Una pasarela que necesita reformularse
La Mercedes-Benz Fashion Week abre su calendario entre las dudas sobre su modelo La cita coincide con la de Londres
La principal cita de la moda espa?ola, Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (MBFWM), se ha inaugurado hoy en el recinto de Feria de Madrid (Ifema). Hasta el 17 de septiembre, se podr¨¢n ver las colecciones para primavera/verano de 2014 de 64 dise?adores, 44 de ellos en desfiles y otros 20 en el espacio de nuevos talentos Samsung Ego. Tras varias temporadas de maniobras para evitar coincidir en fechas con las capitales principales de la industria, esta vez Madrid comparte todas sus jornadas con la semana de la moda de Londres. Un escenario en el que las comparaciones se hacen inevitables.
¡°Estar solapados con Londres nos perjudica y nos hace perder el impacto deseado en el mundo anglosaj¨®n¡±, afirmaba Luis Eduardo Cort¨¦s, presidente del comit¨¦ ejecutivo de Ifema, en 2011. Una forma demasiado optimista de expresarlo. La realidad es que las de Espa?a se suman al pelot¨®n de pasarelas locales (de Colombia a India y de Brasil a Dinamarca) que sue?an con tener alg¨²n peso global y que aspiran a utilizar la moda como carta de presentaci¨®n geopol¨ªtica. Las comparaciones, sin embargo, tambi¨¦n deber¨ªan servir para aprender. Londres era hace diez a?os una pasarela denostada como espacio de negocio y considerada un mero vivero creativo del que se nutr¨ªan Nueva York, Par¨ªs y Mil¨¢n. Hoy, en cambio, planta cara al poder industrial milan¨¦s y recoge pedidos por valor de 120 millones de euros solo durante los cinco d¨ªas de pasarela. ?C¨®mo han conseguido los brit¨¢nicos darle la vuelta a la situaci¨®n? Con l¨ªderes que entienden que la moda es una combinaci¨®n de creatividad, comunicaci¨®n e instinto empresarial; con una convocatoria de 120 dise?adores ¡ªingleses y extranjeros¡ª que muestran sus propuestas en paralelo a los desfiles y con una apuesta por el talento emergente que atrae a 5.000 visitantes, la mayor¨ªa profesionales, entre los que figuran periodistas y compradores de m¨¢s de 50 pa¨ªses.
Minutos antes de que Roberto Torretta abriera el certamen de Madrid con una celebraci¨®n de sus 30 a?os en la moda, Natalie Massenet hac¨ªa lo mismo en Londres. Massenet no es dise?adora, sino la fundadora de una de las m¨¢s exitosas tiendas de moda on-line en el mundo, Net-a-porter. Nombrada presidenta del British Fashion Council el a?o pasado, comenz¨® la pasarela londinense con un discurso que defin¨ªa las estrategias para el desarrollo futuro a partir de cinco pilares, con especial ¨¦nfasis en la educaci¨®n a trav¨¦s de becas y tutor¨ªas para nuevos creadores.
Tales ideas suenan a ciencia ficci¨®n en Madrid, donde se sigue apostando por el modelo de la avalancha de visitantes no profesionales (unas 40.000 personas en la ¨²ltima edici¨®n) y de patrocinadores. Las cifras son buenas para el recinto ferial, pero no para crear una industria de la moda s¨®lida que, entre otras cosas, genere empleo y compa?¨ªas econ¨®micamente viables. Porque en Madrid no hay ventas ni pedidos. Y hay colecciones que ni siquiera se producen. Con la alcaldesa Ana Botella presidiendo el desfile de apertura, el asunto ten¨ªa un aire mucho m¨¢s de caf¨¦ con leche y t¨®picos que de operaci¨®n industrial de envergadura. A falta de compradores o prensa internacional, la pasarela madrile?a cuenta con toda clase de actividades promocionales de bancos o coches. Lo m¨¢s curioso es que esta parece ser una plataforma para vender cualquier cosa excepto moda. ¡°El desfile hay que plante¨¢rselo como un medio, no como un fin¡±, asegura Ana Gonz¨¢lez, de Ana Locking. ¡°Yo lo utilizo para tener fotograf¨ªas con buenos modelos que luego me sirvan de presentaci¨®n ante clientes en China o Kuwait¡±. La dise?adora (Toledo, 1970) tiene la mirada puesta en Estados Unidos, pa¨ªs al que dedic¨® su colecci¨®n por tercera temporada consecutiva. Los billetes de d¨®lar se cuelan en sus coloristas prendas para construir una reflexi¨®n sobre la fe y el dinero con la que espera seducir a los californianos. ¡°Me gustar¨ªa vender all¨ª y, con suerte, mudarme. Pero ir solo a desfilar y luego volver a Madrid me parece suicida¡±.
Ante la incapacidad de las pasarelas espa?olas para generar inter¨¦s en el extranjero, los dise?adores buscan v¨ªas de escape. En Nueva York han presentado sus colecciones esta temporada cuatro firmas nacionales (Delpozo, Desigual, Custo y Pedro del Hierro). Hacia Par¨ªs mira Juanjo Oliva (Madrid, 1972), que ayer celebr¨® sus diez a?os en MBFWM con una colecci¨®n que quiere alejarse de los trajes de noche para ¡°ocupar m¨¢s horas del d¨ªa¡±. Las colaboraciones con El Corte Ingl¨¦s y Gioseppo le han acercado al vestir cotidiano y el vaquero o el neopreno se incorporan a su vocabulario. ¡°El consumidor es m¨¢s sensible al precio que nunca¡±, admite Oliva. Qui¨¦n puede discutir que la situaci¨®n en Espa?a no es f¨¢cil. Devota&Lomba present¨® un concurso de acreedores el pasado oto?o y, a falta de acuerdo, la sociedad est¨¢ pendiente de liquidaci¨®n. Modesto Lomba, sin embargo, se muestra confiado en que la firma, que desfila hoy, participar¨¢ tambi¨¦n en la pr¨®xima edici¨®n de MBFWM.
En la moda, las v¨ªas de escape pueden ser reales o figuradas. ¡°Entre tantas noticias poco alentadoras, quer¨ªa ofrecer el sue?o de un verano eterno¡±, explicaba Juan Duyos. El madrile?o dibuj¨® un paisaje exquisito de mujeres impecables e interminables d¨ªas de sol en tonos y materiales acuosos. Un ambiente de luminosa belleza muy diferente al que vivimos y que tambi¨¦n invoca Ailanto con una fluida colecci¨®n inspirada en los paisajes de Roberto Burle Marx e impregnada por el color y la vitalidad de un jard¨ªn brasile?o. Al final, la comparaci¨®n con Londres podr¨ªa no ser odiosa si sirviera para algo. No se trata de aspirar a la liga de las grandes capitales (una ambici¨®n que ya se asume inalcanzable), sino de aprender del ejemplo brit¨¢nico para darle la vuelta a la situaci¨®n y encontrar una forma de refundar el sistema para que sea una realidad comercial y no solo un espejismo que se apodera del Telediario durante cinco d¨ªas. Aunque para eso necesitamos l¨ªderes y no parece que Amancio Ortega vaya a presentarse voluntario.
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