Cuando Bowie era el rey del Glam
En 1972, David ten¨ªa el toque del Rey Midas. Para Mott the Hoople, produjo y compuso 'All the young dudes', himno del 'glam'
Todav¨ªa no se ha cerrado la contabilidad del presente a?o pero apuesto que, en su momento, tendremos que felicitar a David Bowie: es seguro que The next day, su ¨¢lbum de 2013, terminar¨¢ en la zona alta de los superventas del a?o y, desde luego, quedar¨¢ como el disco que ha provocado m¨¢s alboroto medi¨¢tico.
Con todo, Bowie ha tenido mejores a?os. Por ejemplo, 1972. Fue el a?o en que David materializ¨® la promesa del mejor glam: la posibilidad de reinventarse, de construirse una identidad. Incluso sexual: en enero de 1972 revel¨®, v¨ªa el Melody Maker, su bisexualidad. Tambi¨¦n fue el a?o de The rise and fall of Ziggy Stardust, una par¨¢bola sobre el superestrellato que estuvo a punto de escenificar ¡ª?hasta el sacrificio final!¡ª durante los setenta.
En 1972, David ten¨ªa el toque del Rey Midas. Para Mott the Hoople, produjo y compuso ¡°All the young dudes¡±, el himno del movimiento glam. Tambi¨¦n materializ¨® Transformer, el disco que sac¨® a Lou Reed del underground neoyorquino. Y prest¨® su sonido y sus canciones a amigas como Dana Gillespie o Lulu, para discos que salieron en 1973. El tema que hizo para Mick Ronson se public¨® en 1974.
- DAVID BOWIE John I'm only dancing
- MOTT THE HOOPLE All the yound dudes
- DAVID BOWIE Velvet goldmine
- DANA GILLESPIE Andy Warhol
- LULU The man who sold the world
- THE VELVET UNDERGROUND I'm waiting for my man
- LOU REED Walk on the wild side
- THE KINKS Lola
- DAVID BOWIE Rock 'n' roll suicide
- MICK RONSON Growing up and I'm fine
- MORRISSEY Glamourous glue
- BAUHAUS Ziggy Stardust
De paso, tambi¨¦n se escuchan aqu¨ª canciones que anticipan las rupturas de David Bowie. Y grabaciones posteriores que reflejan sus ecos. Es el momento para recordar el pacto con Morrissey, que el mancuniano incumpli¨® con toda su soberbia. O aquella pel¨ªcula de Tony Scott llamada El ansia, donde David encarnaba a un vampiro que acud¨ªa a un concierto de Bauhaus para cazar a una pareja ansiosa de sexo. No busquen met¨¢foras: ciertamente, era un seductor infalible. ?Era? Sigue si¨¦ndolo, como ha demostrado con The next day.
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