Pened¨¨s

Hasta ahora, que un banco llevara el nombre de su regi¨®n o ciudad de nacimiento era un motivo de orgullo para los vecinos, que ve¨ªan la potencia de denominaciones como Santander o Bilbao Vizcaya en las m¨¢s altas resonancias internacionales. Pero si ya el esc¨¢ndalo CajaMadrid reclamaba que el dicho tradicional de De Madrid al cielo se reescribiera como De CajaMadrid al trullo, no han sido pocas las ciudades y comarcas salpicadas por esc¨¢ndalos en sus cajas, en sus bancos o, en su versi¨®n transexual, bancajas. Para muchos, el Pened¨¨s es la hermosa regi¨®n de los vinos y el cava y las playas m¨¢s libres, pero en los ¨²ltimos sumarios es tambi¨¦n la sede de Caixa Pened¨¨s, y el escenario de la primera condena a directivos bancarios por saqueo de su entidad. Los cuatro imputados reconocieron los hechos delictivos que se les imputaban y pactaron devolver 28 millones de euros a la entidad que absorbi¨® la caja.

Las cantidades defraudadas corresponden a planes de jubilaci¨®n que se propinaron a s¨ª mismos cuando ya el barco zozobraba. Sus actos estaban guiados por la impunidad general que ha sacudido a este pa¨ªs. En un repaso pormenorizado del caso, el periodista ??igo de Barr¨®n apuntaba que la clave para alcanzar esta sentencia y la devoluci¨®n del dinero a cambio de una reducci¨®n de la condena para evitarles el ingreso en prisi¨®n se deb¨ªa a la determinaci¨®n judicial y un proceso conducido de manera eficaz, r¨¢pida y concreta por las autoridades que van de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n de Barcelona al tribunal pasando por la Audiencia Nacional del juez Pedraz. Pero tambi¨¦n destacaba que al personarse la entidad como acusaci¨®n particular los tr¨¢mites ganaron en transparencia.

Vivimos un momento que exige limpieza, auditor¨ªa y transparencia. Quien no est¨¦ dispuesto a ello, lo mejor es que se aparte de las instituciones. Este juicio ha sido un buen ejemplo para tantas absorciones de bancos y cajas. La escasa motivaci¨®n de otras entidades para llegar a aclarar el hundimiento financiero de sus sellos nos perjudica a todos. Porque, como sucede en los equipos de f¨²tbol, los bancos pasean el nombre de su tierra, as¨ª que har¨ªamos bien en vigilarlos mejor, porque su agua sucia nos termina por bautizar a todos.