M¨²sica de viento en la catedral de M¨¦xico

El medio centenar de turistas que deambula por los pasillos de la catedral no sabe que escucha un concierto in¨¦dito. Apenas un d¨ªa antes, en misa de domingo, el arzobispo de la Ciudad de M¨¦xico, Norberto Rivera bendec¨ªa los dos ¨®rganos erigidos sobre el coro. Con m¨¢s de tres siglos de antig¨¹edad, estos instrumentos acaban de terminar un proceso de restauraci¨®n que ha durado siete a?os. Para su reparaci¨®n, los ¨®rganos viajaron hasta Barcelona, donde se encuentra uno de los talleres m¨¢s prestigiosos del mundo, dirigido por el restaurador Gerhard Grenzing. ¡°En M¨¦xico no tenemos un especialista similar¡±, explica el padre Felipe Galicia, director del Coro de la catedral. ¡°?Por qu¨¦ nos ha llevado tanto tiempo la rehabilitaci¨®n? Pues porque est¨¢ bien hecha¡±, asegura sonriente.

Le entrevista se realiza a primera hora de la tarde del lunes, con una sinton¨ªa sobrecogedora de fondo: El ensayo del conciero que se celebra este martes para escenificar la reinauguraci¨®n de ambos instrumentos. Colocados sobre dos de los grandes arcos de la nave principal del templo, cada uno de los ¨®rganos suena diferente, explica el sacerdote, ¡°uno es brioso, el otro m¨¢s abrazador¡±. La historia de su ¨²ltima reparaci¨®n comenz¨® en agosto de 2007. ¡°Fueron dos procesos diferentes, primero empezamos con uno de los ¨®rganos y despu¨¦s pasamos al otro, pero nunca nos quedamos sin los dos a la vez¡±.

El trabajo de afinaci¨®n y armonizaci¨®n es complejo. Desde hace tres meses un equipo de profesionales trata de acoplar los dos instrumentos. ¡°Nos hubiera venido bien un mes m¨¢s, porque el sonido est¨¢ sujeto al ambiente: el clima, la humedad y la temperatura. Hay que tratar de mantener una temperatura y humedad promedio, encontrar un equilibrio. En la catedral tenemos unos 20 grados de media, pero el clima es cambiante y hay que afirnar 3.000 tubos por ¨®rgano. Ya hab¨ªamos calculado estas fechas, pero un rato m¨¢s hubiera sido mejor¡±, se sincera.

El ¨®rgano m¨¢s antiguo es el del lado oriente de la catedral, el de La Ep¨ªstola, y data de 1695. Fue modificado en 1736 por Jos¨¦ Nazarre, quien tambi¨¦n construy¨® el segundo instrumento en 1735, ubicado en el lado poniente, el del Evangelio.

Las labores de rehabilitaci¨®n de los instrumentos llegan despu¨¦s de una primera ¨¦poca de reparaciones en el edificio, en los a?os noventa. ¡°La prioridad era la correccion geom¨¦trica del templo, alterada debido al hundimiento de la propia ciudad¡±, explica Galicia. ¡°Los ¨®rganos estaban da?ados porque durante las obras para rehabilitar el edificio se retiraron las ventanas de la parte superior y cay¨® agua sobre ellos. Adem¨¢s, antes, los instrumentos hab¨ªan sufrido los efectos de la contaminaci¨®n ambiental de los a?os ochenta, la falta de mantenimiento y tambi¨¦n de uso. Se perdieron elementos de pieles que van en ellos y tambi¨¦n era necesario desmontarlos¡±.

¡°No tenemos el presupuesto final¡±, afirma el sacerdote cuando es interrogado sobre el costo de los trabajos. En octubre de 2013, cuando regres¨® a la catedral el segundo de los ¨®rganos resaturados, el CONACULTA, organismo del Gobierno encargado de la gesti¨®n cultural en M¨¦xico, inform¨® de una inversi¨®n de 16 millones de pesos. Este martes la catedral capitalina se viste de largo para la reinauguraci¨®n oficial de los ¨®rganos. El concierto comienz a las ocho de la tarde y la entrada es libre.