¡®Menos Luc¨ªa y m¨¢s sexo¡¯

?ltimas noticias desde Formentera: un yate se carg¨® el martes el cable submarino de las l¨ªneas de ADSL y 3G dejando a la isla 24 horas sin Internet (la cara que se les qued¨® a los que van por ah¨ª con sus iPads y chancletas), y ayer encontr¨¦ un cormor¨¢n muerto. Una pena lo del p¨¢jaro. El otro d¨ªa vi uno que buceaba junto a unas ba?istas desnudas en Migjorn: a lo mejor es el mismo y falleci¨® de la impresi¨®n. Descubr¨ª el cuerpo de buena ma?ana ¡ªregresado de rescatar a mis hijas de los fastos de la noche¡ª entre las dunas cerca de Es C¨°dol Foradat. Estaba bastante bien ¡ªpara estar muerto¡ª, como momificado. Parec¨ªa nadar en la arena. Le di la vuelta para arrancarle unas plumas y de su interior sali¨® una lagartija.

Tuve otro encuentro la misma ma?ana casi tan perturbador: un extra?o individuo recorr¨ªa la playa a¨²n vac¨ªa con un aparatoso detector de metales componiendo la inesperada imagen de un zapador en El Alamein. Estuve un rato mir¨¢ndolo como Hamlet a los enterradores. Me march¨¦ a ver unos chorlitejos que volaban como confeti y ¨¦l sigui¨® tom¨¢ndole el pulso a la arena en busca de tesoros. Aunque no hay tesoro como el verano. En verano la vida se renueva en la epidermis bajo el sol con un ansia de bronceador y de caricias, y los sue?os parecen posibles.

Formentera est¨¢ bien, gracias. Parece haber menos italianos, con el negativo corolario de que tambi¨¦n hay menos italianas. En San Francesc tropec¨¦ con Jordi Pujol Ferrusola enfrascado en dar instrucciones de partido por el m¨®vil; me preocup¨® que visti¨¦ramos las mismas bermudas, aunque en el bolsillo ¨¦l seguramente no lleva plumas de cormor¨¢n.

Las cigarras ensordecen la tarde bajo un cielo azul que siente envidia del mar. Yo tambi¨¦n siento envidia, de Evelio P. que despu¨¦s de 20 a?os de venir a la isla ha decidido aprender submarinismo. Tendr¨ªan que estar prohibidas esas acciones desconsideradas que nos dejan en evidencia a los dem¨¢s.

¡°Menos Luc¨ªa y m¨¢s sexo¡±. Vi la pintada en una caseta en la entrada hacia el Sol y Luna. ?Qu¨¦ voy a a?adir? No podemos m¨¢s que estar de acuerdo. La pel¨ªcula de Medem ha dejado su impronta en la identidad de la isla como lo han hecho los jipis y el Tonigh, tonight. Pero hay que mirar hacia adelante. Aunque no demasiado, que se nos acaba el verano¡­