Las marionetas no son algo menor

Mois¨¦s mide 60 cent¨ªmetros y tiene grandes aspiraciones. Con su cabeza de cart¨®n, y sus movimientos ¨¢giles que provocan la risa, interpela a sus creadores. Aunque sea una marioneta, no hay derecho a que la tengan condenado a los cumplea?os y a fiestas varias; ¨¦l desea ser un actor serio y, encima de una mesa, encontrar¨¢ por fin su oportunidad. Filosofa, reflexiona y recurre a la mism¨ªsima Biblia si hace falta para esgrimir sus argumentos, movido por tres personas siguiendo la tradici¨®n japonesa del bunraku. Con The table, de la compa?¨ªa brit¨¢nica Blind Summit Theatre, arranca Titirimundi, el festival internacional de teatro de t¨ªteres de Segovia. El evento ocupa las calles, las plazas, los espacios cerrados, patios e iglesias de la ciudad, con la obsesi¨®n que persigue a Mois¨¦s, y que fue descrita por el diario The Guardian en su rese?a del espect¨¢culo sobre el torturado t¨ªtere: no porque las miniaturas sean las que se suban al escenario hay que pensar en peque?o. Su director, Julio Michel, dijo durante la presentaci¨®n del festival que este a?o se trata de rendir homenaje al arte de las marionetas.

Son cinco d¨ªas ¡ªdel 14 al 18 de mayo¡ª en que 25 compa?¨ªas procedentes de 10 pa¨ªses (Argentina, B¨¦lgica, Bulgaria, Chile, Ecuador, Espa?a, Francia, Italia, Reino Unido y Rusia) participan en esta cita que supone una rareza, y que se ha tenido que abrir paso con dificultades por el camino. Si el n¨²mero de ediciones suma 28, como explica Michel por tel¨¦fono, en realidad Titirimundi, "un momento festivo y un vendaval de ilusi¨®n que transforma la ciudad" cumple los 30. Por falta de dinero, no se celebr¨® en 1988 y 1989; y a punto estuvo de morir entonces.

El espect¨¢culo de Blind Summit Theatre sirve tambi¨¦n para ilustrar uno de los objetivos que se marca, por el deseo de que los t¨ªteres act¨²en para los ni?os, y tambi¨¦n para los adultos, renovando un arte que se ha tendido a arrinconar. No en vano la compa?¨ªa brit¨¢nica, que estren¨® la historia del atribulado Mois¨¦s en el Festival Fringe de Edimburgo en 2011 para coleccionar despu¨¦s muchos aplausos, persigue la adaptaci¨®n de los t¨ªteres al mundo de los mayores. Titirimundi se extiende a la tradici¨®n, pero tambi¨¦n a la vanguardia; va de la risa que nace del est¨®mago, a la sonrisa que provoca la iron¨ªa y la cr¨ªtica bien hecha. O mezcla lo popular con lo m¨¢s sofisticado. Y desea que las peque?as criaturas que act¨²an y que se remontan al deseo humano m¨¢s antiguo de dar forma a los dioses se luzcan con otras disciplinas: la m¨²sica, el cine y el circo son parte de los espect¨¢culos. El evento, elogiado por los profesionales de este mundo, lleva a sus espaldas la presencia de 881 compa?¨ªas de 50 pa¨ªses.

"Hemos sido testigos de una transformaci¨®n extraordinaria estos ¨²ltimos a?os", se?ala Michel, quien destaca tambi¨¦n Dan¡¯s l¡¯atelier, de Tof Th¨º¨¤tre, que narra las tribulaciones de una marioneta reci¨¦n nacida que se quiere liberar de la manipulaci¨®n, como homenaje a ese arte que reivindica. El evento retoma un empe?o a?o tras a?o: que el teatro de t¨ªteres se difunda y en combinar "un muestrario de la actualidad", junto con la tradici¨®n. "Despreciarlo es desconocer la realidad. Hay en el teatro de marionetas una versatilidad y riqueza que no se encuentra en otras formas de expresi¨®n esc¨¦nica", subraya el director.

Los estrenos son nueve: La caravana de l¡¯horreur, de Bak¨¦lite; The Table, de Blind Summit Theatre; Algo huele a podrido, de Elvis Alatac; El capote y Sobre la cuerda floja, de la compa?¨ªa chilena Teatro Milagros; Teatrical Automobile, del Teatro ruso Tehb, La Boucherie Renard, de la compa?¨ªa belga Bo?te ¨¤ clous; Dan¡¯s l¡¯atelier, de Tof Th¨º¨¤tre, y Tumba-Lumba, del Teatro Estatal de Burgas, Bulgaria. Los espacios, como el uso de una caravana, apostada en las ruinas de San Agust¨ªn, juegan para el efecto. Por ejemplo, la compa?¨ªa Bak¨¦lite apuesta por encerrar a 17 espectadores en uno de estos veh¨ªculos para que su espect¨¢culo La caravana de l¡¯horreur d¨¦ la vuelta a los clich¨¦s que manejan los thrillers hollywoodenses por obra y gracia del teatro de objetos. Teatrical Automobile reh¨²ye la convenci¨®n con su uso de una furgoneta que se transforma en escenario teatral, con un decorado con sillas de terciopelo, mientras la m¨²sica suena con los libretos de ¨®peras de Bizet, Glinka, Tchaikovsky, Mozart o K¨¢lm¨¢n.

Titirimundi se conjuga con talleres en los que se explica la elaboraci¨®n de marionetas de cer¨¢mica que se insertan en los dedos para tener vida propia. De madera. De materiales reciclados. La exposici¨®n formada por las 35 figuras que representan figuras del romancero popular o la literatura del escultor y marionetista nacido en C¨¢diz Francisco Peralta contin¨²a en Segovia como muestra permanente en la Puerta de Santiago. A esta se suma la exposici¨®n de cien mu?ecos de gomaespuma de mu?ecos televisivos en Espa?a, de la casa Mu?ecos Animados.

Otro de los m¨¦ritos a los que se puede apuntar el evento es que ya cuenta con sucursales en ?vila, Burgos, Le¨®n, Salamanca, Valladolid, a Zamora, Madrid, Bara?ain (Navarra) o Redondela (Pontevedra), lugares en los que se representan 96 funciones. Adem¨¢s de las representaciones en los distintos escenarios de Segovia, en la calle aparecen personajes que ya son una tradici¨®n: uno de ellos es Dominique Kerignard, con su adiestramiento de pulgas en su peculiar circo. O Rod Burnett, con sus marionetas arraigadas en lo m¨¢s tradicional, Punch & Judy.