se utilizaba la c¨¢mara tambi¨¦n para humillar a los presos, para romper la dignidad humana y a pesar de eso, estas personas segu¨ªan resistiendo y diciendo ¡®no¡¯ frente a la c¨¢mara. Todo esto me parec¨ªa una cuesti¨®n y dimensi¨®n interesante para incorporar a la pel¨ªcula¡±, explica Rasoulof con ayuda de una int¨¦rprete a trav¨¦s de una videollamada.

El filme, disponible en cartelera en territorio norteamericano (Estados Unidos, Canad¨¢ y M¨¦xico), tambi¨¦n aborda una problem¨¢tica que no solo aplica a Ir¨¢n: c¨®mo el control y la tiran¨ªa se enmascara de un sentimiento como el amor, ya sea a la soberan¨ªa, al progreso, a la patria o al pa¨ªs, para que aut¨®cratas o dictadores y su deseo de control pasen desapercibidos como una preocupaci¨®n genuina supuestamente reflejada en las preocupaciones del bienestar ciudadano.

¡°Un aspecto muy decisivo en la realidad de las tiran¨ªas y de las dictaduras es este adoctrinamiento de los miembros de estos sistemas. Hay una dimensi¨®n sagrada que se impone y que justifica la represi¨®n y el control, que hace que sea imposible de criticar. Que las personas, como el personaje de la madre en la pel¨ªcula, pongan esta dimensi¨®n afectiva, religiosa y sagrada en nombre del amor, la estabilidad familiar y preservar su propia estabilidad econ¨®mica y social, es lo que asegura la supervivencia de este sistema¡±, agrega.

La nominaci¨®n de la pel¨ªcula a los Oscar, que tuvo previamente su paso por importantes festivales como el de Cannes, donde recibi¨® una menci¨®n del jurado, fue recibida con ¡°mucha felicidad¡± por el director, ya que representa poder amplificar la voz de lo que buscan transmitir sobre la situaci¨®n en Ir¨¢n y reconocer el trabajo de todo el equipo que particip¨® de la cinta, que se arriesg¨® al formar parte de este proyecto para defender sus derechos humanos y art¨ªsticos.

El director, seg¨²n le cont¨® a Variety en una entrevista, respalda a los miembros de su elenco y equipo que han sido acusados ??de ¡°difundir inmoralidad y propaganda¡± contra el r¨¦gimen iran¨ª. Asimismo, afirm¨® que el Gobierno est¨¢ ¡°esperando a anunciar el veredicto despu¨¦s de los Oscar¡±.

El cineasta iran¨ª es actualmente uno de los m¨¢s importantes de su pa¨ªs. En 2020 gan¨® el Oso de Oro con La vida de los dem¨¢s y en 2017 su filme A Man of Integrity fue escogido como mejor pel¨ªcula en la secci¨®n ¡°Una cierta mirada¡±. Si bien su cine cr¨ªtico con el r¨¦gimen de los ayatolas era menos directo en sus inicios, en La semilla del fruto sagrado va de lleno hacia la confrontaci¨®n pol¨ªtica directa.

¡°Cuando empec¨¦ era como un reflejo de autoprotecci¨®n. Me di cuenta de que hab¨ªa una contradicci¨®n, porque en t¨¦rminos de contexto, estaba denunciando aspectos de la vida social pol¨ªtica de mi pa¨ªs. Yo no asum¨ªa la responsabilidad de lo que estaba denunciando y esta contradicci¨®n es algo que no me gustaba y que no pod¨ªa seguir adoptando como lenguaje cinematogr¨¢fico. Decid¨ª que la met¨¢fora que ven¨ªa del miedo, porque tambi¨¦n puede ser una elecci¨®n est¨¦tica, era algo que iba a evitar. Iba a contar mis historias de modo mucho m¨¢s directo y sin concesiones¡±, finaliza.