Juli?o Sarmento: ¡°?Por qu¨¦ las cosas tienen que ser lo que parecen?¡±

Desde sus primeras exposiciones, con solo 18 a?os, a Juli?o Sarmento (Lisboa, 1948) le han interesado siempre los mismos temas: el vac¨ªo, el erotismo, la memoria, las apariencias. Con incontables exposiciones por todo el mundo, lo ¨²nico que ha cambiado en su narrativa son los soportes. Si en su reciente exposici¨®n en la galer¨ªa neoyorquina Sean Kelly sorprend¨ªa con esculturas femeninas realizadas sobre impresi¨®n digital en tres dimensiones, en el museo gallego ha preferido mostrar 30 obras correspondientes a sus series esenciales. Titulada Guest or Host?, la exposici¨®n supone tambi¨¦n el estreno de David Barro (Ferrol, 1974) como nuevo director de la Fundaci¨®n Luis Seoane de A Coru?a.

Las piezas de Juli?o Sarmento, esculturas, pinturas y un v¨ªdeo, ocupan dos plantas completas del edificio. Con algunas variaciones, la muestra se expondr¨¢ el pr¨®ximo a?o en el CAAM de Las Palmas de Gran Canaria.

Dos d¨ªas antes de la apertura de la exposici¨®n, Sarmento controla los ¨²ltimos detalles junto a David Barro, conocedor de la obra del portugu¨¦s desde hace d¨¦cadas. Mientras buscan cartelas con las que identificar cada pieza, Barro explica las obras van desde los inicios de la d¨¦cada de los ochenta hasta el momento presente, en un esfuerzo por mostrar al espectador el car¨¢cter poli¨¦drico del trabajo del artista. Todas han sido prestadas por coleccionistas que siguen a Sarmento desde sus primeros trabajos.

Las bell¨ªsimas esculturas de mujeres sin rostro han sido estrat¨¦gicamente colocadas entre pinturas y papeles cargados de referencias a sus grandes mitos literarios o cinematogr¨¢ficos: Marguerite Duras, James Joyce, Raymond Carver, Faucault, Pina Bausch, Atom Egoyan. Junto a los dibujos, Sarmento incluye citas atribuidas a estos autores que en general jam¨¢s fueron formuladas por ellos. ¡°Lo que me importa es dibujar las letras. No corto y pego, las dibujo. El texto es para m¨ª muy importante, pero como gesto. No tiene por qu¨¦ corresponder a la realidad¡±.

Devoto de Marcel Duchamp, es dif¨ªcil conseguir que Sarmento se preste a teorizar sobre su obra. No hay un motivo especial por el que las mujeres tengan un enorme protagonismo en su obra, que ¨¦l se niega a clasificar dentro de una tendencia determinada, y le da la risa cuando se le menciona que algunos la han calificado de posconceptual.

Contemplar una obra de Sarmento produce la misma sensaci¨®n que mirar una pantalla del ordenador con cinco aplicaciones abiertas a la vez. ¡°O leer tres libros simult¨¢neamente¡±, sugiere el comisario, David Barro. ¡°No hay por qu¨¦ definir las cosas¡±, dice Sarmento. "El espectador es el que tiene la ¨²ltima palabra sobre lo que est¨¢ contemplando. No hay que descartar nada ni las cosas tienen que ser lo que parecen. ?Por qu¨¦ iban a serlo?¡±.

Satisfecho por el inter¨¦s que su trabajo despierta en Espa?a (esta es la primera exposici¨®n en Galicia, pero es un habitual de los museos espa?oles) lamenta que no haya una mayor fluidez entre los artistas de ambos pa¨ªses. Cree que son m¨¢s los espa?oles que exponen en Portugal que los portugueses que lo hacen en Espa?a y opina que es una pena que exista ese desconocimiento. ¡°Espa?a y Portugal siguen sin mirarse. Una pena¡±.

Sarmento cree que el panorama de museos y galer¨ªas en toda la pen¨ªnsula no es el ¨®ptimo, pero lamenta que en Portugal la situaci¨®n sea aun peor que en Espa?a. ¡°Es incre¨ªble que a estas alturas del siglo XXI en Lisboa no exista ning¨²n museo p¨²blico dedicado al arte contempor¨¢neo. Inexplicable. Hemos tenido nuestra propia burbuja inmobiliaria, sin embargo en mi pa¨ªs ni siquiera se ocuparon de construir museos¡±.

La obra de Sarmento est¨¢ repleta de literatura y cine. Reconoce el artista que son muchos los amigos que proceden de esas formas de expresi¨®n. ¡°Yo soy un friki del cine, lo menos parecido a un espectador de arte y ensayo. Paul Verhoven (Instinto b¨¢sico, Showgirls) es ¨ªntimo amigo m¨ªo desde hace muchos a?os. Tambi¨¦n Martin Brest (Superpoli en Hollywood, Esencia de mujer ) y, sobre todo, la exactriz porno Sasha Grey. Con Atom Egoyan hemos colaborado juntos en algunos proyectos. Soy un colgado del cine. Mi casa est¨¢ llena de pel¨ªculas por todas partes¡±.

Aunque viaja mucho por todo el mundo, su domicilio habitual y lugar de trabajo se encuentra en Estoril, a unos 20 kil¨®metros de Lisboa, una casa colindante con la famosa Villa Giralda, la antigua residencia de los condes de Barcelona, donde cada d¨ªa siguen llegando decenas de autobuses de turistas, seg¨²n comenta el artista. All¨ª es donde trabaja sin parar y donde frecuentemente se re¨²ne con otros artistas para hablar de todo lo que se les pasa por la cabeza.¡±Amigos ¨ªntimos no tengo, porque han muerto: Juan Mu?oz, Michael Tarantino o Ernesto de Sousa, con el que estuve en Alternativa Zero, un proyecto de finales de los 70 en el que aprend¨ª mucho sobre el vac¨ªo y la provocaci¨®n¡±.