Grietas de seda en la burbuja
Teresa Helbig destaca en una pl¨²mbea segunda jornada de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, sobre la que planea la crisis financiera y creativa
El pabell¨®n de Ifema donde se celebra la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (MBFWM) es una suerte de burbuja de la moda espa?ola. Y, aunque organizadores y dise?adores insisten en que es imposible que explote como lo hicieron la inmobiliaria o la ol¨ªmpica, adolece de unas grietas que no desparecer¨¢n con solo ignorarlas. El presidente de la Asociaci¨®n de Creadores de Moda de Espa?a (ACME), Modesto Lomba, les resta peligrosidad ¡ª¡°no estamos m¨¢s afectados que otros sectores¡±¡ª y se aferra a un optimismo infinito. ¡°Algunos se quedar¨¢n por el camino, pero los que superemos esta crisis saldremos reforzados¡±, explica. Una declaraci¨®n que revela grandes dosis de osad¨ªa o confianza, seg¨²n se vea, ya que Devota & Lomba, la firma que cre¨® hace 25 a?os junto al malogrado arquitecto Jos¨¦ Luis Devota, se encuentra en pleno proceso de liquidaci¨®n. La empresa se declar¨® en concurso voluntario de acreedores en enero, pero el modisto no ha logrado llegar a un acuerdo con sus ex empleados y proveedores. No es el ¨²nico: Victorio & Lucchino, que desfilaron el viernes, y Sita Murt, que lo har¨¢ ma?ana, tambi¨¦n han necesitado de la mediaci¨®n judicial para satisfacer sus deudas, y, mucho antes que ellos, el m¨ªtico Elio Berhanyer. Unos s¨ªntomas que convendr¨ªa no despreciar por el bien de la salud del dise?o nacional. Y tampoco hechos como que TCN y Guillermina Baeza se hayan retirado a la pasarela 080 de Barcelona o que David Delf¨ªn, surgido de la plataforma de creadores noveles EGO y uno de los nombres m¨¢s medi¨¢ticos y relevantes de la MBMFW, haya decidido inhibirse en esta edici¨®n.
Inasequible al desaliento, Lomba espera ahora que un inversor adquiera su marca: ¡°Qu¨¦ triste ser¨ªa que nadie comprara Devota & Lomba despu¨¦s de tantos a?os, trabajo y prestigio, ?no?¡±.
Mientras, contin¨²a desfilando pese a la inversi¨®n que supone producir la colecci¨®n ¡ªque ha facturado con solo dos empleados en n¨®mina¡ª y a los cerca de 4.000 euros que cada dise?ador debe aportar para participar en la antigua Cibeles. ¡°Desde que el juez nos adjudic¨® una administradora concursal es ella la que gestiona la firma y toma las decisiones. Desde el primer momento nos dijo que era imperativo seguir desfilando, que la empresa continuase funcionando. Adem¨¢s, de cara a vender la marca, esta siempre tendr¨¢ m¨¢s valor si continuamos presentando¡±, dice en una ins¨®lita reinterpretaci¨®n de los beneficios promocionales de la semana de la moda madrile?a.
En una jornada carente de emoci¨®n, solo Teresa Helbig consigui¨® insuflar cierta energ¨ªa a la pasarela. La dise?adora catalana logr¨® mantenerse fiel a s¨ª misma y a su clientela sin caer en la redundancia. Un dif¨ªcil equilibrio que materializ¨® en una colecci¨®n ambiciosa en el trabajo artesanal y accesible en la formas. Monos, shorts y por supuesto vestidos ¡ªel best seller de la firma¡ª, como la incre¨ªble pieza compuesta por 200 metros de cinta de crepe de encaje cosida a mano. Inconformista, Helbig trabaja en otra ardua combinaci¨®n: producir pr¨ºt-¨¤-porter desde su taller de sastrer¨ªa a medida compuesto por 14 empleados. ¡°La recesi¨®n no nos ha afectado tanto como a otros porque nunca hemos crecido por encima de nuestras posibilidades. Hoy han venido a vernos unos compradores desde M¨¦xico pero vamos poco a poco, sin arriesgar m¨¢s de lo necesario: somos una empresa familiar y cualquier nuevo reto supone un esfuerzo ¨ªmprobo¡±, explica.
El debate sobre la viabilidad empresarial de las marcas que desfilaron en este segundo d¨ªa de la MBFWM result¨® mucho m¨¢s interesante que su escueto discurso est¨¦tico. Amaya Arzuaga apost¨® una edici¨®n m¨¢s por una estrategia h¨ªbrida: ayer mostr¨® en Madrid su segunda l¨ªnea, AA, y el 30 de septiembre presentar¨¢ la primera en el Instituto Cervantes de Par¨ªs, donde ¡ªasegura¡ª tendr¨¢ acceso a compradores y medios internacionales que no pueden encontrarse en Ifema. ¡°Mi principal mercado sigue siendo Espa?a y, adem¨¢s, creo que es bueno tener un pie en cada ciudad, para no quedarte colgada si un pa¨ªs te da de lado¡±, apunta.
Por quinta vez consecutiva, Miguel Palacio llev¨® a la pasarela su colecci¨®n c¨¢psula para Hoss Intropia. Y aunque este proyecto resulta tan factible comercial como econ¨®micamente, el recuerdo de aquellos a?os en los que mostraba su propio trabajo, con el que obtuvo el premio L¡¯Or¨¦al a la mejor colecci¨®n de Cibeles en 2010, se transforma en nostalgia. Entre la grieta y la cadena textil deben existir alternativas s¨®lidas. Quiz¨¢ el problema est¨¦ en los cimientos.
Babelia
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