Jean Babil¨¦e, decano de la danza francesa
Su medio siglo de trayectoria fue un experimento continuo en busca de nuevos lenguajes
El legendario bailar¨ªn de ballet Jean Babil¨¦e (Par¨ªs, 1923) falleci¨® el pasado 30 de enero, cuando acababa de cumplir 91 a?os. El danzar¨ªn, cuyo verdadero nombre era Jean Gutmann, hab¨ªa sido ingresado de urgencia hace cinco d¨ªas en el Hospital Cochin de Par¨ªs por una fractura de la cabeza del f¨¦mur y falleci¨® por complicaciones pulmonares.
Babil¨¦e, hijo de un reputado m¨¦dico oftalm¨®logo y tambi¨¦n pintor, comenz¨® a a estudiar ballet en la escuela de la ?pera de Par¨ªs, donde sus principales profesores fueron Gustave Ricaux, Alexandre Volinine y Victor Gsovski. Desde muy peque?o,mostr¨® unas dotes excepcionales, supliendo su baja estatura con sus gr¨¢ciles proporciones, su facilidad para la t¨¦cnica y dos caracter¨ªsticas excepcionales: su ballon (ese efecto de mantenerse suspendido en el aire al saltar) y su capacidad para los roles dram¨¢ticos o po¨¦ticos. Triunf¨® en piezas que le ven¨ªan como un guante del gran repertorio tradicional: el Espectro de la rosa y El p¨¢jaro azul, pues su virtuosa rapidez de pies tambi¨¦n le dio pronta fama.
Durante la ocupaci¨®n alemana en Francia, Babil¨¦e viaj¨® a Cannes y se integr¨® en la compa?¨ªa de Marika Besobasova desde finales de 1940. En diciembre de 1944 hizo un debut triunfal en las Soir¨¦es de la danse organizadas por Irene Lidova en el Teatro Sarah Bernhardt de Par¨ªs. Ya en 1945 entra en los Ballets de Roland Petit, con los que recibe elogiosas cr¨ªticas por el papel del Joker en Jeu de cartes ¡ªcon coreograf¨ªa de Janine Charrat¡ª y en el del joven suicida de Le jeune homme et la morte, con guion de Jean Cocteau y coreograf¨ªa de Roland Petit; este papel le dio fama mundial y lo bail¨® un a?o despu¨¦s en el Teatro alla Scala de Mil¨¢n acompa?ado en el papel de La Muerte por Natalie Philippart, que adem¨¢s se convertir¨ªa en su primera esposa; bail¨® tambi¨¦n con ella en Edipo y la esfinge (1948), de David Lichine.
La primera coreograf¨ªa que firm¨® Jean Babil¨¦e fue Amour et son amour (1948, m¨²sica de C¨¦sar Franck) para el Ballet de los Campos El¨ªseos y en 1949 cre¨® un Till Eulenspiegel sobre la partitura de Richad Strauss. Despu¨¦s trabaj¨® con Aurelio Miloss en la temporada de 1950-51 en el Mayo Musical Florentino, donde encarn¨® los roles protag¨®nicos en Don Juan y Myst¨¨res. El a?o 1953 marca su regreso a la ?pera de Par¨ªs, donde bail¨® Giselle junto a Liane Dayd¨¦.
Sus creaciones para la escena de finales de los a?os cuarenta preludiaron una fecunda carrera como core¨®grafo. En 1955 produjo Balance ¨¤ trois para la ?pera de Montecarlo, con m¨²sica de Damase, reponiendo la pieza un a?o despu¨¦s en el Teatro de los Campos El¨ªseos, trabajo que altern¨® con otras creaciones, como Sable y Cam¨¦l¨¦opard, con m¨²sica de Sauguet, en los que compart¨ªa escena con Claire Sombert e Iovanka Biegovich. En estos a?os, a¨²n persist¨ªa la fama universal que consolid¨® con la pieza de Cocteau y Petit, al punto de que Lucchino Visconti idea para ¨¦l Mario y el mago (basado en el relato de Thomas Mann) en el Teatro alla Scala de Mil¨¢n en 1956, con coreograf¨ªa de Leonidas Massine.
Bail¨¦e fund¨® una compa?¨ªa propia en 1956, que se mantuvo activa hasta 1959. En esta ¨¦poca tambi¨¦n aparece en filmes de Georges Franju y Michel Drach y en obras teatrales como Orfeo desciende, de Tennessee Williams, y El balc¨®n, de Jean Genet, lo mismo que en el drama danzado La reina verde, que mont¨® Maurice B¨¦jart en 1963. El core¨®grafo Joseph Lazzini le escoge en 1967 para El hijo pr¨®digo y el bailar¨ªn gana la Estrella de Oro del Festival Internacional de Par¨ªs. Su inquietud e inter¨¦s por el arte moderno, una constante de toda su carrera, le lleva a crear en 1968 Hai-Kai para el Ballet Teatro Contempor¨¢neo. En esas fechas obtiene un sonado ¨¦xito con su propia versi¨®n de La historia del soldado de Stravinski.
En busca siempre de nuevos medios de expresi¨®n, fue uno de los primeros core¨®grafos que (en 1971) cre¨® para la televisi¨®n un ballet ayudado por una primitiva computadora.
Durante una ¨²nica temporada (1972-73), Babil¨¦e dirigi¨® el Ballet del Rhin en la ?pera de Estrasburgo. Sus cualidades f¨ªsicas le permitieron volver a la escena en Nueva York, con 56 a?os, para hacer Live (1979), ideado para ¨¦l por B¨¦jart, trabajo que repone en la ?pera de Par¨ªs.
Sus dotes f¨ªsicas le permitieron una longevidad art¨ªstica extraordinaria, ya bien entrado en su sexta d¨¦cada. Son recordadas sus repetidas apariciones junto a Rosella Hightower en el Festival de Avignon. En 2008 recibi¨® el premio a toda su carrera del Festival Internacional de Ballet de Miami. En 2000 se estren¨® un biopic sobre su figura, Le myst¨¨re Babil¨¦e, de Patrick Bensard.
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