Salvador Dal¨ª y las pel¨ªculas
Jordi Moll¨¤ repasa la labor cinematogr¨¢fica del pintor, de quien se acaba de cumplir el 25? aniversario de su muerte
Esta semana se han cumplido 25 a?os de la muerte de Salvador Dal¨ª. El canal de televisi¨®n TCM recuerda este aniversario con la emisi¨®n de dos grandes pel¨ªculas en las que particip¨® el genio de Figueres: Recuerda, para la que dise?¨® los decorados de la escena del sue?o, y Un perro andaluz, la obra maestra del surrealismo que codirigi¨® con Luis Bu?uel.
TCM ofrece, adem¨¢s, una entrevista en la que el actor Jordi Moll¨¤, que ha manifestado en varias ocasiones su admiraci¨®n por Dal¨ª y el deseo de interpretarlo alguna vez en pantalla, habla de la relaci¨®n entre el pintor y el s¨¦ptimo arte.
Para Jordi Moll¨¤ Salvador Dal¨ª no solo fue un gran pintor. Fue tambi¨¦n un ¡°excelent¨ªsimo actor¡±. Uno de esos artistas que, como Federico Fellini, son capaces de crear un personaje del que no pueden escapar.
A Dal¨ª le gustaba el cine desde ni?o y a lo largo de su vida intent¨®, sin ¨¦xito, poner en pie varios proyectos. Escribi¨® un gui¨®n para Harpo Marx titulado Jirafas en ensalada de lomos de caballo que los productores no se atrevieron a desarrollar y quiso rodar una pel¨ªcula titulada La carretilla de carne para la que necesitaba cisnes suicidas, rinocerontes arrojados desde la Fontana di Trevi, una anciana vestida de torero y una tortilla francesa sobre su cabeza rapada. Al margen de estos delirios puramente?dalinianos, la colaboraci¨®n del pintor con el mundo del cine ha regalado a los espectadores momentos verdaderamente memorables.
Su aportaci¨®n m¨¢s decisiva fue, sin duda, Un perro andaluz, la pel¨ªcula que escribi¨® junto a Lu¨ªs Bu?uel en 1929 y que signific¨® el pistoletazo de salida del surrealismo en el cine.Seg¨²n cuenta el cineasta aragon¨¦s en sus memorias, un d¨ªa, cuando visitaba al pintor gerundense en su casa de Figueres, le cont¨® que hab¨ªa so?ado con ¡°una nube desflecada que cortaba la luna y una cuchilla de afeitar que hend¨ªa un ojo¡±. Dal¨ª, por su parte, le relat¨® que hab¨ªa visto en sus sue?os una mano llena de hormigas. Mano a mano crearon una historia con la idea de desterrar cualquier imagen que pudiera encerrar alg¨²n significado o simbolismo. Un filme que Jordi Moll¨¤ no se cansa de ver ni de ense?ar a sus amigos. ¡°La reacci¨®n de la gente cuando la ve es decir: ¡®Nunca olvidar¨¦ esto¡±, dice. Y a?ade: "A m¨ª me da mucha m¨¢s dentera el plano de la u?a que Bu?uel se corta con la navaja que el plano del ojo¡±.
El otro hito cinematogr¨¢fico de Salvador Dal¨ª fue su colaboraci¨®n con Alfred Hitchcock. El pintor catal¨¢n cre¨® los decorados de las escenas on¨ªricas de Recuerda, la pel¨ªcula protagonizada por Gregory Peck e Ingrid Bergman. El director brit¨¢nico recordaba en el famoso libro-entrevista escrito por Fran?ois Truffaut que no pudo realizar todas las ideas que el pintor ten¨ªa para el film entre las que se inclu¨ªan una estatua que se resquebrajaba, unas hormigas que escapaban por las grietas o a Ingrid Bergman cubierta tambi¨¦n de hormigas. Para Jordi Moll¨¤ las secuencias dalinianas de Recuerda son lo mejor de esa pel¨ªcula pero puede imaginarse al pintor cansado y decepcionado con el cine. "Un pintor puede tener una idea puntual sobre la escenograf¨ªa pero al final la importancia no reside en ¨¦l. Imagino que se sent¨ªa aburrido con este aparato que es el cine¡±, afirma.
Un cuarto de siglo despu¨¦s de su fallecimiento Dal¨ª es recordado seg¨²n el actor como ¡°un fen¨®meno de masas que es, ni m¨¢s ni menos, lo que ¨¦l mismo quer¨ªa¡±. Prueba de ello es el gran ¨¦xito que tuvo la ¨²ltima exposici¨®n de su obra que se pudo ver hace unos meses en el Museo Reina Sof¨ªa de Madrid. ¡°Yo miraba la foto inmensa de Dal¨ª que hab¨ªa en la fachada y me dec¨ªa: ¡®Lo conseguiste. Conseguiste todas estas hordas de gente para ver cuadros¡±.
Babelia
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