Distorsiones fotogr¨¢ficas de Aitor Ortiz

Las obras m¨¢s conocidas del artista Aitor Ortiz (Bilbao 1971) son sus fotograf¨ªas en blanco y negro centradas en detalles de arquitecturas urbanas. Con esos detalles (curvas, rincones, c¨²pulas, paredes) constru¨ªa paisajes urbanos que se percib¨ªan transformados. Los juegos de sombras eran esenciales para la nueva percepci¨®n de lo retratado. En su ¨²ltima exposici¨®n, Ort¨ªz da un paso m¨¢s en su af¨¢n transformador y cubre las obras con sutiles rejillas construidas con hilos. Ahora se trata de jugar entre las propiedades f¨ªsicas de los soportes y el espacio que ocupan en la exposici¨®n. Entre la arquitectura y la tridimensionalidad ha encontrado la luz.

Ort¨ªz muestra sus ¨²ltimas obras, una docena de piezas, en la galer¨ªa madrile?a Max Estrella (Santo Tom¨¦, 6). Titulada Los No¨²menos, t¨¦rmino filos¨®fico que designa objetos en estado puro y surgen de la intimidad m¨¢s profunda, la exposici¨®n plantea un juego con el espectador en el que se trata de descubrir la realidad de lo que tenemos delante de nuestros ojos. Las tomas desenfocadas, las distorsiones ¨®pticas y los inusuales encuadres, hacen que la mirara del espectador no tenga f¨¢cil la identificaci¨®n de lo que ve. La distorsi¨®n y los efectos ?opticos hacen que la obra cambie seg¨²n el lugar desde el que la observamos. El juego es a veces tan radical que el espectador se siente incapaz de fijar la vista en la fotograf¨ªa.

Artista habitual de bienenales y exposiciones internacionales, Aitor Ort¨ªz despliega ahora nuevas capas de misterio sobre sus im¨¢genes arquitect¨®nicas. Un paso adelante en el que intenta que la luz se convierta en poes¨ªa.