La trashumancia de reses bravas sigue viva: 400 animales recorren 500 kil¨®metros entre Teruel y Ja¨¦n, dos veces al a?o

Cinco hombres, 400 cabezas de ganado bravo entre vacas, becerros y a?ojos, casi 500 kil¨®metros de distancia entre Fr¨ªas de Albarrac¨ªn (Teruel) y Vilches, en la provincia de Ja¨¦n, 30 d¨ªas de camino por cinco provincias y tres comunidades aut¨®nomas, bueyes, caballos y perros, casi 20.000 euros de inversi¨®n, y una exuberante dosis de romanticismo podr¨ªan ser los protagonistas de un suceso ¨²nico y ancestral ¡ªla trashumancia del siglo XXI¡ª que comenz¨® el pasado 26 de noviembre por las fr¨ªas tierras de Arag¨®n y que pretende llegar a su destino en Andaluc¨ªa entre el 28 y el 30 de este mes de diciembre.

Todo un mes atravesando v¨ªas pecuarias ¡ªsenderos, ca?adas, veredas y caminos asfaltados¡ª para huir del fr¨ªo y la nieve y pastar durante el invierno en la bonancible provincia andaluza, hasta que lleguen las calores del inicio del verano, y otra vez, camino de vuelta, otros 30 d¨ªas de camino, hasta el m¨¢s benigno clima veraniego aragon¨¦s.

Y as¨ª lo vienen haciendo desde 1940 las reses de Alicia Chico, la ganadera fallecida sin hijos a los 59 a?os en 2022, que cumpli¨® la tradici¨®n iniciada por su abuelo, Pedro Garc¨ªa Lafuente, y continuada por sus padres. El relevo lo ha tomado Tom¨¢s Gonz¨¢lez, mayoral y ganadero de hecho mientras se dirime una decisi¨®n definitiva sobre la herencia.

Gonz¨¢lez, de 45 a?os, natural de Puebla del Pr¨ªncipe (Ciudad Real) y dedicado al cuidado del ganado bravo desde que era un chaval afirma con absoluta firmeza que ¡°esta trashumancia que hacemos dos veces al a?o tiene un alt¨ªsimo componente de romanticismo y de respeto a la memoria de la ganadera fallecida y sus ascendientes¡±.

¡°Estos viajes tienen un alt¨ªsimo componente de romanticismo y de respeto a la memoria de la ganadera fallecida y sus ascendientes¡± (Tom¨¢s Gonz¨¢lez, mayoral)

Llama la atenci¨®n, adem¨¢s, sobre el coste de la actividad, ¡°casi 20.000 euros cada vez que bajamos o subimos, lo que significa que llegar¨¢ el d¨ªa en que no podamos hacerla por razones estrictamente econ¨®micas¡±. ¡°Es verdad que, en general, durante un mes los animales se alimentan de lo que hay en el campo¡±, a?ade, ¡°pero debo hacerme cargo de los sueldos, las comidas y el pienso si nos encontramos con la nieve u otra dificultad¡±.

Y sin ayudas, a pesar de que la UNESCO declar¨® en 2023 la trashumancia Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. ¡°Reclamamos que el Gobierno de Arag¨®n, comunidad a la que pertenecemos, se implique y nos ofrezca alg¨²n tipo de apoyo¡±, dice el mayoral. ¡°Que se nos compense de alg¨²n modo¡±, a?ade, ¡°a quienes trabajamos para que perdure una tradici¨®n pr¨¢cticamente desaparecida en nuestro pa¨ªs y que ha sido reconocida por la UNESCO¡±.

Tom¨¢s Gonz¨¢lez confiesa la satisfacci¨®n que le produce la doble trashumancia anual. ¡°Por eso lo hago, porque me hace feliz, y por puro romanticismo, porque carece de rentabilidad econ¨®mica¡±.

La ganader¨ªa de Alicia Chico est¨¢ compuesta por unas 500 reses, ¡ª180 vacas de vientre¡ª, menos de las habituales a causa de las restricciones que impuso la pandemia. La casa ganadera cuenta con tres hierros, la sangre brava es originaria de Santa Coloma y Manuel Arranz, y su negocio radica fundamentalmente en los encierros de campo que se celebran en la sierra de Albarrac¨ªn. ¡°Mi meta es lidiar en plazas¡±, se?ala el mayoral, ¡°pero, por el momento, lo que nos da de comer son los encierros¡±.

Pregunta. ?Cu¨¢les son las ventajas y los inconvenientes de la trashumancia?

Respuesta. El beneficio fundamental es que las fincas descansan y se permite el crecimiento de la hierba; otro es que huimos del fr¨ªo y la nieve de Teruel y de las altas temperaturas del verano de Ja¨¦n, y los animales lo agradecen.

El perjuicio deriva de las dificultades que entra?a el manejo de los animales en un trayecto tan largo, y por terrenos no siempre adaptados al paso de la manada, a pesar de la vigente ley de V¨ªas Pecuarias de 1995. La veterinaria Mar¨ªa del Carmen Garc¨ªa Moreno declaraba hace unos d¨ªas al programa Tendido Cero de RTVE, ¡ªque ha dedicado tres reportajes a este recorrido¡ª, que la norma reconoce la existencia de 120.000 kil¨®metros de v¨ªas pecuarias para el tr¨¢nsito de animales, ¡°pero como la trashumancia se est¨¢ perdiendo, las administraciones se han olvidado de ella¡±, explicaba. Esta realidad permite que algunos agricultores siembren en los caminos, dificulten as¨ª el tr¨¢nsito de los animales y provoquen conflictos con los vaqueros. ¡°Las v¨ªas pecuarias son corredores ecol¨®gicos que mantienen la biodiversidad all¨¢ por donde transcurren¡±, contin¨²a Garc¨ªa Moreno; ¡°todo lo que hagamos en ese corredor, que es suelo de dominio p¨²blico, no se hace solo por el bien de los trashumantes, sino por el de la biodiversidad¡±. ¡°Un ganadero m¨¢s que producir carne¡±, termina, ¡°es gestor de un territorio de alto valor ambiental¡±.

No todo el ganado de Alicia Chico hace el camino a pie. Los novillos y los toros son trasladados en cami¨®n ¡°para evitar que ellos decidan la selecci¨®n por el camino¡±, aclara con sorna Tom¨¢s Gonz¨¢lez.

Avanzan cada d¨ªa unos 20 kil¨®metros, atraviesan las provincias de Teruel, Cuenca, Albacete, Ciudad Real y Ja¨¦n, pertenecientes a las comunidades aut¨®nomas de Arag¨®n, Castilla-La Mancha y Andaluc¨ªa, y la manada se deja ver por tres pueblos, Villanueva de la Fuente, Viveros y Solera de Gabald¨®n.

¡°Reclamamos que se nos compense por mantener una tradici¨®n pr¨¢cticamente desaparecida en nuestro pa¨ªs¡±

Cuatro hombres van a caballo y uno, Eleuterio, hermano de Tom¨¢s y su mano derecha, abre paso con un todoterreno y se encarga de elegir el lugar id¨®neo para colocar la cerca el¨¦ctrica que agrupa a los animales cuando cae la noche. A su lado, en constante vigilancia, los vaqueros duermen en tiendas de campa?a, ¡°de esas que utilizan los alpinistas¡±, aclara Gonz¨¢lez.

Antonio Basc¨®n Sevi, fot¨®grafo profesional y entusiasta de esta experiencia, los acompa?a en el viaje, y cuenta que ¡°a pesar de que esta noche (el pasado martes) hace cinco grados bajo cero, dentro de la tienda y con un buen saco no se nota la baja temperatura¡±.

Y queda el futuro. Tom¨¢s Gonz¨¢lez asegura que seguir¨¢ la trashumancia mientras ¨¦l pueda, y Sevi no es muy optimista.

De momento, la Nochebuena y la Navidad la pasar¨¢n en el campo. ¡°Aqu¨ª se pierde la noci¨®n del tiempo y no sabes en qu¨¦ d¨ªa vives¡±, afirma Sevi. ¡°Quiz¨¢, compraremos una caja de gambas¡­¡±

Las vacas y los becerros descansan (¡°cuando est¨¢n comidos, los animales no dan guerra¡±, comenta el mayoral), antes de final de a?o tienen previsto llegar a la finca jiennense Los Pendoncillos, y all¨ª pastar¨¢n hasta la primavera. En los primeros d¨ªas de junio iniciar¨¢n el viaje de vuelta. ¡°Somos la ¨²nica ganader¨ªa brava que hace un camino tan largo¡±, apostilla Gonz¨¢lez.

Es el compromiso con una tradici¨®n, la trashumancia, casi perdida ya en el t¨²nel del tiempo, pero reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Y mantenida, en este caso, por los animales bravos.

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