Vivo cantando

Los detractores de Amanece en Edimburgo podr¨¢n decir (y con raz¨®n, pues parte de un musical teatral de 2007), que su estilo est¨¢ mucho m¨¢s cerca de los simpl¨ªsimos espect¨¢culos a mayor gloria de la nostalgia por un grupo que del musical cl¨¢sico americano, por muy sencillas y estereotipadas que fueran aquellas tramas, pero entre el p¨¢ramo actual del g¨¦nero, en cuanto aparece una pel¨ªcula en la que los personajes se ponen a cantar los fan¨¢ticos nos encendemos de gozo. Carta de amor a la preciosa Edimburgo a trav¨¦s de las canciones de The Proclaimers, la pel¨ªcula apela a pasiones tan b¨¢sicas como el amor, la guerra, la familia y hasta el pub, por medio de un guion truculento. Entre el cat¨¢logo de pesares, puede que entre ciertos espectadores se impongan sus ganas de agradar y los festivos acordesfolk del grupo. Ni m¨¢s ni menos. Con un servidor lo consiguieron.