La ¡°peste¡± de los recuerdos

¡°?Adi¨®s, maestro Gabo!¡±, ¡°Por siempre Gabo¡±, ¡°Gracias Maestro¡±, ¡°Luto en Macondo¡±. ¡°Gabo inmortal¡±. As¨ª titularon los principales diarios de Colombia sus especiales sobre Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez? que muri¨® ayer en Ciudad de M¨¦xico a los 87 a?os. Pero m¨¢s que el relato de una dolorosa partida, lo que ocurri¨® desde el mediod¨ªa del jueves fue un emotivo ejercicio de memoria colectiva, una avalancha espont¨¢nea de gratos recuerdos.

Al d¨ªa siguiente del homenaje en M¨¦xico, en Bogot¨¢, en la Catedral Primada de Colombia, ubicada en la emblem¨¢tica Plaza de Bol¨ªvar, se le rendir¨¢ un homenaje al Nobel con una presentaci¨®n de la Orquesta Sinf¨®nica de Colombia a cargo del director chileno Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Mondrag¨®n, que interpretar¨¢ el Requiem de Mozart. Seg¨²n el Ministerio de Cultura, adem¨¢s se presentar¨¢ el bajo colombiano Valeriano Lanchas, la Sociedad Coral Santa Cecilia, dirigida por el maestro Alejandro Zuleta Jaramillo, y Pablo Mart¨ªnez, tenor; Ana Cristina Mora, contralto, y Julieth Lozano, soprano.

El acto, que se realizar¨¢ a medio d¨ªa, estar¨¢ presidido por el presidente Juan Manuel Santos y se transmitir¨¢ por las cadenas p¨²blicas de radio y televisi¨®n para que los colombianos de todos los rincones puedan unirse a la despedida. Tambi¨¦n se ha dispuesto habilitar pantallas gigantes en la Plaza de Bol¨ªvar para que nadie se quede sin dar su ¨²ltimo adios.

¡°Para nosotros, los colombianos, Gabo no invent¨® el realismo m¨¢gico sino que fue el mejor exponente de un pa¨ªs que es ¨Cen s¨ª mismo¨C realismo m¨¢gico. Un pa¨ªs que combina alegr¨ªa y dolor, poes¨ªa y conflictos, en el que las mariposas amarillas cruzan los senderos y hermosas ni?as de nombre Remedios ascienden entre s¨¢banas al cielo. Un pa¨ªs donde todo es posible, sobre todo la vida. Colombia entera debe tanto a Garc¨ªa M¨¢rquez¡­¡±. As¨ª lo describi¨® el presidente Juan Manuel Santos durante una corta alocuci¨®n. Luego decret¨® tres d¨ªas de duelo nacional.

El Nobel colombiano sol¨ªa decir que escrib¨ªa para que sus amigos lo quisieran m¨¢s, por eso Santos, en su homenaje, dijo que el autor de Cien a?os de soledad ¡°debe saber hoy ¨Cdesde el Olimpo de los genios¨C que 47 millones de colombianos lo queremos mucho, ?much¨ªsimo!, y que el mundo entero, sin excepci¨®n, lo despide con honores¡±.

El diario El Tiempo, el m¨¢s importante de Colombia, no dud¨® en calificar a Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez como el colombiano m¨¢s notable de todos los tiempos, y anticip¨¢ndose a la edici¨®n especial que circular¨¢ este domingo, public¨® en su portal web un emotivo editorial donde record¨® que de entre el gran listado de facetas del escritor que muchos recordar¨¢n por estos d¨ªas, hay que destacar que Gabo fue el que m¨¢s divulg¨® el nombre de Colombia.

¡°?l recuper¨®, adem¨¢s, el sereno orgullo nacional. Cuando nuestro pa¨ªs era sin¨®nimo de narcotr¨¢fico, ¨¦l aport¨® con su Nobel una refrescante bocanada de prestigio. Y al coronar lo que parec¨ªa una utop¨ªa, mostr¨® a otras figuras nacionales que era posible alcanzar lo m¨¢s alto, como lo han hecho, en su campo y a su medida, Fernando Botero, Shakira, Carlos Vives, Rodolfo Llin¨¢s, Falcao Garc¨ªa, C¨¦sar Rinc¨®n y algunos cuantos m¨¢s¡±, dice el editorial de El Tiempo, que como es costumbre no circula el Viernes Santo, pero el jueves en la noche sac¨® un extra de 12 p¨¢ginas, cuyos 70.000 ejemplares se agotaron en una hora.

El otro diario capitalino, El Espectador, que fue la casa del Nobel a mediados de los a?os 50 donde public¨® su famosa serie de reportajes titulada Relato de un n¨¢ufrago y en 1947 su primer cuento La tercera resignaci¨®n, lo describi¨® como un personaje m¨¢gico. ¡°Como ¨¦l mismo lo retrat¨® en la primera parte de su autobiograf¨ªa Vivir para contarla, donde relat¨® su vida en Aracataca, las tardes en que sal¨ªa a pasear con su abuelo Nicol¨¢s M¨¢rquez y la impresi¨®n que le dej¨® Kafka y Faulkner. Garc¨ªa M¨¢rquez fue su literatura y viceversa¡±, dice la presentaci¨®n del especial firmado con el aut¨®grafo del escritor y que se ampliar¨¢ este fin de semana en una publicaci¨®n de 120 p¨¢ginas.

Aunque no est¨¢ muy claro si tras la incineraci¨®n en M¨¦xico va a haber honras f¨²nebres en Colombia, su hermana A¨ªda, quien vive en Barranquilla, ha declarado a medios locales que estas deber¨ªan realizarse en Colombia. ¡°Con seguridad ¨¦l viene¡±, dijo a las pocas horas de enterarse de su muerte, aunque reconoci¨® que esa decisi¨®n la tomar¨¢n en M¨¦xico sus dem¨¢s familiares.

La muerte del Nobel coincide con la visita a Bogot¨¢ de m¨¢s de 1.500 artistas de todo el mundo que se encuentran reunidos hace casi dos semanas viviendo la fiesta m¨¢s grande del teatro en Iberoam¨¦rica. Ellos tambi¨¦n se unieron al ¨²ltimo adi¨®s del escritor y su directora, Anamarta de Pizarro, calific¨® al escritor como el mayor creativo de Colombia. ¡°Que las mariposas amarillas de su creaci¨®n nos sigan iluminando siempre¡±.

Por ahora, en Colombia, adem¨¢s de los tres d¨ªas de luto y la bandera a media asta, el Ministerio de Cultura est¨¢ convocando a los colombianos de todos los rincones a participar de una lectura masiva y en voz alta de El coronel no tiene quien le escriba. La cita es el pr¨®ximo 23 de abril, cuando se celebra el d¨ªa del libro, en todas las bibliotecas p¨²blicas, plazas y parques del pa¨ªs. La mejor forma de homenajear a Gabo, es leyendo a Gabo.