Con ustedes... Borges, cantante de tangos
EL PA?S ofrece grabaciones in¨¦ditas de las charlas que dio el escritor en Buenos Aires en 1965 y que Casa del Lector y la Fundaci¨®n Borges editar¨¢n conjuntamente en un audiolibro
Las charlas de Borges sobre el tango han permanecido casi medio siglo en la oscuridad, pero ahora se difundir¨¢n a lo grande. La Casa del Lector y la Fundaci¨®n Jorge Luis Borges coeditar¨¢n un audiolibro con las cinco horas de grabaci¨®n, recogidas en Buenos Aires en 1965. Estas cintas fueron donadas por el escritor Bernardo Atxaga a la Casa del Lector.
Esta ma?ana Mar¨ªa Kodama, viuda de Borges, explic¨® en Madrid que en las cintas se repite la estructura borgiana de El Aleph: ¡°Parte de algo y lo va abriendo y lo lleva a otras cosas. Para Borges, el conocimiento era eso, no era algo r¨ªgido ni enclaustrado¡±. A pesar del dominio que muestra en las conferencias sobre el tango, Borges no acostumbraba a escucharlos en su casa. ¡°Dec¨ªa que era un sordo musical, no se sentaba a escuchar m¨²sica, aunque le gustaban el jazz, el gospel, la m¨²sica medieval y Brahms. De Beethoveen, sin embargo, dec¨ªa que hac¨ªa mucho ruido¡±, cont¨® Kodama a la prensa, poco antes de la audici¨®n de fragmentos de la conferencias.
Por su parte, C¨¦sar Antonio Molina, director de la Casa del Lector, indic¨® que el tango ¡°es una disculpa para hablar del mundo¡±. Borges cita a Walt Whitman, a Homero o a Mark Twain. Deja entrever lo poco que le gusta Gardel. ¡°No lo ataca directamente, es ir¨®nico pero le va dando¡±, se?ala Molina.
El autor de Historia universal de la infamia prefer¨ªa los tangos de la guardia vieja y las milongas. En su opini¨®n, Gardel hab¨ªa degenerado esa m¨²sica. ¡°Dec¨ªa que lo hab¨ªa hecho sentimental y llor¨®n¡±, record¨® Mar¨ªa Kodama.
Ahora los internautas pueden escuchar a Borges e imaginar su personalidad m¨¢s tanguera con estos fragmentos de sus conferencias:
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