La Feria del Libro de Madrid frena la ca¨ªda de sus ventas y sube un 9,3%

Una brizna de aire en medio del calor des¨¦rtico que asola el ecosistema del libro en Espa?a. Esa es la ¨²ltima p¨¢gina de la 72? Feria del Libro de Madrid.

¡°?Y ahora? ?Qu¨¦ pasar¨¢ a partir de hoy?¡±. Esas son las preguntas que rondan a la mayor¨ªa de libreros, editores y distribuidores espa?oles, a pesar de que la Feria ha logrado frenar la ca¨ªda en sus ventas desde 2008, que hab¨ªa llegado al 43%. El aumento es del 9,3%, que representa unos ingresos de 7,1 millones de euros. Mientras para varias editoriales, como Galaxia Gutenberg, el crecimiento ha sido entre un 10% y un 20%; para muchos de los 457 expositores la Feria solo ha igualado las cifras del a?o pasado; a la vez que para otros, como Vicente Higuera Frutos, de la librer¨ªa Santander, ¡°ha sido peor¡± que 2012. En esa gradaci¨®n de resultados, la sensaci¨®n general es que, adem¨¢s de las ventas de obras muy literarias, los autores medi¨¢ticos han ayudado a cuadrar las cuentas.

La cita literaria del Parque del Retiro se ha convertido en un oasis para el mundo del libro cuyo comportamiento general registra un 20% de p¨¦rdidas en lo que va de a?o. Los motivos de esta t¨ªmida alegr¨ªa ofrecida en la Feria, seg¨²n algunos de los participantes, puede tener varias lecturas:

A- El gran arranque de la cita el 31 de mayo con las n¨®minas frescas y los primeros rayos de sol en sus d¨ªas inaugurales,

B- El aumento de autores firmando, que en los 17 d¨ªas llegaron a las 3.600 firmas anunciadas, un 15% m¨¢s que en 2012, y¡­

C- La apuesta de muchas casetas por traer a autores muy medi¨¢ticos, de todo tipo, cuyas ventas elevaron la media y salvaron las cuentas de los expositores.

Pero esta ¨²ltima estrategia-salvavidas tiene un inconveniente para varios expositores que apuestan m¨¢s por la literatura de calidad, debido al torbellino de gente que crea un autor medi¨¢tico, ¡°y deja hecha polvo¡± a las casetas de al lado, al quitarles visibilidad a potenciales compradores.

Un enmascaramiento de la realidad que suscita las preguntas ¡°?y ahora? ?qu¨¦ pasar¨¢ a partir de hoy sin toda esta escenificaci¨®n?¡±. ¡°Estamos contentos con el resultado¡±, asegura Teodoro Sacrist¨¢n, director de la Feria; pero en seguida expresa que aunque la feria ha sido un bal¨®n de ox¨ªgeno le ¡°preocupa que el sector vuelve a vender sin la feria detr¨¢s¡±.

Una de las ventajas de la cita madrile?a es que ha servido como escenario de revelaci¨®n de escritores distintos a los previsibles como Dolores Redondo con El guardi¨¢n invisible (Destino), Juan Carlos D¨ªez con Hay vida despu¨¦s de la crisis (Plaza & Jan¨¦s), Manel Loureiro con El ¨²ltimo pasajero (Planeta). Incluso ha recuperado obras importantes de autores contempor¨¢neos como Rafael Chirbes con Crematorio (Anagrama), cuya novedad este a?o es En la orilla. En cuanto a cl¨¢sicos han tenido una segunda oportunidad Luigi Pirandello con Cuadernos de Serafino Gubbio operador (Gadir), Joao Guimaraes Rosa con Gran Sert¨®n: Veredas (Adriana Hidalgo); Iris Murdoch con Henry y Cato (Impedimenta), G. Stuparich y La isla (Min¨²scula) o James G. Frazer con La rama dorada (Fondo de Cultura Econ¨®mica). Adem¨¢s, editoriales muy literarias

Un soplo de aire en medio de la prolongada tormenta del desierto comercial que afronta el sector, pero que no hace olvidar a las diferentes partes de la cadena de valor del libro su horizonte lleno de incertidumbres por la situaci¨®n econ¨®mica, la caducidad de un modelo de negocio centenario y la reinvenci¨®n del propio sector. Un fin de fiesta al que se ajusta, por contraste de sensaciones, el comienzo de Ana Karenina, de Tolst¨®i: ¡°Todas las familias felices se parecen; las desdichadas lo son cada una a su manera¡±.