El mundo ins¨®lito de la TDT

Especialistas en trasladar caba?as enteras sin desmontar, fabricantes de acuarios colosales, tatuadores profesionales o restauradores de objetos imposibles. Cualquier oficio que busque est¨¢ en la TDT. Los canales min¨²sculos de la televisi¨®n digital terrestre se nutren de programas que muestran trabajos de lo m¨¢s ex¨®tico. Emiten series enteras dedicadas a subastas de trasteros, tuneado de coches, tartas de bodas, vestidos de novia o la pesca de especies singulares en las peligrosas aguas del mar Carolina.

Son formatos que mezclan realidad y ficci¨®n, una especie de docurrealitys (documentales dramatizados) sobre actividades estrafalarias e ins¨®litas para el p¨²blico espa?ol. Quiz¨¢ por eso este nuevo g¨¦nero ¡ªlo que se ha dado en llamar la televisi¨®n factual¡ª engancha a la audiencia. Canales enteros de la TDT, como Discovery Max, Xplora y Energy se alimentan de productos importados de EE UU y, en menor medida, de Canad¨¢. Los guionistas tratan de ponerle la misma intriga y emoci¨®n a las subastas de maletas que a la caza de una serpiente. El prototipo de presentador de estos formatos es un hombre corpulento, con aspecto macarra, preferentemente calvo, con perilla y visibles tatuajes.

En Discovery Max, casi 100.000 personas siguen Cazasubastas. Las c¨¢maras acompa?an a una pareja de especialistas en armas hist¨®ricas y monedas antiguas que buscan tesoros en las ventas p¨²blicas de guardamuebles (se calcula que en EE UU hay m¨¢s de 10.000 almacenes abandonados). Pujan casi a ciegas. Tienen apenas unos segundos para escrutar el contenido de un trastero antes de que comience la licitaci¨®n. A veces pagan cientos de d¨®lares por aut¨¦ntica basura. Otras encuentran objetos ex¨®ticos (una silla de afeitar del siglo XIX, una moto con sidecar rusa de la ¨¦poca de la guerra fr¨ªa, un ba¨²l antiguo, sables de la Guerra de Secesi¨®n, m¨¢quinas cortac¨¦sped de carreras, una percha para capturar cocodrilos), aunque tambi¨¦n se han topado con sillas baratas, viejas aletas de nataci¨®n o espantosos art¨ªculos de vud¨². Despu¨¦s de restaurar los objetos los venden y, a veces el negocio les sale redondo.

Otros cazagangas acuden a Subasta de casas. Pujan por viviendas, las rehabilitan y las revenden. Todo bien envuelto por los guionistas para darle un punto de agitaci¨®n, intriga y enfatizando el lado dram¨¢tico. Tu casa a juicio, de factura canadiense (Divinity) redecora los hogares seg¨²n el gusto de la dise?adora Hilary Farr. Al ver el resultado, los propietarios deciden a menudo cambiar de vivienda. Y para los que quieren traslar su inmueble enterito, sin desencajar las ventanas ni desmontar el tejado, un equipo de ingenieros se pone al frente de Mudanzas imposibles. Porteadores profesionales son capaces de mover una caba?a de madera a trav¨¦s de un lago congelado o una estaci¨®n de ferrocarril de 100 toneladas. Y todo ello aderezado con una exagerada dosis de emotividad. Tanta que a menudo adquiere un tono pat¨¦tico.

Embargo por sorpresa (Energy) intenta darle un aire sobrecogedor a las historias que relata. Est¨¢ producido por Give Rauce (El encantador de perros) y reconstruye casos de inspirados en hechos reales de la mano de dos forzudos que rastrean en Valle de San Francisco (California) buscando todo tipo de veh¨ªculos (motos, coches, limusinas, globos aerost¨¢ticos). Se autodenominan ¡°agente de embargo¡± y su lema es: ¡°No seas caradura y paga las facturas¡±. Al volante de grandes gr¨²as se plantan en los domicilios de los morosos para llevarse los veh¨ªculos ante la ira de sus propietarios. Por eso llevan siempre a mano un espray de pimienta. Emitido en horario estelar, esta semana ha rozado los 200.000 espectadores (1,3% de cuota).

La falta de recursos est¨¢ tambi¨¦n detr¨¢s de los protagonistas de Empe?os a lo bestia (Xplora, 260.000 espectadores), que tiene su centro de operaciones en Detroit, donde se alza una de las casas de empe?os m¨¢s grandes del mundo, una tienda de 4.500 metros cuadrados. All¨ª una mujer deja en prenda su port¨¢til porque su novio la ha dejado y un joven quiere vender por 1.500 d¨®lares un disco de Elvis firmado (con certificado de autenticidad y todo). Con desd¨¦n, el due?o de la casa de empe?os (que luce enormes cadenas colgadas del cuello) intenta enga?ar al chico ofreci¨¦ndole una miseria.

Dinero es lo que no les falta a los que acuden a Wayde y Brett, los dise?adores de Acuarios XXL. Estos especialistas no se detienen en las cl¨¢sicas peceras dom¨¦sticas sino que realizan acuarios colosales. Para iglesias, bancos o empresas. El grupo de rock KISS les encarg¨® uno cuya estructura simulaba un escenario con adornos que aparentaban altavoces. Result¨® ser realmente hortera.