?Una conspiraci¨®n!, gritaba Cospedal

Cospedal se despert¨®. Y habl¨®. M¨¢s o menos.

¡ª???A?kt5?exj?ogn7f?sab?mli?oy3?nn?dsu?fx?xc!!!

¡ªDolores, por favor, que hay j¨®venes¡­

¡ª???A?kt5?exj?ogn7f?sab?mli?oy3?nn?dsu?fx?xc!!!

Hubo que esperar un rato a que se tranquilizara, que arriba ¨ªbamos oyendo los alaridos de unos y otros seg¨²n se iban incorporando.

¡ªEsto es cosa interna. Nos hemos equivocado. Ni polic¨ªas, ni agentes secretos, ni exorcistas, ni nada de nada¡­ Esto es una conjura interna, que quieren acabar conmigo¡­

¡ªPero Dolores¡­

¡ªT¨² calla, Floriano, que te veo una mirada aviesa¡­

¡ªPor Dios, Dolores. C¨®mo dices eso¡­

¡ªY t¨², Pons, chit¨®n, que mucha camisita blanca pero esa sonrisa no me gusta nada, que delante de m¨ª muy buena cara. Pero luego vete a saber¡­ Hala, todos a su despacho¡­

¡ªVer¨¢s, Dolores, campeona, es que en el m¨ªo¡­ ¡ªiba a intervenir Arenas para contar que ten¨ªa todos los muebles de la secretaria general, incluso la foto de ¡°A mi churri¡­¡±.

¡ªEso, t¨² ll¨¦vame la contraria, si ya digo yo que est¨¢is conspirando todos contra m¨ª, que os reconcome la envidia, y no acept¨¢is que una mujer os haya adelantado en el escalaf¨®n, y¡­

¡ªNo, ver¨¢s, Lolita ¡ªintervino Aguirre¡­

¡ª?Que no me llames Lolita!

¡ª¡­ Pues como te dec¨ªa, Lolita, Javier quer¨ªa decirte que su despacho lo tienes t¨² y que ¨¦l tiene el tuyo. As¨ª que acl¨¢rale d¨®nde se mete, si en el tuyo con sus muebles o en el suyo con tus muebles¡­ Una bonita foto la de Ignacio, por cierto, qu¨¦ buen mozo tu marido, oye¡­

Hubo, pues, que organizar a marchas forzadas el traslado de todos los despachos, que mi cu?ado, el pobre, ech¨® mano de los chicos de Nuevas Generaciones, que esto de trabajar se les daba regular, y los picos que yo hab¨ªa dejado sanos ya se encargaron ellos de destrozarlos¡­

¡ªCuidado con ir para atr¨¢s, hijo, que eso es una viga, hombre¡­ ???El espejo no, el espejo no!!!

¡ª???Crashhhhhhhhhhhhh!!!

¡ª?Qui¨¦n ha tra¨ªdo a Carromero? ¡ªgrit¨® Arenas, que tambi¨¦n estaba un poco nervioso, que desde aquel d¨ªa con Acebes procuraba venir poco por G¨¦nova¡­

Aquello era una gozada, la verdad, que la bruja ya empezaba a pensar que alguien estaba movi¨¦ndole la silla. Era la mejor de las opciones, que ese era el plan acordado con el corp¨®reo¡­

¡ª¡­ Oye, Luis¡­

Es que es mencionarle y no falla¡­

¡ª¡­ Que sepas que ya estoy organizando las carpetas. Las estoy haciendo de colores, azul, rojo, amarillo, que le va a gustar a Ruz, que es de ordenado como una hormiguita¡­

¡ªPues aqu¨ª est¨¢ todo en marcha, Luis. Cospedal ya¡­

¡ª?Qu¨¦ le pasa a la bruja? Cuenta, Luis, cuenta¡­ ?Alguna enfermedad? ?Una ca¨ªda? ?Un accidente de coche? ?Un meteorito en la cabeza?

¡ªNo, pero ya est¨¢ m¨¢s que mosqueada y duda de la lealtad de todos los que tiene cerca¡­ Arenas, Esperanza, Pons, Floriano¡­

¡ª¡­ ?Qu¨¦ buena noticia, Luis! Te dejo y sigo con lo m¨ªo, que estoy poniendo los r¨®tulos de las carpetas en redondilla¡­

Cospedal dud¨® si dec¨ªrselo a Rajoy, pero opt¨® por dejarlo pasar, que bastante ten¨ªa el presidente con sus cosas. Que si las donaciones, que si los sobresueldos¡­ ?Ando yo como ando con lo de las basuras, y soy casi nueva en la direcci¨®n del partido, imag¨ªnense c¨®mo estar¨¢ Mariano que lleva veinte a?os despachando con el extesorero¡­!, se dec¨ªa.

As¨ª que se encerr¨® en el despacho a pensar una estrategia. Se le ocurri¨® que pod¨ªa cargarse a todos y traerse a los consejeros de Castilla-La Mancha, que esos s¨ª que me quieren, que los he nombrado yo y puedo dejarles sin cargo en cualquier momento¡­

Cinco pisos m¨¢s abajo, en el despacho que tiene Esperanza Aguirre como presidenta del PP de Madrid, tambi¨¦n se dise?aban planes y se hac¨ªan alianzas¡­

¡ª¡­ Mira, Floriano, lo has hecho muy bien durante estos meses, que hay que ver qu¨¦ diferencia de c¨®mo explicabas t¨² las cosas de ese B¨¢rcenas ¡ª?qu¨¦ bueno lo de la alianza con Rubalcaba, oye!¡ª con el l¨ªo que se hizo Lolita, oye, que si diferido por aqu¨ª, diferido por all¨¢¡­

¡ªEs lo que yo digo, intervino Pons, que aunque yo quiero mucho a la secretaria general, no faltar¨ªa m¨¢s, no dejo de reconocer que a veces no ha sido la mejor portavoz posible¡­ que yo mismo, sin ir m¨¢s lejos¡­

Arenas estaba en su despacho, ya recuperados los muebles. Hablaba por tel¨¦fono. Bajito. Para que no le oyera nadie, que nunca se sabe.

¡ªOye, Paco, tienes que echarme una mano, que ha llegado el momento de tener que volver a poner sentido com¨²n en esta casa, que se nos va de las manos, si quieres hablo yo con Mariano para que olvide lo de Asturias, que tambi¨¦n t¨² en buena nos metiste, que siempre has sido un cabezota¡­ ?Y Josemari? ?T¨² crees que Josemari?

Cospedal le daba vueltas. ?Y si echaba mano de Mart¨ªnez Pujalte?

¡ª¡­ Aqu¨ª me tienes para lo que quieras, presidenta, que podemos montar arriba, en la azotea, unos ganchos, y all¨ª les colgamos de los pies, para que todos los que pasen por G¨¦nova vean c¨®mo esos perros sarnosos lloran por sus indignidades¡­

Cospedal se imagin¨® que pod¨ªa ser eso lo que dijera Pujalte. Desisti¨®.

¡ªHay que pensar algo distinto, se dijo¡­